Jared Leto (con dos cabezas) y Ezra Miller (con siete ojos) entusiasman (y espantan) en la gala Met

Si habitualmente la gala ben¨¦fica del Metropolitan Museum se convierte en el lugar en el que las celebridades ejercen con libertad el m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa, este a?o el tema ha puesto en bandeja que las redes sociales enloquezcan: el camp (o sea, el acto de revisitar lo hortera para encontrarle un punto art¨ªstico, aquello que de tan malo y rid¨ªculo acaba resultando apetecible) fue el c¨®digo de vestuario para las figuras de la cultura y la sociedad invitadas personalmente por la editora Anna Wintour.

Jared Leto ya podr¨ªa proclamarse uno de los ganadores (aunque esto no es una competici¨®n y no hay premio al m¨¢s original) del a?o pasado al presentarse en la gala como una especie de mes¨ªas (entonces la tem¨¢tica fue la religi¨®n). Este a?o sab¨ªa que ten¨ªa que superarse, as¨ª que decidi¨® aparecer con una cabeza... aparte de la suya. Vaya, con dos: una sobre sus hombros, otra en su mano. Una especie de gesto entre shakespeariano y terror¨ªfico que no era del todo original: Gucci (que visti¨® al actor) ya sac¨® a modelos desfilando con cabezas en oto?o de 2018, pero a¨²n as¨ª se convirti¨® en uno de los personajes m¨¢s comentados de la noche en redes sociales y medios de moda.

Pero Leto tuvo seria competencia este a?o. Ezra Miller (Tenemos que hablar de Kevin, Liga de la Justicia), uno de los actores m¨¢s magn¨¦ticos y atrevidos en su est¨¦tica que ha visto Hollywood, se present¨® con una sola cabeza, pero una en la que cab¨ªan siete ojos. Dos eran los suyos, cinco estaban pulcra y perfectamente maquillados sobre su piel. Su aspecto era el de monstruo mitol¨®gico. Encima de ese rostro, una peluca casi digna del Dr¨¢cula de Coppola y mucha atenci¨®n a los detalles (esas u?as blancas). Lo mejor de todo, la m¨¢scara que llevaba en su mano: cuando se la pon¨ªa, se convert¨ªa en una persona "normal".

Jared Leto y Ezra Miller han entendido que en la alfombra roja del Met hay tanto de est¨¦tica como de discurso. Con sus disfraces, los m¨¢s comentados de la noche, han dejado tambi¨¦n un comentario sobre la fama, el cine y este tipo de fiestas realmente poderoso: no solo que uno puede perder la cabeza, sino que a menudo debajo de ella se esconde un monstruo de mil ojos.

La edici¨®n estadounidense de Vogue (que adem¨¢s, a trav¨¦s de su directora Anna Wintour, organiza la gala) ya ha declarado a Ezra Miller el hombre m¨¢s impactante de la noche. Y otros medios ya hablan de que "Jared y Ezra se han quitado la m¨¢scara, literalmente". Las propuestas rompedoras de la gala del Metropolitan y la manera en que los hombres de Hollywood acaban con el cl¨¢sico (y aburrido) esmoquin ya son tal vez las verdaderas ganadoras de la noche: por fin empezamos a fijarnos igualitariamente en hombres y mujeres a la hora de analizar los atuendos de las alfombras rojas m¨¢s codiciadas del mundo. Pero esta, la del Met, siempre ser¨¢ la que tendr¨¢ a cientos de ojos sobre ella. Y, en el caso de Ezra Millar, dentro de ella tambi¨¦n.