Arte por correspondencia
Dos de los mejores jugadores postales de la historia crearon gran belleza en los a?os sesenta
Hay tantos personajes fascinantes alrededor del ajedrez que muchos pasan casi desapercibidos para el gran p¨²blico. Uno de ellos es el ganador de esta brillante partida por correspondencia -la m¨¢s famosa de la historia de esa modalidad-, Hans Berliner (1929-2017. Hijo de una familia alemana que huy¨® de los nazis a EEUU, la pasi¨®n del ajedrez lo enganch¨® desde ni?o, pero no era su ¨²nico talento. El famoso escritor mexicano Carlos Fuentes (1928-2012) lo cita en C¨®mo empec¨¦ a escribir, con esta descripci¨®n: ¡°Siempre recordar¨¦ su rostro, moreno y tembloroso, su nariz aguile?a y los profundos ojos brillantes con su gran tristeza, la sensibilidad de sus manos (¡)¡±. Berliner tambi¨¦n destac¨® en la modalidad cl¨¢sica: jug¨® una Olimpiada (Helsinki, 1952) con la selecci¨®n de EEUU y varios campeonatos nacionales (con Fischer). Y m¨¢s tarde fue uno de los programadores pioneros: su computadora, HiTech, fue la primera que gan¨® a un campe¨®n del mundo en un juego de mesa (backgammon), en 1979, cuando trabajaba para IBM.
Fue el 5? campe¨®n del mundo por correspondencia (1965-1968). A ese torneo corresponde la c¨¦lebre partida de este v¨ªdeo, frente a un rival, Jakov Estrin (1923-1987), que ser¨ªa el 7? campe¨®n del mundo de la modalidad (1972-1976). La extraordinaria brillantez del ataque de Berliner con las piezas negras combina el esp¨ªritu rom¨¢ntico del siglo XIX con el rigor del an¨¢lisis profundo, mucho antes de que existieran los hoy invencibles programas de ajedrez.
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