Con permiso de residencia, pero sin acceso a la sanidad

Las historias de Patricia Forero y de Olga Luc¨ªa Rodr¨ªguez, ambas espa?olas, comenzaron en el mismo sitio: una sala de urgencias. Hasta all¨ª acompa?aron a sus padres, ciudadanos suramericanos con permiso de residencia en nuestro pa¨ªs, para que fuesen atendidos en centros de la sanidad p¨²blica. Ambas descubrieron que, aunque el permiso de residencia habilita el acceso a la cobertura sanitaria, sus padres no pod¨ªan acceder a este derecho. El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), encargado de conceder la titularidad para la tarjeta sanitaria, les hab¨ªa denegado esta cobertura.

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Las denegaciones siguen ocurriendo a pesar del Real Decreto aprobado el pasado viernes en Consejo de Ministros que derogaba la anterior ley de exclusi¨®n sanitaria. Desde la plataforma Yo S¨ª Sanidad Universal, que asiste al grupo de personas afectadas por el INSS, aseguran que han recibido este martes la denuncia de otra mujer afectada por el rechazo de la tarjeta sanitaria que solicit¨® para su madre.

"Est¨¢n excluyendo a ciudadanos que tienen permiso de residencia comunitario. Son padres de ciudadanos espa?oles a los que est¨¢n denegando la tarjeta sanitaria", apunta Lluc S¨¢nchez, abogado de algunas de las personas afectadas por parte del INSS. Actualmente, S¨¢nchez lleva dos casos sobre este tema. Desde Yo S¨ª Sanidad Universal, aseguran que desde el a?o 2014 m¨¢s de 40 sentencias judiciales se han resuelto a favor de los afectados.

Desde el INSS responden que no cometen ninguna ilegalidad en este sentido, y argumentan la negativa a conceder tarjetas sanitarias en base a lo que dice la Ley de Extranjer¨ªa. Las mismas fuentes de la Seguridad Social aseguran que los ciudadanos no comunitarios no pueden tener acceso a una tarjeta sanitaria hasta que no obtienen un permiso de residencia permanente. El que se concede por primera vez es temporal y tiene una duraci¨®n de cinco a?os. Por este motivo, derivan a los padres de las personas afectadas a la sanidad privada.

No obstante, la Seguridad Social est¨¢ a la expectativa de lo que dicte el Tribunal Supremo. El INSS present¨® un recurso de casaci¨®n ante el Supremo para que establezca doctrina sobre el procedimiento que debe seguir el organismo en este tipo de casos.

Para S¨¢nchez, "el INSS mezcla la legislaci¨®n de extranjer¨ªa con el tema sanitario. Les dicen que necesitan contratar un seguro privado, en virtud de extranjer¨ªa, y que como tienen este seguro no necesitan sanidad p¨²blica".

Este fue el caso de Olga Luc¨ªa. ¡°Desde la Seguridad Social siempre nos dijeron que no ten¨ªa derecho a una tarjeta sanitaria. Que ten¨ªamos que contratar un seguro privado¡±, cuenta. Cuando acudi¨® a las urgencias del Hospital Ram¨®n y Cajal de Madrid junto a su madre, aquejada de una enfermedad respiratoria, les dijeron que ten¨ªan que "firmar un compromiso" que cubriera los gastos econ¨®micos de la atenci¨®n sanitaria.

A Patricia le comentaron que el precio por atender en urgencias a su padre, que sufri¨® una hemorragia en la nariz durante unas vacaciones en Torrevieja (Alicante), era de 200 euros. "No nos atend¨ªan si no pag¨¢bamos esa cantidad, as¨ª que la acabamos abonando", reconoce. Hoy, su padre tiene una tarjeta sanitaria tras ganar en los tribunales. Su madre todav¨ªa est¨¢ en proceso judicial para obtenerla.

Hace una semana, Patricia y Olga fueron las protagonistas en la presentaci¨®n del grupo de afectadas por el INSS, que engloba a personas que se encuentran en la misma situaci¨®n que ellas y que han recurrido a la plataforma Yo S¨ª Sanidad Universal. El grupo se compone por alrededor de 30 personas que mantienen abierto un proceso judicial contra la Seguridad Social.