Resucitada la bacteria del c¨®lera de un soldado de la Primera Guerra Mundial
La cepa ya era resistente a los antibi¨®ticos a?os antes de que se hallara la penicilina
Las bacterias que provocaron un cuadro grave de diarrea en un soldado del Imperio brit¨¢nico en la Primera Guerra Mundial (IGM) acaban de volver a la vida. Un grupo de cient¨ªficos brit¨¢nicos las ha resucitado y cultivado. La secuenciaci¨®n de su genoma muestra que la bacteria que enferm¨® a aquel militar es diferente de las que han provocado las ¨²ltimas pandemias de c¨®lera, ya contaba con resistencia a los antibi¨®ticos y ha mutado en todo este tiempo que ha estado guardada.
El soldado, del que no hay registros de su nombre y grado, cay¨® enfermo en 1916, estando en el frente oriental. Mientras convalec¨ªa en un hospital militar de Alejandr¨ªa (Egipto), tomaron muestras de sus heces, aislando bacterias de la especie?Vibrio cholerae, la causante del c¨®lera. Conservada liofilizadas (deshidratadas mediante congelaci¨®n), desde 1920 forman parte de la Colecci¨®n Nacional de Cultivos Tipo (NCTC, por sus siglas en ingl¨¦s), un repositorio p¨²blico brit¨¢nico con 5.100 cepas bacterianas. La de este soldado es una de las m¨¢s veteranas y la m¨¢s antigua de las del g¨¦nero Vibrio.
Ahora, microbi¨®logos del Wellcome Sanger Institute y la sanidad p¨²blica brit¨¢nica han recuperado, descongelado y cultivado una porci¨®n de las muestras. Una vez ampliada la colonia, los investigadores pudieron analizarlas m¨¢s de cerca y secuenciar su genoma y compararlo con el de otras 200 cepas, comparaci¨®n que ha arrojado m¨¢s de una sorpresa.
Los resultados, publicados en Proceedings of the Royal Society B, muestran que esta antigua cepa a¨²n siendo una V. cholerae, est¨¢ muy alejada de las dos variedades (serotipos) que han provocado todas las pandemias de c¨®lera desde 1800, incluida la sexta pandemia, que solo durante la IGM acab¨® con decenas de miles de soldados, en especial de las potencias centrales. Aunque carece de los genes que codifican la toxina del c¨®lera s¨ª cuenta con elementos patogenicos aislados, lo que podr¨ªa haber causado el proceso diarreico del soldado.
"Incluso aunque esta muestra no causara un brote es importante estudiar tanto las que provocan enfermedades como las que no", dice en una nota el microbi¨®logo molecular del Wellcome Sanger Institute y autor s¨¦nior del estudio, Nicholas Thomson. "Por eso, este aislado [muestra tomada del ambiente] representa una parte importante de la historia del c¨®lera, una enfermedad que sigue siendo tan importante hoy como lo fue en los siglos anteriores", a?ade.
Los autores creen que se trata de la muestra viva de la bacteria m¨¢s antigua de la que hay constancia. Llamada NCTC 30, por ocupar ese puesto en el orden del archivo, es la ¨²nica tomada de los apenas 2.500 soldados brit¨¢nicos que enfermaron por c¨®lera durante toda la guerra, una cifra muy inferior a las que afectaron a los soldados austr¨ªacos, alemanes y otomanos.
Su c¨®digo gen¨¦tico desvela que no est¨¢ relacionada con las cepas causantes de las ¨²ltimas pandemias
Adem¨¢s, NCTC 30 es toda una rareza. Se desarrolla sin el caracter¨ªstico flagelo bacteriano, un ¨²nico ap¨¦ndice que otorga su motilidad a la bacteria. En efecto, vistas al microscopio las bacterias no se mueven. "Hemos descubierto una mutaci¨®n en un gen que es cr¨ªtica para el desarrollo del flagelo, lo que podr¨ªa explicarlo", comenta el investigador del Wellcome Sanger Institute y coautor del trabajo, Matthew Dorman. La bacteria del soldado s¨ª ten¨ªa el flagelo, as¨ª que lo ha debido de perder desde entonces.
NCTC 30, o Martin 1, como hab¨ªa sido identificada al aislarla del soldado, que quiz¨¢ se apellidara as¨ª, guarda a¨²n una ¨²ltima sorpresa. Obtenida en 1916, entre sus genes hay algunos que codifican para defenderse de la ampicilina, un antibi¨®tico. Es decir, que m¨¢s de una d¨¦cada antes de que Alexander Fleming se encontrara con la penicilina, esta cepa ya hab¨ªa desarrollado resistencia a los antibi¨®ticos. Este hallazgo confirma, para los autores, que las bacterias llevan toda la vida defendi¨¦ndose de otros microorganismos.
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