Necesitamos los huevos

Hace unos d¨ªas, Pedro S¨¢nchez anunci¨® que iba a proponer unos equipos para negociar una investidura con Unidas Podemos. En comparaci¨®n, Hamlet ser¨ªa un arist¨®crata escandinavo propenso a tomar decisiones precipitadas. Esto indica que el presidente del Gobierno ha aprendido m¨¢s de Rajoy de lo que se suele pensar. El argumento b¨¢sico para exigir apoyos, tanto a la derecha como a la izquierda, es que ¨¦l merece gobernar: ser la minor¨ªa m¨¢s votada le da derecho autom¨¢tico, al margen de la matem¨¢tica y de la viabilidad o sensatez de las alianzas. Ante las dificultades para lograr la investidura defendi¨® una modificaci¨®n constitucional para premiar a la lista m¨¢s votada. El proyecto de Espa?a de Pedro S¨¢nchez es que gobierne Pedro S¨¢nchez: lo dem¨¢s son detalles que se decidir¨¢n m¨¢s tarde. A fin de cuentas, su trayectoria ofrece ejemplos para todos los gustos. Los l¨ªderes de Podemos y Ciudadanos, ofuscados por la ambici¨®n personal, han mostrado torpeza e irresponsabilidad (conspiracionismo e inmadurez; la cohabitaci¨®n cu¨¢ntica con Vox), mientras que Pablo Casado parece ganar sobre todo a base de desaparecer, como esos escritores que son mejores gracias a cada libro que no escriben. Los acuerdos y las cesiones que han funcionado en muchas autonom¨ªas, o la preocupaci¨®n por medidas concretas o pol¨ªticas p¨²blicas, parec¨ªan impensables para unos l¨ªderes tan narcisistas como empecinados.

Aunque parte del trabajo de los medios consiste en criticar los errores de los partidos, es f¨¢cil aceptar sus premisas. A veces es una operaci¨®n consciente; en otras ocasiones lo hacemos sin darnos cuenta. No solo naturalizamos un punto de vista como si fuera el ¨²nico leg¨ªtimo y explicamos las decisiones de los afines siguiendo criterios de racionalidad estrat¨¦gica mientras juzgamos el comportamiento de nuestros rivales seg¨²n una visi¨®n normativa. A menudo, el contagio es m¨¢s amplio: aceptamos que durante un mes despu¨¦s de las generales no hubiera negociaci¨®n entre los partidos porque hab¨ªa muchos intereses en juego. Es necesario entender c¨®mo funcionan las organizaciones, pero los suyos no son los ¨²nicos intereses que evaluar y comprender. Los pol¨ªticos y los medios parecen atrapados en un bucle que combina la histeria y la indulgencia. Es un c¨ªrculo vicioso que recuerda el chiste de Annie Hall: ¡°Estoy preocupado por mi hermano. Cree que es una gallina¡±. ¡°?Por qu¨¦ no lo llevas al manicomio?¡±. ¡°No puedo, necesito los huevos¡±.@gascondaniel