Con estas cinco claves y 13 principios se intenta construir un sistema agroecol¨®gico mundial

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?Qu¨¦ es la agroecolog¨ªa?

Agroecolog¨ªa: un camino hacia el desarrollo sostenible

?Ser¨¢ la agroecolog¨ªa el futuro de la alimentaci¨®n?

Hay din¨¢micas actuales de producci¨®n de alimentos que han llevado a las empresas a acaparar tierras, erosionarlas, fomentar el uso de fertilizantes, contaminar las aguas y la atm¨®sfera, acabar con los saberes tradicionales o a que la poblaci¨®n abandone sus medios de vida y aumente su dependencia de las grandes corporaciones. Son modelos considerados ¡°insostenibles¡± por la mayor¨ªa de las personas que el pasado a?o se congregaron en el Simposio Internacional sobre Agroecolog¨ªa, celebrado en la sede de la Organizaci¨®n para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO), en Roma. Unos meses despu¨¦s, el Grupo de expertos de alto nivel del Comit¨¦ de Seguridad Alimentaria Mundial (CSA), un foro intergubernamental de Naciones Unidas en el que participan el sector privado y la sociedad civil, ha presentado en la misma ubicaci¨®n las conclusiones de un estudio que revela la necesidad de promover la transici¨®n a sistemas alimentarios sostenibles. Que sean diversificados y resilientes, que fomenten la innovaci¨®n y la investigaci¨®n, que empoderen a los grupos vulnerables y faciliten la evaluaci¨®n de estos m¨¦todos de producci¨®n que incluyen el cuidado al medioambiente y a las poblaciones.

En el resumen del informe, titulado Enfoques agroecol¨®gicos y otros enfoques innovadores en favor de la sostenibilidad de la agricultura y los sistemas alimentarios que mejoran la seguridad alimentaria y la nutrici¨®n, se exige una reorientaci¨®n de las inversiones y de los esfuerzos globales para dise?ar y aplicar modelos que abran v¨ªas de transici¨®n hacia sistemas alimentarios sostenibles. Para conseguirlo, el texto sit¨²a a la agroecolog¨ªa en el centro, un concepto que incluye pr¨¢cticas que mejoran los procesos biol¨®gicos en la producci¨®n agr¨ªcola, la reducci¨®n de uso de combustibles f¨®siles y agroqu¨ªmicos, la adaptaci¨®n a lo local, la defensa de la biodiversidad y los valores sociales o la gobernanza y la participaci¨®n en su gesti¨®n, entre otros 13 principios descritos en este documento.

La agroecolog¨ªa, descrita como un concepto ¡°din¨¢mico¡± y utilizada como marco pol¨ªtico ¡°por los movimientos sociales y organizaciones de campesinos¡±, incluye dimensiones cient¨ªficas, ecol¨®gicas, socioculturales, tecnol¨®gicas, econ¨®micas y pol¨ªticas desde la producci¨®n hasta el consumo. Y m¨¢s all¨¢ de catalogar y limitar estos procesos como ecol¨®gicos o certificados que requieren caracter¨ªsticas m¨¢s concretas, esta propuesta resume cinco recomendaciones abiertas a cada contexto que puede servir para tomar decisiones tanto de los Estados como de las autoridades locales, las organizaciones intergubernamentales, la sociedad civil, el sector privado, los centros de investigaci¨®n o las instituciones acad¨¦micas. Entre otros aspectos abarca:

1. Promover enfoques agroecol¨®gicos e innovadores: Incluye valorar la diversidad de los sistemas alimentarios y sus contextos; utilizar sistemas de medici¨®n que tengan en cuenta los impactos ambientales, sociales y econ¨®micos de la producci¨®n y el consumo de alimentos; reconocer la importancia de mejorar la huella ecol¨®gica; estimular el consumo apropiado junto con pr¨¢cticas que mantengan o mejoren el capital natural en lugar de agotarlo y estimular la integraci¨®n de las ciencias interdisciplinarias y los conocimientos locales (incluido el conocimiento ind¨ªgena) en procesos de innovaci¨®n participativos.

2. Apoyar transiciones hacia sistemas alimentarios diversificados y resilientes (Incluidos los modelos mixtos de ganader¨ªa, pesca, cultivos y agrosilvicultura, que conserven y mejoren la biodiversidad): Incorpora la reorientaci¨®n de las subvenciones e incentivos que favorezcan pr¨¢cticas insostenibles; la adaptaci¨®n de normativas sobre recursos gen¨¦ticos y propiedad intelectual para favorecer su acceso a los agricultores; el fortalecimiento de las leyes sobre la utilizaci¨®n de sustancias qu¨ªmicas perniciosas que promuevan alternativas y recompensen a quien no las emplee. Adem¨¢s de promover h¨¢bitos alimentarios saludables, pol¨ªticas de contrataci¨®n p¨²blica que refuercen estos m¨¦todos, plataformas de innovaci¨®n relacionadas con las cadenas de valor o apoyos a mercados locales, centros de procesamiento e infraestructuras. La creaci¨®n de sistemas de reciclado, reutilizaci¨®n de desechos animales, residuos de cultivos y los desperdicios del procesamiento de alimentos se proponen como pienso para animales, abono, biog¨¢s y mantillo.

