C¨¦sar Vicente, 21 a?os, debuta con Almod¨®var: ¡°No me conozco, ni creo que lo haga nunca¡±
El sevillano interpreta el desnudo del a?o en la que promete ser la cinta del a?o, ¡®Dolor y gloria¡¯
El padre de C¨¦sar Vicente ya llevaba varios a?os compartiendo su extensa colecci¨®n de fotograf¨ªas, an¨¦cdotas y libros sobre Pedro Almod¨®var con su hijo cuando decidi¨® por fin sentarle a ver una de sus pel¨ªculas. Eligi¨® Mujeres al borde de un ataque de nervios, quiz¨¢ la m¨¢s apta para un chaval de 12 a?os. Como el ni?o quer¨ªa ser actor, su padre sab¨ªa que descubrir a Almod¨®var le iba a cambiar la vida. Nueve a?os despu¨¦s as¨ª ha sido, pero no como ¨¦l esperaba.
¡°La directora de mi compa?¨ªa de teatro en Sevilla me apunt¨® al casting de Los Jap¨®n, una comedia con Dani Rovira. Cuando llegu¨¦ hab¨ªa una chica sola con una c¨¢mara. Le¨ª unos di¨¢logos de esa pel¨ªcula y al d¨ªa siguiente me pidieron que volviera a Madrid¡±, recuerda hoy C¨¦sar, que naci¨® y creci¨® en Tomares (Sevilla). Era el primer casting que hac¨ªa en su vida y, al regresar a la capital, descubri¨® que esa prueba era en realidad para dos pel¨ªculas. Una era Los Jap¨®n. La otra, un proyecto secreto.
"Una vez me qued¨¦ desnudo no pensaba en si estaba inc¨®modo. Yo cre¨ªa que solo se me iba a ver el culo, pero se me ve todo. Es una escena muy bonita. Muy natural"
¡°C¨¦sar hizo una prueba inusualmente buena¡±, explica Pedro Almod¨®var, ¡°me llam¨® la atenci¨®n la intensidad e inocencia de su mirada. Una pureza que tal vez pierda con los a?os, pero que para la c¨¢mara es un tesoro¡±. En Dolor y gloria (estreno, 22 de marzo), un drama confesional en el que Antonio Banderas interpreta a un ¨¢lter ego de Almod¨®var, C¨¦sar Vicente es el alba?il que marca (involuntariamente) el primer despertar sexual del director en un flashback a su infancia: mientras se lava, el ni?o le ve desnudo y se desmaya un poco por un golpe de calor y un poco por s¨ªndrome de Stendhal.
Vicente tuvo dudas sobre la escena de desnudo. ¡°Pero luego, palante. Hay mucha gente en un rodaje, pero una vez me qued¨¦ desnudo no pensaba en si estaba inc¨®modo. Yo cre¨ªa que solo se me iba a ver el culo pero se me ve todo. Es una escena muy bonita. Muy natural¡±. En realidad lo que le puso m¨¢s nervioso fueron los primeros ensayos con el director, a los que acudi¨® temblando. ¡°?l me dec¨ªa: ¡®T¨², tranquilo¡¯, con su sonrisita, tan campechano. Pero a la vez est¨¢ muy loco, interiormente, loqu¨ªsimo. Ha sufrido y eso se nota. A veces se quedaba pensando, yo le miraba y ¨¦l ah¨ª con la mirada en alg¨²n sitio. A saber lo que ten¨ªa en la cabeza¡±. ?Alguna vez averigu¨® lo que estaba pensando? ¡°Qu¨¦ va. Nunca¡±, reconoce.
Una de las cosas que Pedro Almod¨®var ten¨ªa en la cabeza era lo sencillo que era dirigir a C¨¦sar Vicente, por lo serio y aplicado que es en su trabajo. ¡°No s¨¦ cu¨¢ntos registros tendr¨¢, pero en Dolor y gloria est¨¢ perfecto. Ha nacido para hacer este personaje... y espero que muchos m¨¢s¡±, asegura el director manchego, tan impresionado con Vicente que pierde su elocuencia habitual para describirle: ¡°Tiene una cualidad dif¨ªcil de definir¡±. El propio Vicente, de 21 a?os, tampoco encuentra todav¨ªa las palabras para identificarse. ¡°Como a¨²n no s¨¦ qui¨¦n soy, necesito meterme personajes en el cuerpo para descubrir qu¨¦ pasa. No me conozco, ni creo que lo haga nunca. Eso es lo divertido¡±, se?ala.
Su padre ya debe estar recuper¨¢ndose del disgusto que se llev¨® cuando C¨¦sar abandon¨® los estudios para ser actor: como profesor no ha conseguido convencer a su hijo de que estudie, pero como admirador de Almod¨®var va a ser quiz¨¢ la persona que m¨¢s emociones sienta cuando vea Dolor y gloria.
C¨¦sar Vicente, que se puso a llorar cuando le contaron qu¨¦ casting hab¨ªa pasado realmente (un amigo suyo, compa?ero de teatro en Sevilla, consigui¨® el papel en Los Jap¨®n), no se lo pod¨ªa creer entonces y sigue sin cre¨¦rselo ahora. ¡°Despu¨¦s de cada jornada de rodaje me met¨ªa en la cama del hotel y pensaba en qui¨¦n soy. Todav¨ªa se me olvida: me levanto por la ma?ana, cojo el m¨®vil, veo todo lo que tengo que hacer y entonces me doy cuenta de que he hecho una pel¨ªcula con Almod¨®var¡±.
Como su personaje en Dolor y gloria, un obrero analfabeto, C¨¦sar est¨¢ ansioso por aprender y para ello observa a la gente cuando cree no estar siendo observada. De Pen¨¦lope Cruz, su compa?era en casi todas las escenas, ha aprendido que hay que tomarse las cosas con calma, memorizar el texto, recapacitar y despu¨¦s pensar solo en el objetivo. ?Y en qui¨¦n se inspir¨® para construir su personaje? ¡°En C¨¦sar Vicente¡±, dice el actor. ¡°Quiero ser como ¨¦l. Yo creo que si quieres algo de verdad lo vas a conseguir¡±. Sonar¨¢ ingenuo, pero de momento la vida le est¨¢ dando la raz¨®n.
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