No m¨¢s muertes en el Mediterr¨¢neo
La vida no puede ser tratada de forma t¨¢ctica. Si alguien se est¨¢ ahogando se le rescata y punto.
Digamos algunos datos, todos procedentes del Instituto Nacional de Estad¨ªstica, que no tiene miedos ni fobias, simplemente estudia los datos y los publica:
Desde 2010 el n¨²mero de inmigrantes que llega a Espa?a cada a?o es 350 veces menor que el n¨²mero de turistas que visitan anualmente nuestro pa¨ªs.
Hoy hay 1.100.000 personas inmigrantes menos en Espa?a que en 2011.
En el a?o 2014 salieron voluntariamente 500.000 personas inmigrantes del pa¨ªs, lo que supuso una dr¨¢stica disminuci¨®n del 10% en el n¨²mero de inmigrantes en Espa?a. Parad¨®jicamente este fue el a?o en que VOX denunciaba por primera vez la supuesta invasi¨®n de inmigrantes.
El Fondo Monetario Internacional establece que lo que ha salvado el Sistema de Pensiones Espa?ol de la Bancarrota desde el a?o 2000 ha sido el flujo migratorio que ha recibido entre 2000 y 2008, e insta a Espa?a a duplicar el n¨²mero de inmigrantes actual para sostener el sistema p¨²blico de pensiones.
La realidad es que las personas buscamos simplemente oportunidades de trabajo, por eso llegaron millones de personas entre el 2000 y 2008 cuando en Espa?a se alimentaba la burbuja inmobiliaria y de deuda privada, y por la misma raz¨®n abandonaron voluntariamente millones de ellas nuestro pa¨ªs desde que la burbuja estall¨® en 2008.
No fue justo, perseguir, detener, encerrar en CIES y echar a los miles de inmigrantes que hemos echado, que tras a?os trabajando legalmente en aquellos sectores, donde los espa?oles no queremos trabajar, se convirtieron en ¡°ilegales¡± cuando en 2009 perdieron su trabajo. No fue justo y tampoco era necesario, porque el 99% de las personas inmigrantes que se han ido de Espa?a lo han hecho voluntariamente buscando oportunidades de trabajo.
En definitiva, la invasi¨®n no es cierta, la noticia es la contraria. Si se tratara de dinero, en lugar de personas migrantes, el titular ser¨ªa ¡°Fuga de capitales. Espa?a se desangra¡±.
No vienen a vivir de los subsidios. Lo que mueve a toda persona inmigrante es poder trabajar
El deseo que permanece en la cabeza de una persona migrante que atraviesa desiertos, mares y vallas es el de poder trabajar. Pero, aun cuando consiga llegar, la legislaci¨®n nacional y europea les niega la posibilidad de trabajo hasta que demuestren tres a?os de residencia en Espa?a, lo que los lleva a empadronarse de inmediato y que empiece a contar el tiempo para esos tres a?os de pesadilla.
Una persona inmigrante empadronada y sin permiso de trabajo no recibe subsidio alguno. No tiene acceso a los centros de salud. Es perseguida por la polic¨ªa y, si le detienen, con gran probabilidad terminar¨¢ recluida en un Centro de internamiento de inmigrantes donde se le privar¨¢ de libertad hasta que finalmente se le deporte. La ¨²nica opci¨®n que tienen durante esos tres a?os es encontrar alg¨²n trabajo informal que les permita sobrevivir y enviar dinero a sus pa¨ªses de origen.
Como dice Adela Cortina ¡°Es imposible no comparar la acogida entusiasta y hospitalaria con la que se recibe a los extranjeros que vienen como turistas con el rechazo inmisericorde a la oleada de extranjeros pobres¡±.
Las tareas de rescate en el mar Mediterr¨¢neo no favorecen el efecto llamada.
La Organizaci¨®n Internacional de Migraciones, que tampoco tiene fobias ni miedos, cifra en m¨¢s de 3.000 el n¨²mero de muertes en el mar Mediterr¨¢neo cada a?o. La Uni¨®n Europea, detr¨¢s de su discurso de derechos humanos, no solo no tiene ning¨²n organismo dedicado al salvamento en el mar Mediterr¨¢neo, sino que adem¨¢s dificulta, y en muchos casos proh¨ªbe, las actuaciones de rescate realizadas por las ONG sobre la base de un supuesto ¡°efecto llamada¡± provocado por dichas actuaciones.
Esto es algo tan macabro como decir que los bomberos no deber¨ªan rescatar a las personas atrapadas en un incendio dom¨¦stico porque esto favorece la proliferaci¨®n de incendios. ¡°Ser¨¢n m¨¢s prudentes con el mantenimiento de la caldera si les dejamos que se quemen vivos¡± pensar¨¢n estos responsables de control migratorio.
Y dej¨¦moslo claro, las personas que se embarcan en la traves¨ªa del mar Mediterr¨¢neo no huyen de un incendio que han provocado ellos, sean guerras o pobreza o cat¨¢strofes clim¨¢ticas. Europa tiene una gran responsabilidad en dichos incendios.
Pero al margen de la causa del incendio, ?Qui¨¦n en su sano juicio piensa de esta manera? El valor de la vida de una sola persona es infinito. La vida de las personas no puede nunca ser tratada de forma t¨¢ctica o estrat¨¦gica para prevenir nada. Si una persona se est¨¢ ahogando se le rescata y punto.
Todo esto tiene soluci¨®n
El fin de las muertes en el Mediterr¨¢neo es una decisi¨®n pol¨ªtica. El programa del partido Por Un Mundo M¨¢s Justo para estas elecciones europeas prioriza terminar con las muertes en el mar Mediterr¨¢neo y con el estado de?Apartheid que sufren las personas inmigrantes irregulares.
*Alejandro Plans Beriso es portavoz general del partido Por Un Mundo M¨¢s Justo.
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