La era del bitcoin y la tecnolog¨ªa ¡®blockchain¡¯
?C¨®mo funciona eso de lo que todo el mundo habla y nadie parece entender del todo? Este es un gran viaje que se remonta a la creaci¨®n del algoritmo
TODO EL MUNDO?ha o¨ªdo hablar de bitcoin y de las criptomonedas, sea por su componente especulativo o por su tecnolog¨ªa revolucionaria dif¨ªcil de entender. ?En qu¨¦ consiste la esencia de esta tecnolog¨ªa y por qu¨¦, potencialmente, tiene otras muchas aplicaciones?
Todo empieza en el siglo IX con el matem¨¢tico ¨¢rabe Al Juarismi, del cual proviene el nombre de ¡°algoritmo¡±. Un algoritmo es un procedimiento matem¨¢tico autom¨¢tico (tambi¨¦n denominado ¡°protocolo¡±) que ejecuta una sucesi¨®n predeterminada de operaciones. Un algoritmo es algo muy antiguo pero al mismo tiempo moderno, pues lo puede ejecutar un ordenador. Todos los dispositivos electr¨®nicos que nos rodean los ejecutan.
La tecnolog¨ªa blockchain es un algoritmo matem¨¢tico. El objetivo del algoritmo es decidir, sin intervenci¨®n humana, el consenso de una red de usuarios: establecer cu¨¢l es la opini¨®n de la mayor¨ªa. Este problema parece f¨¢cil de resolver y conocemos una soluci¨®n desde la antig¨¹edad: las consultas electorales. Basta con que cada usuario emita un voto y a continuaci¨®n el algoritmo har¨¢ recuento. Sin embargo, automatizar el proceso no es tan simple. Para una consulta electoral hace falta una log¨ªstica importante: creaci¨®n de un censo, organizaci¨®n de mesas electorales, recuentos locales¡ No queremos que nadie controle el proceso para evitar un posible pucherazo o fraude electoral.
El censo y la identificaci¨®n de los votantes son elementos claves para que los electores ingresen la papeleta una sola vez. Aunque no se haya implementado en la pr¨¢ctica, se podr¨ªa automatizar la identificaci¨®n de los votantes mediante el DNI electr¨®nico y la criptograf¨ªa. La criptograf¨ªa es una rama de las matem¨¢ticas derivada de la teor¨ªa de n¨²meros que permite cifrar documentos, firmarlos y demostrar identidades. Se utiliza en la red Bitcoin para garantizar la autenticidad de las transacciones. Pero hay otro problema a¨²n m¨¢s dif¨ªcil de resolver: no queremos que nadie controle la log¨ªstica, ni siquiera el proceso de creaci¨®n del censo. De otra forma, se podr¨ªa admitir solo en el censo a los afines y falsear el resultado a su favor.
Visto de esta manera se trata de un problema irresoluble. Plante¨¦moslo de otra forma: en la votaci¨®n vamos a permitir que participe todo el mundo, sin ning¨²n tipo de control de identidad. Enseguida nos damos cuenta de que no puede funcionar. Alguien podr¨ªa crear infinitos falsos votantes para corromper el voto. La idea ingeniosa para evitar este tipo de ataque consiste en pedir que cada participante aporte algo. Una especie de captcha para evitar que se corrompa la votaci¨®n. De forma m¨¢s concreta: en la red Bitcoin, para tener voz en la decisi¨®n de confirmaci¨®n de las transacciones se requiere que nuestros ordenadores realicen un cierto n¨²mero de c¨¢lculos. Esto se llama ¡°minado¡± y est¨¢ en el origen de la creaci¨®n de bitcoins nuevos. Con el material inform¨¢tico adecuado, el coste de computaci¨®n equivale a un gasto energ¨¦tico. Esa es la base de lo que se llama ¡°prueba de trabajo¡±. La recompensa por ello es el pago en bitcoins de nueva creaci¨®n. El punto siguiente es dise?ar las reglas de manera que alguien que no las respete sea penalizado. Una de las claves es alinear los intereses particulares con los intereses generales: si alguien intenta hacer trampas, lo tiene que pagar caro. De forma m¨¢s concreta, en la red Bitcoin, si alguien intenta hacer trampas, emplea recursos importantes de computaci¨®n, pero no recibe bitcoins a cambio. Esto permite la creaci¨®n de un c¨ªrculo de autorregulaci¨®n. La Red funciona sin polic¨ªa ni sanciones.
