El granero ruso de los Nobel

A las afueras de Mosc¨², cerca de la f¨¢brica de misiles de Dolgoprudny, se alza el Instituto de F¨ªsica y Tecnolog¨ªa de Mosc¨² (MIPT), posiblemente la instituci¨®n acad¨¦mica m¨¢s prestigiosa del pa¨ªs y tambi¨¦n a la que m¨¢s dif¨ªcil es acceder por sus exigentes ex¨¢menes de ingreso.

¡°No todos los estudiantes soportan la presi¨®n psicol¨®gica que impone su estilo de educaci¨®n y algunos abandonan, no solo porque no saquen buenas notas, sino porque sufren crisis nerviosas¡±, escribi¨® Andre Geim, antiguo alumno y ganador del Nobel de F¨ªsica en 2010, en su autobiograf¨ªa para la Academia sueca. ¡°Mi cordura se salv¨® posiblemente gracias a la enorme cantidad de alcohol que algunos de mis amigos y yo consum¨ªamos despu¨¦s de cada examen para aliviar el estr¨¦s¡±, a?adi¨®.

En 1946, Nikol¨¢i Semi¨®nov, Lev Land¨¢u y?Piotr Kapitsa ¡ªfuturos Nobel de f¨ªsica en 1956, 1962 y 1978, respectivamente¡ª pidieron al Gobierno crear una nueva instituci¨®n educativa para atraer a las mentes m¨¢s brillantes de la Uni¨®n Sovi¨¦tica para que estudiasen matem¨¢ticas y f¨ªsica. Algunos de ellos acabaron trabajando en el programa de armas nucleares mientras otros se convirtieron en los mejores cient¨ªficos de sus respectivos campos. El instituto cuenta con 10 premios Nobel en ciencia entre sus catedr¨¢ticos y antiguos alumnos y es una de las 21 universidades seleccionadas por el Gobierno de Vladimir Putin dentro de un programa cuyo objetivo es colocar cinco universidades rusas entre las 100 mejores del mundo.

Geim y otros antiguos alumnos han resaltado la importancia que tuvo el MIPT para explicar sus posteriores ¨¦xitos acad¨¦micos. ¡°Como estudiantes nos forzaban a encontrar l¨®gica en todo lo que estudi¨¢bamos en lugar de aprender hechos y f¨®rmulas¡±, destaca Geim, que en 1982 entr¨® al MIPT de rebote tras ser rechazado en otra universidad de menor prestigio porque sus examinadores consideraron que pod¨ªa ser jud¨ªo.

El MIPT afronta el reto de transformarse en una universidad moderna sin abandonar el modelo de educaci¨®n p¨²blica heredado de su origen comunista. El 85% de los estudiantes que acceden a este centro no pagan ni un rublo por sus estudios, ni por su manutenci¨®n ni alojamiento. Incluso los peores estudiantes, que s¨ª tienen que pagar por sus matr¨ªculas, dejan de tener que hacerlo si sus calificaciones pasan a ser lo suficientemente buenas. ¡°Si eres un estudiante brillante, aqu¨ª te damos una oportunidad de tener una carrera¡±, resume Nikolay Kudryavtsev, rector del MIPT desde 1996 e impulsor del giro de la instituci¨®n para ganar mayor proyecci¨®n internacional y mejores colaboraciones con las empresas de alta tecnolog¨ªa. Hace unas semanas, El Pa¨ªs fue invitado a visitar el MIPT junto a un grupo de periodistas europeos y estadounidenses.

El MIPT afronta el reto de transformarse en una universidad moderna sin abandonar el modelo de educaci¨®n p¨²blica heredado de su origen comunista

Una de las razones por las que el MIPT no aparece en los principales r¨¢nkings internacionales es que no realizaba investigaci¨®n en su sede. En tiempos de la URSS el MIPT colaboraba con ¡°m¨¢s de 100" instituciones,?recuerda Kudryavtsev. La mitad eran ¡°los mejores institutos de investigaci¨®n de la Academia de Ciencias Rusa¡± y la otra mitad ¡°centros de investigaci¨®n de las industrias estatales¡±. Los estudiantes pasaban la mitad de todo su tiempo investigando en esos centros. La ca¨ªda de la URSS supuso el colapso de este sistema. En esos a?os muchos de los cerebros m¨¢s brillantes del MIPT abandonaron Rusia hacia Europa o EE UU. Es el caso de Andre Geim y su compa?ero de Nobel por el descubrimiento del grafeno, Konstantin Novoselov, que emigraron a Europa, donde siguen trabajando en la actualidad.

Uno de los objetivos del MIPT es recobrar parte de ese talento perdido. La instituci¨®n, con un presupuesto anual de unos 95 millones de euros, ha establecido sus propios departamentos de investigaci¨®n multidisciplinar que abarcan desde la fot¨®nica hasta la biolog¨ªa b¨¢sica del c¨¢ncer y su objetivo es aumentar el n¨²mero de docentes extranjeros, que actualmente solo suponen el 5%, seg¨²n Vitali Bagan, vicerrector de la instituci¨®n.

El MIPT est¨¢ entre las 50 mejores del mundo en f¨ªsica y en astronom¨ªa, seg¨²n el r¨¢nking de THE. El MIPT intenta adem¨¢s reconvertirse en una universidad que prepare a sus alumnos para trabajar en las mayores empresas de alta tecnolog¨ªa. La instituci¨®n colabora con grandes bancos y empresas tecnol¨®gicas de dentro y fuera del pa¨ªs, aunque quedan importantes asignaturas pendientes que reflejan los problemas generales del sistema de I+D en Rusia. El gasto en investigaci¨®n, desarrollo e innovaci¨®n del pa¨ªs en 2018 fue del 1,09% de su PIB, seg¨²n la OCDE, y el 75% de todos los fondos provienen del sector p¨²blico, seg¨²n el BERD, lo que sit¨²a a Rusia en el vag¨®n de cola de los pa¨ªses m¨¢s avanzados en este terreno.

Otra de las dificultades hist¨®ricas son las trabas oficiales para crear empresas, que siguen frenando la capacidad del pa¨ªs para aprovechar el talento que genera. Un caso paradigm¨¢tico son Ratmir Timashev y Andrei Baronov, dos antiguos alumnos, explica Kudryavtsev. "Trabajan en servicios de computaci¨®n en la nube¡± y juntos ¡°tienen una fortuna de unos 1.000 millones de d¨®lares¡±. ¡°La mayor¨ªa de sus negocios est¨¢n en EE UU y Suiza, solo el 3% se ha quedado en Rusia¡±, lamenta el rector. ¡°Cuando hablamos con nuestros antiguos alumnos que han tenido ¨¦xito emprendiendo en el sector tecnol¨®gico nos dicen que Rusia no tiene un sistema de impuestos favorable para crear este tipo de empresas. Creen que no es provechoso y adem¨¢s no tienen la confianza de que si crean una empresa podr¨¢n obtener buenos resultados, as¨ª que se van a EE UU o Europa¡±. ¡°Quiz¨¢s esta sea una herencia del r¨¦gimen anterior. Yo le pido a los gobernantes que simplifiquen el sistema fiscal para que Rusia sea m¨¢s atractiva para las empresas. Creo que la situaci¨®n cambiar¨¢, despacio pero cambiar¨¢¡±, concluye.