?Y si todos esos garabatos que haces cuando te aburres en la oficina fueran una obra de arte?

No es procrastinaci¨®n, es "escapismo no productivo". O as¨ª llama el artista Ignacio Uriarte (Krefeld, Alemania, 1972) a toda la producci¨®n art¨ªstica que surge cuando a uno lo llaman por tel¨¦fono o, en general est¨¢ distra¨ªdo. Esos clips retorcidos que componen esculturas ef¨ªmeras, producto de una conversaci¨®n donde realmente no atend¨ªas; la papiroflexia que solo cultivas cuando tienes el auricular entre el hombro y la barbilla; esos garabatos en la esquina del cuaderno, hechos mientras esperas que te pasen con una operadora... No son la prueba material de la falta de productividad, sino todo lo contrario: peque?os actos de rebeld¨ªa creativa en situaciones de la m¨¢s gris cotidianeidad.

Antes de reinventarse como artista, Uriarte estudi¨® Administraci¨®n de Empresas, y despu¨¦s trabaj¨® en las oficinas de varias firmas internacionales. Aunque en principio no existe nada m¨¢s alejado de su actividad actual que aquella experiencia, lo cierto es que sus d¨ªas como oficinista han determinado tanto su obra como el proceso que sigue para generarla. Y su ¨²ltima exposici¨®n, 'X, Y, Z', que acaba de inaugurarse (se podr¨¢ visitar hasa el 17 de marzo) en el Museo ABC de Madrid, casi parece un manifiesto de ello. All¨ª todas las piezas est¨¢n realizadas mediante dos ¨²nicos elementos: hojas de papel y rotuladores de delineante.

Ya antes de entrar en la sala, un primer dibujo nos da la idea del tono general: se trata de una composici¨®n monocroma de c¨ªrculos conc¨¦ntricos que producen impresi¨®n de relieve, y que al acercarnos desvela que el volumen se logra a base de l¨ªneas rectas entrecruzadas. Poco despu¨¦s nos topamos con otro dibujo en apariencia id¨¦ntico, y de nuevo hace falta contemplarlo de cerca para descubrir que en este caso se ha empleado un entramado curvo e irregular. "Todos los dibujos est¨¢n realizados con esas dos tramas: l¨ªneas rectas o garabatos", explica Uriarte. "Las primeras hacen pensar en una disciplina f¨¦rrea, y las segundas en algo m¨¢s inconsciente y primario".

La exposici¨®n se integra en el programa Conexiones del Museo ABC y la Fundaci¨®n Banco Santander, que comisar¨ªa el cr¨ªtico ?scar Alonso Molina, y por el que se invita a un artista a tomar sendas piezas de estas colecciones de arte como punto de partida de una exposici¨®n. En este caso, Uriarte ha seleccionado la obra Pintura blanca (1970), de Gerardo Rueda ¡ªque en realidad es una composici¨®n de vol¨²menes escult¨®ricos¡ª, y la ilustraci¨®n Aguinaldos, publicada en el suplemento Blanco y Negro en 1894.

Todo aqu¨ª pivota entre los dos extremos, el puro dibujo en dos colores y la voluntad tridimensional. De ah¨ª el t¨ªtulo: 'X, Y, Z', que son los tres ejes de la perspectiva axonom¨¦trica, "aunque tambi¨¦n pueden ser tres inc¨®gnitas en un problema, adem¨¢s de las tres formas que se encuentran en casi todas las obras de la exposici¨®n".

En efecto, aspas, tri¨¢ngulos y l¨ªneas en zigzag, pero tambi¨¦n c¨ªrculos, rect¨¢ngulos, efectos moir¨¦, simetr¨ªas y composiciones casi musicales ("rimas", las llama Uriarte) se repiten de manera meticulosa en la muestra, que por la contenci¨®n del gesto que escenifica puede entenderse como un ejercicio de minimalismo extremo. La expresi¨®n m¨¢s pura de esto la tenemos en las dos piezas que flanquean a la de Gerardo Rueda, unos murales de folios doblados y fijados a la pared con cinta de doble cara en los que sin una sola gota de tinta ¡ªsolo mediante los dobleces del papel¡ª Uriarte consigue realizar al mismo tiempo una escultura y un dibujo, algo monumental e ¨ªntimo, espiritual y prosaico, po¨¦tico y matem¨¢ticamente preciso.

Un ¨²ltimo apunte: al igual que todo oficinista contempor¨¢neo, Uriarte utiliza hojas de c¨¢lculo para realizar sus simulaciones. Como los rotuladores, los adhesivos o los folios, Excel es una de sus herramientas imprescindibles, pues con ella prueba las composiciones antes de llevarlas a la pr¨¢ctica. "Me encanta cuando las cosas cuadran", afirma.

Pues bien, esa es exactamente la impresi¨®n que tendr¨¢ todo el que visite X, Y, Z en el Museo ABC.