Elemental

Si una part¨ªcula elemental puede estar en dos sitios a la vez, si puede trasladarse de un lugar a otro sin pasar por en medio, si la l¨ªnea recta no es la distancia m¨¢s corta entre dos puntos porque el espacio es curvo, ?qu¨¦ raz¨®n hay para tener ideas firmes y ser una persona de palabra? En 1927, el f¨ªsico alem¨¢n Werner Heisenberg enunci¨® el principio de incertidumbre, que gobierna el mundo de las part¨ªculas elementales, por el que se establece que no es posible conocer simult¨¢neamente la posici¨®n, la direcci¨®n o la masa de la materia. Si en f¨ªsica cu¨¢ntica la certeza no existe y seg¨²n los presocr¨¢ticos el s¨ª y el no se incluyen juntos en una misma respuesta, ?por qu¨¦ nos escandaliza que muchos pol¨ªticos carezcan de principios y no cumplan con sus promesas? Al fin y al cabo se comportan seg¨²n las reglas de las part¨ªculas elementales, que les permiten ir de un bando a otro sin pasar por el centro y tener dos ideolog¨ªas contrarias. Si el principio de inseguridad e incertidumbre de Heisenberg se aplica a la democracia, resulta evidente por qu¨¦ tu voto de izquierdas puede darle la victoria a tu enemigo de derechas y al rev¨¦s. Pero contra las leyes de la naturaleza hay pol¨ªticos todav¨ªa con la mano en el pecho y la golilla de hidalgo, que creen que pactar es claudicar y se agarran a la fe como el creyente que contrata un seguro de vida y espera a la vez que la fe le asegure la salvaci¨®n eterna. Todo es relativo. La bola de cristal, que sostiene en su mano el Salvator Mundi, atribuido seg¨²n el principio de incertidumbre a Leonardo da Vinci, por el que un pr¨ªncipe saud¨ª pag¨® 450 millones de d¨®lares, podr¨ªa ser en realidad una bomba de racimo. ?Qu¨¦ va a ser de la pol¨ªtica? En Espa?a predecir es dif¨ªcil, sobre todo el pasado. Aqu¨ª puede caerte el Gordo de la loter¨ªa o una cornisa en la cabeza al salir de casa.