Algunos mitos sobre la soja que deber¨ªamos olvidar

Desconozco el motivo por el cual c¨ªclicamente sale alg¨²n art¨ªculo alarmista sobre el consumo de soja en prensa y se hace viral r¨¢pidamente. Tampoco s¨¦ por qu¨¦ la soja es un alimento que despierta las reticencias m¨¢s absurdas en los consumidores, desde el miedo a sufrir una feminizaci¨®n si eres hombre, a acusaciones sobre causar o empeorar el c¨¢ncer pasando por todo tipo de peregrinas tropel¨ªas que al parecer esta legumbre causa a nuestra salud.

Teniendo en cuenta que no hay ni un solo organismo competente y ni un solo departamento de salud de ning¨²n pa¨ªs que hayan lanzado una alerta sobre el consumo de soja a ninguna poblaci¨®n ni grupo de edad, este fen¨®meno es francamente curioso. Casi se presta a elucubraciones sobre intereses encubiertos tras toda esa mala prensa.

La soja es un alimento recomendable desde el punto de vista nutricional, como el resto de las legumbres, y no hay ning¨²n motivo para excluirla de la dieta en poblaci¨®n general

De hecho, alimentos con recomendaciones claras que indican limitar su consumo, como es la carne procesada o los productos ricos en az¨²car a?adido, generan mucha menos reticencia y se consumen a diario en un porcentaje elevad¨ªsimo de familias sin ning¨²n tipo de reparo (?Cu¨¢ntos ni?os desayunan leche chocolatada con boller¨ªa o galletas a diario?). Hasta el alcohol tiene defensores de su consumo frecuente a pesar de que la ¨²nica dosis de consumo exenta de riesgo es cero. Pero oye, que lo importante es tener ojo con la soja¡­

La soja es un alimento recomendable desde el punto de vista nutricional, como el resto de las legumbres, y no hay ning¨²n motivo para excluirla de la dieta en poblaci¨®n general. Es la campeona en contenido proteico de su grupo, siendo adem¨¢s prote¨ªna de alta calidad. Como el resto de legumbres es rica en fibra y en otros nutrientes interesantes. Adem¨¢s, es muy vers¨¢til y da lugar a muchos derivados tradicionales que son gastron¨®micamente muy apreciados: desde el miso, pasando por el tofu, el tempeh, la bebida de soja o la salsa de soja sin ir m¨¢s lejos. Y a otros m¨¢s modernos como son la soja texturizada o el Heura. Tambi¨¦n se extraen de la soja compuestos muy usados en tecnolog¨ªa alimentaria como las lecitinas que se usan como emulsionante.

No parece que tenga demasiado sentido perdernos todo eso por miedos sin fundamento.

¡°No quiero soja porque soy un hombre¡±

Pues haces mal, porque de entrada el consumo de soja reduce el riesgo de c¨¢ncer de pr¨®stata. Uno de los principales miedos a la soja viene determinado por su contenido en isoflavonas, un tipo de fitoestr¨®genos, y los supuestos efectos negativos que estas tendr¨¢n en nuestra salud hormonal, especialmente en el caso de los varones. Usando el sentido com¨²n, os remito a lo comentado arriba ?realmente cre¨¦is que si el contenido en isoflavonas de la soja perjudicara a la poblaci¨®n o causara efectos feminizantes en hombres como se oye a menudo no habr¨ªa una alerta sanitaria al respecto? (las tenemos por mucho menos) ?o no estar¨ªan las consultas m¨¦dicas a rebosar de hombres con problemas de ese tipo? ?o no tendr¨ªan graves problemas de fertilidad las zonas donde el consumo de soja est¨¢ presente en la dieta diaria?

Solo con pasar la aseveraci¨®n por la neurona de guardia, queda claro que algo falla. Tambi¨¦n podemos leer literatura cient¨ªfica reciente revisando este tema y concluyendo que los productos de soja son seguros. Hay pocos estudios de intervenci¨®n que revisen el efecto de los fitoestr¨®genos en la fertilidad masculina, pero alguno pod¨¦is leer.

La soja tampoco afecta a la concentraci¨®n de testosterona biodisponible en hombres, ni a otras hormonas. Dejemos de usar estudios hechos con suplementos de isoflavonas a dosis absurdas, estudios de casos ¨²nicos o trabajos en ratones para lanzar mensajes alarmistas sobre la soja como alimento.

?Y si le tengo que dar f¨®rmula de soja a mi beb¨¦?

Sabiendo que la mejor opci¨®n para alimentar a un beb¨¦ es siempre la leche materna, en el caso de que por alg¨²n motivo debamos alimentarlo con leche de f¨®rmula elaborada a partir de soja (siempre con consejo de la pediatra) est¨¢ bien que sepamos que las f¨®rmulas modernas de soja son seguras y los ni?os que las consumen presentan patrones de crecimiento, salud y metabolismo ¨®seo, reproducci¨®n, endocrina, inmunol¨®gica y de funcionamiento neurol¨®gico similar a la de los ni?os alimentados con f¨®rmula a base de leche de vaca o leche materna.

Estad tranquilos.

¡°No quiero soja porque produce c¨¢ncer¡±

Esta no solo es una afirmaci¨®n rotundamente falsa, sino que es al contrario. Si hay una relaci¨®n plausible entre la soja y el c¨¢ncer, ser¨ªa protectora. No aumenta el riesgo de c¨¢ncer gastrointestinal, ni el de endometrio (de hecho es protectora en c¨¢nceres ginecol¨®gicos y de mama), ni el de pr¨®stata como hemos visto m¨¢s arriba.

