Amenaza de demolici¨®n para un colegio palestino
La escuela de Khan al Ahmar ser¨¢ derruida por el traslado forzoso de una comunidad beduina
![Un ni?o camina por el poblado beduino de Khan al Ahmar.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/HU2JUMV4N4N3CHZE7PPX2D2LCQ.jpg?auth=cb332cfd2c022caa5c4ace0b7ccbc9287b02d86562dd6036cde64be792d6f60d&width=414)
El ministro de Educaci¨®n palestino, Sabri Saidam, inaugur¨® esta semana el nuevo curso escolar en la escuela del poblado beduino de Khan al Ahmar, emplazada en pleno desierto de Judea, entre Jerusal¨¦n y Jeric¨®. El colegio ¡ªun edificio construido con neum¨¢ticos y barro por la ONG italiana Vento di Terra, para eludir la prohibici¨®n israel¨ª de construir edificaciones permanentes en esa zona con materiales de construcci¨®n tradicionales¡ª, al igual que el resto de la aldea, est¨¢ pendiente de demolici¨®n.
Hace quince d¨ªas el ej¨¦rcito israel¨ª comenz¨® los trabajos para allanar el terreno y facilitar el acceso al poblado a las m¨¢quinas que, por orden de los tribunales israel¨ªes, borrar¨¢n del mapa a esta comunidad, cuyos pobladores ¡ªunos 200 beduinos¡ª se enfrentar¨¢n adem¨¢s a un desplazamiento forzoso, ya que las autoridades israel¨ªes pretenden reubicarlos entre Abu Dis e Eizariya. Una zona situada al este de Jerusal¨¦n pero urbana, flanqueada por una carretera y por el vertedero municipal de la Ciudad Santa, donde no podr¨¢n dedicarse, como hasta ahora, al pastoreo de su ganado.
Los abogados que llevan el caso han logrado retrasar la demolici¨®n y el traslado forzoso apelando a la Corte Suprema de Israel, que ha fijado la vista del caso para el pr¨®ximo 1 de agosto. Una cita que el Estado hebreo trat¨® sin ¨¦xito de acelerar, para lograr que la sentencia ¡ªque pocos piensan ser¨¢ favorable para Khan al Ahmar¡ª se ejecutase de inmediato, antes de que los estudiantes regresasen a la escuela.
Los 185 ni?os inscritos para este curso ¡ªde Khan al Ahmar y otras localidades cercanas¡ª comenzaron este lunes con su rutina escolar de 7.30 a 13.30 y con la incertidumbre de si, tras la vista, las excavadoras terminar¨¢n con una escuela que lleva casi una d¨¦cada funcionando y con una comunidad que se asent¨® ah¨ª en 1951, tras ser expulsada de Tel Arad, en el desierto del Negev, por las autoridades israel¨ªes de la ¨¦poca. ¡°Resistiremos pac¨ªficamente hasta el final. No nos expulsar¨¢n por segunda vez¡±, asegura Eid Abu Khamis (51), el l¨ªder de la comunidad beduina.
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