El poeta que registra el ritmo muscular de Leo Messi
Deporte, tecnolog¨ªa y literatura se unen en un viaje en el tiempo, protagonizado por dos escritores y una vieja gloria del bal¨®n
AMADO EN URUGUAY, preterido en Per¨² y rescatado en Espa?a por la editorial sevillana Sibila, el poeta vanguardista Juan Parra del Riego (Huancayo, 1894-Montevideo, 1925) public¨® poemarios futuristas como Polirritmos (1922) e Himnos del cielo y de los ferrocarriles (1925), aunque el m¨¢s memorable de sus poemas fue el Polirritmo din¨¢mico a Grad¨ªn, jugador de football, que los cultos hinchas uruguayos recitaban desde los grader¨ªos cada vez que el Negro Isabelino Grad¨ªn saltaba a la cancha: ¡°?gil, / fino, / alado, / el¨¦ctrico, / repentino, / delicado, / fulminante, / yo te vi en la tarde ol¨ªmpica jugar¡±. Gracias al polirritmo la poes¨ªa foment¨® el f¨²tbol, aunque en nuestros d¨ªas gracias al f¨²tbol los polirritmos fomentan la poes¨ªa, como le consta al poeta David Gambarte.
David Gambarte (Barcelona, 1977) reside en Finlandia y es autor de los poemarios L¨¢grimas agraces (2017) y El c¨¢lculo de la soledad (2015), as¨ª como del volumen de relatos Cuentos expatriados (2012). ?Y qu¨¦ hace escribiendo en espa?ol desde la helada Helsinki? ?Ser¨¢ que ense?a la lengua de Cervantes en las admirables escuelas finlandesas? Fr¨ªo, fr¨ªo. El poeta David Gambarte dirige el ¨¢rea de marketing de una multinacional especializada en la producci¨®n de ropa deportiva equipada con sofisticados sensores que miden la actividad muscular a trav¨¦s de electromiograf¨ªa y que almacenan la informaci¨®n en dispositivos susceptibles de ser conectados a ordenadores o redes de nubes. Clubes de f¨²tbol como el Barcelona, el Eibar o el Alav¨¦s trabajan con las equipaciones que representa Gambarte y cuyo producto estrella es el Mbody, una pantaloneta que registra y almacena en tiempo real los esfuerzos de gl¨²teos, isquiotibiales y cu¨¢driceps para la alta competici¨®n.
A David Gambarte le har¨ªa ilusi¨®n disponer de m¨¢s tiempo para escribir poemas y relatos, pero el ardor futbolero requiere su elocuencia por toda la geograf¨ªa futbol¨ªstica de la lengua espa?ola ¡ªdesde la Liga espa?ola hasta los campeonatos mexicanos y argentinos¡ª, pues los equipos m¨¢s prestigiosos desean disponer de los ¨²ltimos adelantos tecnol¨®gicos para mejorar el rendimiento de sus jugadores. La calzona digital ha tenido tanto ¨¦xito que no s¨®lo la usan los futbolistas, sino que m¨¢s de un dirigente deportivo ya lleva su Mbody conectado al m¨®vil por bluetooth. En realidad, el mecenazgo po¨¦tico del f¨²tbol es tan boyante que Gambarte ha creado una empresa que forma a preparadores f¨ªsicos en las nuevas tecnolog¨ªas para colocarlos m¨¢s tarde en clubes del Pr¨®ximo y Extremo Oriente.
En Trabajos forzados. Los otros oficios de los escritores (2011), ?Dalia Galateria nos revel¨® que Georges Perec trabaj¨® en un laboratorio cl¨ªnico, c¨®mo Colette se dedicaba a la cosm¨¦tica y que en Praga vivi¨® un comercial de seguros llamado Franz Kafka. Pienso que en aquel inventario de laburos inveros¨ªmiles no desentonar¨ªa en absoluto el poeta David Gambarte, proveedor de una equipaci¨®n que registra en las nubes los polirritmos muscu?lares de Leo Messi y otros futbolistas, haci¨¦ndole justicia po¨¦tica al Negro Grad¨ªn y a esas refinadas barras uruguayas que antes de volverse bravas recitaban los polirritmos vanguardistas del peruano Juan Parra del Riego.
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