Si preocupa que es un producto que est¨¢ causando estragos en el ecosistema y en la vida de muchos agricultores, lo que se deber¨ªa dejar de consumir es carne

Tampoco est¨¢ contraindicada en c¨¢nceres de mama en curso, ni interfiere con algunas medicaciones habituales, a pesar de que el consejo de evitar la soja sigue siendo un cl¨¢sico en consultas de oncolog¨ªa, pese a no tener base alguna sobre la que apoyarse. Lo explica con detalle Luis Caba?as, dietista-nutricionista especializado en nutrici¨®n oncol¨®gica aqu¨ª y Liliana Cabo, tambi¨¦n compa?era nuestra que realiza actualmente su tesis doctoral en la misma especialidad y que nos lo explic¨® aqu¨ª. Ambos art¨ªculos enlazan toda la bibliograf¨ªa que los sostiene.

O podemos ir m¨¢s r¨¢pido: la misma web del WCR (World Cancer Research) nos dice de forma clara y concisa que no hay ning¨²n motivo para evitar la soja en c¨¢ncer de mama. De hecho, en sus recomendaciones para la prevenci¨®n del c¨¢ncer no menta la soja en ning¨²n momento y en cambio alienta consumo de m¨¢s ¡°cereales integrales, verduras, frutas y legumbres¡±, no al consumo de ¡°m¨¢s cereales integrales, verduras, frutas y legumbres salvo soja¡±.

Si recurrimos al AIRC (American Institute for Cancer Research) podemos leer, en resumidas cuentas, que la soja es segura tanto para aquellos diagnosticados de c¨¢ncer como para los que no. En definitiva, preocuparse por si un consumo habitual de soja o de procesados saludables a base de soja va a perjudicar a nuestra salud, no tiene base ninguna. Y muy bien nos tenemos que estar alimentando para que lo m¨¢s sospechoso de estarnos perjudicando en nuestra dieta sea el tofu.

Pero tambi¨¦n puedes creer que hay motivos para evitar la soja que no tienen que ver con tu salud.

¡°No quiero soja porque es transg¨¦nica¡±

Pues evitarla es tan f¨¢cil como revisar el etiquetado. En la Uni¨®n Europea la legislaci¨®n obliga a etiquetar los transg¨¦nicos de consumo directo humano. Es decir, si una bebida de soja, un tofu o una harina de ma¨ªz contienen transg¨¦nicos, lo pone en el etiquetado. Tenemos m¨¢s informaci¨®n en la web de la AECOSAN.

En los productos ofrecidos al consumidor final, debe constar la indicaci¨®n ¡°Este producto contiene organismos modificados gen¨¦ticamente¡± o ¡°Este producto contiene [nombre del o de los organismos] modificado[s] gen¨¦ticamente¡±. De manera que, en Europa, si no lo pone en el etiquetado, no lleva transg¨¦nicos. A lo sumo puede contener trazas, siempre por debajo del 0,9%.

Es importante se?alar que los motivos m¨¢s poderosos para evitar los transg¨¦nicos no son los de salud. La defensa de la soberan¨ªa alimentaria, la conservaci¨®n de ecosistemas y diversidad o la sostenibilidad son argumentos lo bastante potentes para evitarlos, sin necesidad de caer en mensajes de salud amarillistas o directamente falsos.

¡°No quiero soja porque deforesta el Amazonas¡±

Es loable no querer sostener el consumo de un producto que est¨¢ causando estragos en el ecosistema y en la vida de muchos agricultores. No obstante, en este caso, lo que se deber¨ªa dejar de consumir es carne, no soja, ya que es la ganader¨ªa la mayor responsable de la deforestaci¨®n, seg¨²n la FAO.

Los grandes monocultivos de soja del continente americano, se destinan en su mayor parte a pienso para el ganado. Los productos de soja para consumo directo humano, es f¨¢cil elegirlos provenientes de soja europea, que aunque solo sea por la mayor cercan¨ªa, ya es m¨¢s sostenible.

La elecci¨®n de alimentos es una elecci¨®n pol¨ªtica y ¨¦tica. No apoy¨¦is modos de producci¨®n con los que no est¨¦is de acuerdo, y la manera de no apoyarlos es no consumiendo los productos que los sustentan.

Luc¨ªa Mart¨ªnez Arg¨¹elles (@Dimequecomes), es dietista-nutricionista, m¨¢ster en nutrigen¨®mica y nutrici¨®n personalizada, TSD y bloguera en www.dimequecomes.com

NUTRIR CON CIENCIA es una secci¨®n sobre alimentaci¨®n basada en evidencias cient¨ªficas y en el conocimiento contrastado por especialistas. Comer es mucho m¨¢s que un placer y una necesidad: la dieta y los h¨¢bitos alimenticios son ahora mismo el factor de salud p¨²blica que m¨¢s puede ayudarnos a prevenir numerosas enfermedades, desde muchos tipos de c¨¢ncer hasta la diabetes. Un equipo de dietistas-nutricionistas nos ayudar¨¢ a conocer mejor la importancia de la alimentaci¨®n y a derribar, gracias a la ciencia, los mitos que nos llevan a comer mal.