3. Reforzar el apoyo a la investigaci¨®n y reconfigurar la generaci¨®n y el intercambio de conocimientos para impulsar el aprendizaje conjunto: Enmarca aumentar las inversiones en investigaci¨®n y desarrollo de los sectores p¨²blico y privado; respaldar programas; establecer mecanismos eficaces de transferencia de tecnolog¨ªa y abordar los desequilibrios de poder y los conflictos de intereses en relaci¨®n con la generaci¨®n, validaci¨®n y comunicaci¨®n de conocimientos sobre la producci¨®n y el procesamiento de alimentos.

4. Reforzar la capacidad de decisi¨®n de las personas y las comunidades y la participaci¨®n de las partes interesadas, empoderar a los grupos vulnerables y combatir las desigualdades de poder en los sistemas alimentarios: Incluye aunar a las administraciones p¨²blicas vinculadas a la agricultura, silvicultura, comercio, salud, g¨¦nero, educaci¨®n, energ¨ªa y medioambiente...; apoyar mecanismos de toma de decisiones inclusivos y democr¨¢ticos; adoptar medidas para asegurar la participaci¨®n de los grupos marginados y vulnerables en mayor riesgo de sufrir inseguridad alimentaria y malnutrici¨®n; garantizar la protecci¨®n jur¨ªdica del acceso consuetudinario a la tierra y los recursos naturales; y reconocer la igualdad de g¨¦nero como un motor clave.

5. Establecer y utilizar marcos amplios de medici¨®n y control de rendimiento: Contempla elaborar par¨¢metros e indicadores cient¨ªficamente fundamentados y exhaustivos de medici¨®n del rendimiento de los sistemas agr¨ªcolas y alimentarios como base para las evaluaciones, la aplicaci¨®n de pol¨ªticas y las decisiones de inversi¨®n. Entre ellos, se mencionan la huella ecol¨®gica, los efectos sobre los organismos, la diversidad alimentaria, los resultados nutricionales, el empoderamiento de las mujeres, la estabilidad de ingresos y las condiciones de empleo. Se detalla tambi¨¦n la reorientaci¨®n de la inversi¨®n p¨²blica y privada que eval¨²e su sostenibilidad e impacto sobre la seguridad alimentaria y la nutrici¨®n.

¡°Una considerable inercia, manifiesta en las pol¨ªticas p¨²blicas, las estructuras empresariales, los sistemas educativos, los h¨¢bitos de los consumidores y las inversiones en investigaci¨®n favorece el modelo de sistemas agr¨ªcolas y alimentarios actualmente dominante, que presenta una serie de bloqueos¡±, se lee en el resumen del texto, que detalla que el estado actual supone cuestiones ambientales y sociales ¡°que no se toman debidamente en consideraci¨®n¡±. ¡°A menos que tomemos acciones para corregir fracasos de mercado, las personas tomar¨¢n decisiones para sistemas no sostenibles¡±, se?al¨® Fergus Sinclair, jefe del equipo encargado del informe, durante la presentaci¨®n de los resultados en Roma.

Sinclair detall¨® que menos del 5% de lo que se invierte en investigaci¨®n agr¨ªcola se destina al estudio de la agroecolog¨ªa. ¡°Se tienen muchos m¨¢s datos sobre la producci¨®n convencional con fertilizantes y pesticidas, lo que facilita su adopci¨®n en detrimento de otros m¨¦todos¡±, a?adi¨® el experto. En este sentido, el informe detalla que, entre los a?os 2000 y 2009, el gasto mundial en investigaci¨®n y desarrollo (I+D) agr¨ªcolas pas¨® de 22.000 millones de euros a 30.000 millones de euros y que las inversiones mundiales en I+D se centran ¡°en unos cuantos cultivos b¨¢sicos, la mayor¨ªa cereales. Mientras que otros cultivos nutritivos (como legumbres, frutas y hortalizas y los denominados secundarios) suelen descuidarse¡±. ¡°Si la tecnolog¨ªa se combinara con agroecolog¨ªa podr¨ªa ayudar a atraer a los j¨®venes al campo. Hay un verdadero entusiasmo en esto, con aplicaciones que ponen en contacto a agricultor con los consumidores. Acercar la producci¨®n es mejor¡±, ejemplific¨® Sinclair.

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