56 ni?as que no olvidan en Guatemala
41 chicas murieron calcinadas en Guatemala, en marzo de 2017, en el centro en el que supuestamente deb¨ªan cuidarlas. 15 siguen recuper¨¢ndose. Sus familiares exigen justicia y mejor atenci¨®n para ellas
Brendy Susana Cuy Urizar cri¨® a su sobrina Yohana Desir¨¦ desde que tan s¨®lo ten¨ªa un a?o y medio. La adolescencia fue una etapa complicada para ella y decidi¨® irse de la casa. La familia respet¨® la decisi¨®n de Yohana con la esperanza de que cambiara de actitud y decidiese regresar con el tiempo. Pero la vida de Yohana y la de otras cuarenta ni?as m¨¢s terminaron el 8 de marzo de 2017 en el Hogar Seguro Virgen de la Asunci¨®n, en Guatemala. Ese d¨ªa ardi¨® el centro en el que viv¨ªan. 41 ni?as murieron calcinadas y 15 sobrevivieron con graves quemaduras, de las que hoy se siguen recuperando.
¡°A ellas se les call¨® la voz y por eso estamos nosotras ac¨¢, y gracias a Mujeres Transformando el Mundo que nos est¨¢n apoyando como guerreras¡±, dice Brendy Susana. A su lado se encuentra Paula Barrios, directora de la organizaci¨®n: ¡°Necesitamos de la denuncia y del acompa?amiento internacional¡±, sostiene Barrios. Ambas visitaron Madrid a finales de junio para participar en el Encuentro Internacional De las violencias contra las mujeres en Guatemala y Centroam¨¦rica a la (des)protecci¨®n internacional.
Ante los asistentes denunciaron el maltrato y las malas condiciones en las que viv¨ªan en el centro adscrito a la Secretar¨ªa de Bienestar Social del Gobierno de Guatemala aproximadamente 600 menores, aunque ten¨ªa capacidad para 400.
Ning¨²n conflicto con la ley
La vida de Yohana y la de otras cuarenta ni?as m¨¢s terminaron el 8 de marzo de 2017 en el Hogar Seguro Virgen de la Asunci¨®n, en Guatemala. Ese d¨ªa ardi¨® el centro en el que viv¨ªan
Hartas del hacinamiento, los abusos sexuales, las violaciones, la comida en mal estado y las condiciones insalubres, el 7 de marzo de 2017, 104 menores, en su mayor¨ªa ni?as, se fugaron del centro, pero fueron capturadas por la Polic¨ªa Nacional Civil tras el aviso del director. Como castigo, encerraron a las 56 ni?as menores en un aula de 46 metros cuadrados. Tras pasar toda la noche bajo llave sin poder salir al ba?o, a las nueve de la ma?ana una ni?a prendi¨® una colchoneta para que les abrieran la puerta. Pero tardaron en hacerlo nueve minutos, tiempo suficiente para que 41 ni?as murieran calcinadas y las otras 15 sufrieran quemaduras de hasta el 80%.
Yohana Desir¨¦ ten¨ªa 15 a?os, cuenta muy afectada su t¨ªa Brendy. ¡°En el proceso penal se nota el estigma que hab¨ªa hacia las ni?as y se quiere justificar lo que sucedi¨® con que eran problem¨¢ticas, seg¨²n los argumentos de los abogados de las personas que est¨¢n siendo investigadas¡±, sostiene Paula Barrios. Seg¨²n la organizaci¨®n, los menores no ten¨ªan conflicto con la ley y la obligaci¨®n de funcionarios y trabajadores era garantizarles, parad¨®jicamente, un hogar seguro.
Buscan una condena justa
Ya ha pasado m¨¢s de un a?o de la tragedia y la investigaci¨®n judicial contin¨²a. Las partes querellantes, entre las que se encuentra MTM y los familiares de las ni?as, piden que las tres piezas separadas en las que de desarrolla la investigaci¨®n se unifiquen. En el primer grupo investigado se encuentran el exsecretario de la Secretar¨ªa de Bienestar Social, Carlos Rodas, la exsubsecretaria de Protecci¨®n y Acogimiento a la Ni?ez y Adolescencia, Anah¨ª Keller, y el exdirector del Hogar Seguro Virgen de la Asunci¨®n, Santos Torres.
Estos responsables se enfrentar¨¢n al primer juicio por este caso el 11 de febrero de 2019. Se les acusa de abuso de autoridad, incumplimiento de deberes, homicidio culposo, lesiones culposas y maltrato contra personas menores de edad. ¡°Nuestro inter¨¦s es que se juzgue por tortura, que tiene una pena de hasta 30 a?os¡±, matiza Barrios.
En el proceso penal se nota el estigma que hab¨ªa hacia las ni?as y se quiere justificar lo que sucedi¨® con que eran problem¨¢ticas
La Procuradur¨ªa General de la Naci¨®n (PGN) ¨Cque es la entidad que se encarga de la representaci¨®n legal de todos los ¨®rganos estatales¨C est¨¢ presente en el proceso penal con distintas participaciones: se encuentran del lado de los acusadores, de los acusados y las v¨ªctimas, ya que representan a las ni?as que no tienen familiares que lo hagan. En la ¨²ltima audiencia, los querellantes pidieron al juez que instruye la causa, Pedro Rodolfo Laynez, que revisara la decisi¨®n de considerar al Estado como v¨ªctima, que se declar¨® debido a las p¨¦rdidas de patrimonio producidas por el incendio, ya que no garantiza la independencia y la defensa de las v¨ªctimas, seg¨²n los denunciantes. Sin embargo, Laynez se opuso y mantuvo que el Estado seguir¨¢ como v¨ªctima en el proceso. Desde MTM, consideran que hay una colisi¨®n de intereses ya que ¡°no puede estar la misma instituci¨®n represent¨¢ndose como v¨ªctima y victimario¡± en un mismo proceso.
Por su parte, el Gobierno de Guatemala, presidido por Jimmy Morales ¨C electo en enero de 2016, con el partido Frente de Convergencia Nacional, y que ostenta el cargo en la actualidad ¨C no ha hecho nada para reparar a las v¨ªctimas y a sus familias en este a?o y casi cinco meses despu¨¦s de la tragedia. Ni ha recibido a las ni?as sobrevivientes ni les ha apoyado econ¨®micamente para que puedan recuperarse tanto f¨ªsica como psicol¨®gicamente. Desde el Congreso de Guatemala hay una propuesta de Ley para otorgar una pensi¨®n vitalicia para las 15 ni?as sobrevivientes. Sin embargo, la ¨²ltima sesi¨®n en la que se preve¨ªa aprobarla, el pasado 18 de julio, fue suspendida por falta de qu¨®rum: acudieron 77 de 158 diputados.
Brendy Susana Cuy asegura que las familias est¨¢n mal porque sienten que el proceso no avanza y lo ¨²nico que quieren es justicia. Paula Barrios cree que se traslada a la sociedad el mensaje de que estas muertes pueden quedar impunes: ¡°La problem¨¢tica es muy compleja, no solo las 15 ni?as supervivientes, todos los menores que est¨¢n institucionalizados (dependientes del Gobierno) en Guatemala no tienen una atenci¨®n integral y no han cambiado sus circunstancias a partir de este caso¡±, sostiene Barrios.
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