Hablemos de la contaminaci¨®n ac¨²stica

M¨¢s informaci¨®n

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La invisibilidad del impacto en el entorno de la contaminaci¨®n ac¨²stica es un hecho evidente ya que no deja residuos f¨ªsicos, tangibles, as¨ª como tampoco se mantiene constante en el tiempo. Este tipo de contaminaci¨®n es un fen¨®meno asociado a determinadas actividades humanas que tienen lugar en diversos emplazamientos y que, l¨®gicamente, a mayor ruido que produce una actividad, mayor ser¨¢ el nivel de contaminaci¨®n ac¨²stica.

De acuerdo con la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), el ruido es altamente perjudicial y uno de los factores medioambientales que provoca m¨¢s alteraciones en la salud, despu¨¦s de la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica. Muchos de los problemas que conlleva est¨¢n relacionados a la p¨¦rdida de audici¨®n, aunque muchos otros se relacionan a factores psicol¨®gicos (estr¨¦s, ansiedad, irritabilidad, depresi¨®n¡­) as¨ª como fisiol¨®gicos (alteraci¨®n de la frecuencia card¨ªaca y respiratoria, afectaciones de sue?o, partos prematuros¡­). Sin embargo, el problema principal es que nos hemos acostumbrado a soportar el ruido, y lo m¨¢s grave, tambi¨¦n nos hemos acostumbrado a generarlo.

Una muestra clara es la congesti¨®n de tr¨¢fico ¨C principalmente en los centros urbanos? ¨C ya que solo nosotros somos los verdaderos causantes y responsables; de hecho, solo el ruido del tr¨¢fico rodado afecta a la salud de al menos, un tercio de los europeos.

En Europa, una de cada cinco personas est¨¢ expuesta a niveles de ruido de tr¨¢fico superiores a los l¨ªmites establecidos.

La OMS considera ruido cualquier tipo de sonido superior a los 65 decibelios durante el d¨ªa y 55 decibelios durante la noche. Por lo general, la organizaci¨®n recomienda limitar la exposici¨®n al ruido de tr¨¢fico rodado a 53 decibelios mientras que, durante la noche, este umbral no debe exceder de los 45 decibelios. El tr¨¢fico a¨¦reo tambi¨¦n est¨¢ estrictamente limitado pues el ruido procedente de los aviones no debe superar los 45 decibelios durante el d¨ªa y 40 decibelios por la noche.

Tal y como se apunta en su reciente informe, el ruido procedente de las actividades vinculadas a la recreaci¨®n y tiempo libre en entornos citadinos ¨C ferias, festivales, locales, dispositivos electr¨®nicos personales¡­¨C supera muchas veces los 70 decibelios durante las 24 horas.

Desde hace a?os, la OMS recomienda a los gobiernos europeos establecer medidas para reducir la contaminaci¨®n ac¨²stica puesto que, en Europa, una de cada cinco personas est¨¢ expuesta a niveles de ruido de tr¨¢fico superiores a los l¨ªmites establecidos. Pese a que est¨¢ demostrado que la vida en la ciudad cada vez es m¨¢s ruidosa, a¨²n son pocas las localidades que se han sensibilizado con este problema.

Pero, ?qu¨¦ medidas se est¨¢n tomando para reducir la contaminaci¨®n ac¨²stica?

En la Uni¨®n Europea, las ciudades de m¨¢s de 100.000 habitantes deben informar de los niveles de contaminaci¨®n ac¨²stica mediante mapas de ruido, con el fin de que la ciudadan¨ªa est¨¦ informada y alertada. En Espa?a, todas las aglomeraciones que superan esta cifra, as¨ª como los grandes ejes de transporte, ya cuentan con los mapas de ruido (v¨¦ase a modo de ejemplo, los mapas de ruido de la ciudad de Barcelona).

En este aspecto, los ayuntamientos tienen un papel fundamental; es decir, dependiendo de la localidad donde nos encontremos habr¨¢ diferentes tipos de l¨ªmites para considerar si una actividad produce (o no) contaminaci¨®n ac¨²stica. En funci¨®n de eso, se puede alertar a las autoridades municipales competentes si se superan los l¨ªmites permitidos para tomar medidas al respecto.

Adem¨¢s, es necesaria la realizaci¨®n de planes de acci¨®n con el fin de reducir el ruido de las zonas m¨¢s afectadas.

En la actualidad ya se est¨¢n implementando estrategias y soluciones tanto preventivas como curativas para aminorar la contaminaci¨®n ac¨²stica en los entornos urbanos. Las medidas preventivas est¨¢n asociadas a aquellas que buscan la eliminaci¨®n de las fuentes de ruido; as¨ª, la peatonalizaci¨®n, la supresi¨®n de carriles o la incorporaci¨®n de zonas verdes ¨Centendidas como zonas silenciosas¨C son algunos ejemplos. Sin embargo, las medidas curativas podr¨ªan asociarse a esas intervenciones que tomamos para contrarrestar, en la medida de la posible, el impacto que produce la contaminaci¨®n ac¨²stica; algunos ejemplos podr¨ªan ser la incorporaci¨®n de la doble ventana para amortiguar el ruido exterior, la implementaci¨®n de pavimentos sono-reductores en las calzadas, las barreras ac¨²sticas en las v¨ªas r¨¢pidas, etc.

En este documento realizado por la OMS en 2018 titulado Gu¨ªas para el ruido urbano se pueden consultar todos los datos para conocer las fuentes y medici¨®n del ruido, sus efectos adversos sobre la salud, su gesti¨®n, as¨ª como conocer posibles medidas preventivas y recomendaciones para proteger nuestra salud.