El ciberactivismo construye una ciudadan¨ªa comprometida en Saint Louis
Una din¨¢mica comunidad de j¨®venes promueve a trav¨¦s de las redes la toma de responsabilidad c¨ªvica en la ciudad senegalesa
A menudo se levanta una barrera insalvable entre el activismo en el entorno digital y la movilizaci¨®n en las calles. Sin embargo, en la ciudad senegalesa de Saint Louis hay una conexi¨®n directa entre ¡°bloguear y actuar¡±, como se?ala Makhtar Ndiaye, uno de los blogueros m¨¢s populares de la localidad, que asegura que las redes tienen la capacidad de ¡°movilizar a la gente" m¨¢s all¨¢ de sus pantallas. Los ciberactivistas de la que fue primera capital del pa¨ªs han puesto su compromiso y sus habilidades, sobre todo, al servicio del civismo. Intentan, a trav¨¦s de sus acciones en Internet, construir un espacio m¨¢s amable para sus vecinos y animar su responsabilidad, para hacerlo m¨¢s habitable.
¡°Quiz¨¢ en Dakar la gente no se conozca, pero en Saint Louis, la comunidad es m¨¢s homog¨¦nea¡±, comenta Bamba Faye, otro de los blogueros destacados de la ciudad, sacando a relucir esa vieja rivalidad entre dos de las localidades hist¨®ricas de Senegal. ¡°Aqu¨ª, la gente se apropia m¨¢s f¨¢cil de las campa?as por esa proximidad¡±, enfatiza Faye. Esas conexiones que mezclan el entorno virtual y el presencial parecen ser la clave de un colectivo de ciberactivistas muy particular.
Ndiaye y Faye, como voces autorizadas de este grupo, coinciden en que uno de los principales caballos de batalla del activismo social de la ciudad es la insalubridad. ¡°Estamos rodeados por agua y en los ¨²ltimos a?os se ha hecho evidente un aumento de las basuras en las calles¡±, advierte Faye. ¡°Nosotros nos centramos en las luchas locales y entre ellas, la suciedad es una de las principales preocupaciones¡±, a?ade Niaye. Este ¨²ltimo se?ala a esa lista de retos a los que hacen frente, ¡°adem¨¢s de la basura, la erosi¨®n costera, la pesca, los desplazados clim¨¢ticos, las consecuencias del cambio clim¨¢tico y la vigilancia c¨ªvica cotidiana¡±.
El joven bloguero reconoce que las redes se usan para presionar a las autoridades en este control, pero desde un enfoque constructivo. Cuando un vecino o una vecina de Saint Louis advierte de algo que no funciona en un barrio, el alumbrado, por ejemplo, se transmite la informaci¨®n al Ayuntamiento a modo de alerta. ¡°Le avisamos por si no conoc¨ªa esa necesidad, para que en un plazo prudencial puedan poner una soluci¨®n, porque ahora tenemos una v¨ªa de comunicaci¨®n directa con ellos. Si, por ejemplo, en 24 o 48 horas vemos que no hay una reacci¨®n, entonces lo denunciamos en las redes¡±, explica Ndiaye.
Los blogueros coinciden en que uno de los principales caballos de batalla del activismo social de la ciudad es la insalubridad
?l es uno de los administradores de uno de los grupos m¨¢s populares de Facebook sobre la ciudad T'es de Saint-Louis si... que ha superado los 100.000 suscriptores. Pero no es el ¨²nico foro en el que circulan estas denuncias y estas acciones. Hay otros, din¨¢micos y animados, como How many st-louisien(e) or domou ndar are on Facebook, que cuenta 60.000 miembros.
Esta comunidad ha transmitido estas preocupaciones a las redes y se han apropiado de las herramientas digitales para propiciar el cambio. La campa?a #NdarEstSale es una de las m¨¢s intensas y extensas que han desarrollado. Ndar es el nombre con el que se conoce popularmente a la ciudad y el lema de la campa?a transmite su objetivo: Ndar (Saint Louis) est¨¢ sucia. A trav¨¦s de esta acci¨®n digital llevan m¨¢s de un a?o y medio denunciando las situaciones de insalubridad y de suciedad, intentando exponer p¨²blicamente ese problema urbano y, a menudo, sacando los colores a las autoridades municipales para intentar provocar su reacci¨®n.
Pero al mismo tiempo, han usado esas mismas redes y fundamentalmente Facebook para trascender la queja y la denuncia. Las iniciativas de trabajo comunitario de limpieza se convocan en gran medida a trav¨¦s de las redes sociales. En los grupos mencionados se comparten las citas que se replican en otros con seguimientos m¨¢s modestos. De esta manera, circulan las llamadas a participar en los domingos ciudadanos, por ejemplo, en los que se identifica la necesidad de limpieza m¨¢s imperiosa y se anima a la acci¨®n colectiva. Recoger la basura de una calle o limpiar los pl¨¢sticos son algunos de los reclamos habituales.
¡°Antes los j¨®venes de Saint Louis estaban como a la espera, era una actitud muy nuestra la de decir que las cosas se iban a arreglar, sin movilizarse realmente. Ahora quieren a su ciudad y construir un entorno en el que que sentirse orgulloso", considera un activista
Faye asegura que la juventud de Saint Louis tiene una gran voluntad de participar en el cambio y la generalizaci¨®n de las redes sociales y de las aplicaciones de mensajer¨ªa instant¨¢nea les ayudan a organizar su reacci¨®n. ¡°Antes los j¨®venes de Saint Louis estaban como a la espera, era una actitud muy nuestra la de decir que las cosas se iban a arreglar, sin movilizarse realmente. Ahora quieren a su ciudad y construir un entorno en el que que sentirse orgullosos y en la que sea una satisfacci¨®n vivir¡±, considera Faye. Para este ciberactivista una de las principales actitudes de esta poblaci¨®n joven es recuperar, "porque la hemos tenido", una ciudad limpia y acogedora.
Para Faye este compromiso es lo que ¨¦l resume en la Citizen Attitude, una especie de virus constructivo que se sirve de las redes sociales para extenderse. ¡°Intenta favorecer el compromiso y generar m¨¢s acciones pol¨ªticas por parte de los j¨®venes, que se movilicen para tomar las decisiones acertadas¡±, concreta. Para ¨¦l, adem¨¢s, estos cambios ayudar¨¢n a aumentar las perspectivas de futuro de esta misma juventud. ¡°Que se tomen medidas para fomentar las actividades econ¨®micas tambi¨¦n son decisiones pol¨ªticas y los j¨®venes tienen que poder influir¡±, concluye.
Con esa misma visi¨®n de emprendedur¨ªa, Ndiaye reclama m¨¢s recursos para animar el ecosistema digital de la ciudad. ¡°Los fondos, las actividades de formaci¨®n o los proyectos se quedan en Dakar¡±, se lamenta. Es cierto que el peso, en t¨¦rminos de poblaci¨®n, de Saint Louis se ha reducido en los ¨²ltimos a?os, pero su simbolismo y su potencial est¨¢n intactos y, por eso, sus habitantes no se resignan a un tratamiento de periferia. Ndiaye, por ejemplo, trabaja en un proyecto de espacio de innovaci¨®n que acerque a la antigua capital del pa¨ªs todas las condiciones para la aparici¨®n de nuevas empresas relacionadas con la tecnolog¨ªa ¡°que mejore la formaci¨®n, que sea un espacio para el ciberactivismo, pero que tambi¨¦n aumente las posibilidades de empleabilidad¡±, recuerda. As¨ª es como los j¨®venes activistas creen que se puede construir la Saint Louis del futuro.
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