Examen al modelo biling¨¹e

La ense?anza biling¨¹e en colegios e institutos ha sido una de las iniciativas m¨¢s prometedoras para intentar sacar a Espa?a del secular atraso en el uso de un idioma extranjero, especialmente el ingl¨¦s, la lengua con mayor proyecci¨®n internacional y la m¨¢s demandada por los alumnos. Numerosas investigaciones destacan, adem¨¢s, los beneficios del biling¨¹ismo en los procesos cognitivos de los escolares, lo que otorga a este m¨¦todo de ense?anza un valor a?adido.

Hasta hace poco, cursar estudios en dos idiomas era considerado una opci¨®n elitista y al alcance solo de familias con un elevado poder adquisitivo. Ahora, m¨¢s de un mill¨®n de alumnos est¨¢n matriculados en centros biling¨¹es p¨²blicos y concertados, una cifra que refleja el espectacular incremento registrado en los ¨²ltimos 14 a?os, cuando empezaron a ponerse en marcha los primeros programas de aprendizaje biling¨¹es en la red p¨²blica.

En gran medida, este crecimiento ha sido fruto del empe?o de las comunidades aut¨®nomas, especialmente de aquellas que como Madrid hicieron de la escolarizaci¨®n biling¨¹e la oferta estrella de su pol¨ªtica social. Pero la ausencia de evaluaciones eficaces, ahora que ya ha transcurrido el tiempo suficiente para certificar sus resultados, hace dif¨ªcil calibrar el verdadero impacto de este modelo en la calidad de la ense?anza. Muchos profesores se quejan de que no dominan con la necesaria fluidez el idioma extranjero como para impartir su asignatura en una lengua distinta de la materna.

Hoy por hoy, la implantaci¨®n de la ense?anza biling¨¹e resulta muy dispar en las distintas comunidades aut¨®nomas. A esta falta de homogeneidad se unen adem¨¢s las diferencias en la capacitaci¨®n que se exige a los profesores seg¨²n la ubicaci¨®n del centro escolar, ya que cada regi¨®n mantiene su propio sistema de selecci¨®n. En unos casos se requiere acreditaci¨®n mediante diplomas oficiales; en otros se realizan pruebas de habilitaci¨®n.

Una de las principales debilidades del sistema de ense?anza biling¨¹e es precisamente que no hay suficientes docentes con el conocimiento ¨®ptimo y la destreza necesaria para impartir clases en ingl¨¦s. Muchos profesores ni siquiera han sido formados conforme a la metodolog¨ªa europea, que consiste en aprender un idioma a trav¨¦s de otras asignaturas, como las Matem¨¢ticas, la Geograf¨ªa o la Historia.

Una ense?anza biling¨¹e de calidad requiere, por encima de todo, una adecuada preparaci¨®n de los maestros. Y para ello los recursos financieros tienen un peso determinante. Disponer de dotaciones presupuestarias para otorgar becas a fin de que los profesores puedan curtirse en el idioma for¨¢neo con estancias fuera de Espa?a es un factor que, a la postre, beneficia al conjunto del sistema educativo. La crisis econ¨®mica, que provoc¨® dur¨ªsimos recortes en educaci¨®n, ha dejado muchos programas de perfeccionamiento en ingl¨¦s en agua de borrajas.