Este planteamiento ideal es lo que consiguen las matem¨¢ticas m¨¢gicas que est¨¢n detr¨¢s del protocolo de Bitcoin. La criptograf¨ªa, las curvas el¨ªpticas, las funciones de hash, la teor¨ªa de juegos, el equilibrio de incentivos y penalizaciones, todo ello se alinea para que est¨¢ ¡°maquinaria matem¨¢tico-inform¨¢tica¡± formada por miles de ordenadores en comunicaci¨®n funcione sin pausa (24/7) desde hace ya 10 a?os. Sin nadie al mando, tenemos una red de pago planetaria que en su conjunto decide el consenso de qu¨¦ transacciones son v¨¢lidas. El problema de la emisi¨®n de m¨²ltiples transacciones con un mismo bitcoin queda as¨ª resuelto, y eso es lo que permite la creaci¨®n de la primera moneda descentralizada. Las soluciones anteriores de este problema de ¡°doble gasto¡± pasaban por una autoridad central (un banco o una compa?¨ªa) que daba fe de la contabilidad global. El protocolo de Bitcoin tambi¨¦n fija las reglas de emisi¨®n y establece su l¨ªmite en un total de 21 millones. Estas reglas solo se pueden cambiar con un consenso abrumador de los usuarios. La Red solo se puede atacar mediante un enorme gasto energ¨¦tico que ya est¨¢ fuera del alcance de la mayor¨ªa de pa¨ªses.
La nueva tecnolog¨ªa que est¨¢ detr¨¢s de la red Bitcoin se llama ¡°tecnolog¨ªa blockchain¡±. El nombre proviene de que cada 10 minutos se produce, como venimos de explicar, un consenso (una votaci¨®n) en la Red para establecer las nuevas transacciones v¨¢lidas. Se re¨²nen en lo que se llama un ¡°bloque¡± de transacciones. Luego estos bloques se ¡°encadenan¡± criptogr¨¢ficamente de manera que no se puede reescribir ning¨²n bloque sin reescribir todos los siguientes. Obtenemos as¨ª una ¡°cadena de bloques¡±, o blockchain en ingl¨¦s, en la que reside la fiabilidad y verificabilidad de la contabilidad de la Red. Al no estar nadie al mando, la red Bitcoin se comporta como un organismo vivo. Crea su propio tiempo y muta seg¨²n los problemas que encuentra. Se basa en c¨®digo libre, y cualquiera puede aportar mejoras que solo requieren el consenso para ser implementadas.
Al no tener nadie al mando, la red Bitcoin se comporta como un organismo vivo. Crea su propio tiempo y muta
La tecnolog¨ªa blockchain y de las nuevas criptomonedas abre grandes perspectivas, similares a la revoluci¨®n de Internet del mundo de la informaci¨®n y su transmisi¨®n. Bitcoin y la tecnolog¨ªa blockchain representan una revoluci¨®n similar en el campo monetario. De la misma manera que no debemos confundir la tecnolog¨ªa de Internet con la fiebre de las puntocom, tampoco debemos hacerlo con la tecnolog¨ªa blockchain y la fiebre de falsos proyectos que abundan a su alrededor.
Aquellos que temen a la nueva tecnolog¨ªa por el potencial de suplantar funciones de la vieja banca se parecen a los que tem¨ªan a la imprenta. El gasto energ¨¦tico de las redes descentralizadas es importante, pero es probable que el balance global se incline hacia una mayor eficiencia energ¨¦tica.
Se pueden imaginar muchas otras aplicaciones de la tecnolog¨ªa block?chain para suplantar la centralizaci¨®n. Encontrar en cada aplicaci¨®n las reglas adecuadas para su autorregulaci¨®n es un problema matem¨¢tico extremadamente complejo. Por ello, aparte de las criptomonedas, existen pocas aplicaciones de momento. Incluso la demostraci¨®n de que la autorregulaci¨®n se cumple para Bitcoin es un problema complejo, donde interviene la teor¨ªa de juegos y de probabilidad, en el que trabajamos algunos matem¨¢ticos.
Ricardo P¨¦rez Marco?es matematico y Directeur de Recherches en el CNRS en Par¨ªs, Francia.
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