Crees que me enga?as
Si vives el verano europeo m¨¢s caluroso de la historia, tienes que saber que empeorar¨¢ si no se para los pies a Bolsonaro
El presidente autoritario de Brasil, Jair Bolsonaro, ha decidido enga?ar a los europeos. Preocupado con que los alarmantes ¨ªndices de destrucci¨®n de la Amazonia perjudiquen los tratados comerciales, especialmente el acuerdo firmado entre la Uni¨®n Europea y el Mercosur, la semana pasada destituy¨® a Ricardo Galv?o, presidente del instituto que mide la deforestaci¨®n de la mayor selva tropical del planeta. El Instituto Nacional de Estudios Espaciales, un centro cient¨ªfico respetado en el mundo, es el nuevo objetivo del odio del bolsonarismo. El ministro contra el medio ambiente, Ricardo Salles, ya ha anunciado que invertir¨¢ recursos p¨²blicos para contratar una monitorizaci¨®n paralela. En la ¨¦poca de los sat¨¦lites, el Gobierno de ultraderecha tiene la ilusi¨®n de poder controlar y manipular las estad¨ªsticas sin que le descubran.
En julio, la destrucci¨®n de la Amazonia lleg¨® a niveles aterradores: el n¨²mero de alertas de deforestaci¨®n en tiempo real fue un 212% mayor que en julio de 2018. Una parte de la selva equivalente a la suma de las ¨¢reas de Madrid y Barcelona desapareci¨® en solo 31 d¨ªas. La relaci¨®n entre la explosi¨®n de la deforestaci¨®n y el desmantelamiento del sistema de protecci¨®n ambiental es evidente. Como el principal objetivo del Gobierno es permitir que los grandes grupos agropecuarios y mineros exploten las tierras ind¨ªgenas, su dilema ahora es c¨®mo alcanzarlo sin perder a los socios comerciales que compran carne y soja, especialmente los europeos.
Ocultar datos y manipular informaci¨®n es la marca de los Gobiernos totalitarios del siglo XX, de la Alemania de Adolf Hitler a la Uni¨®n Sovi¨¦tica de Josef Stalin. El Brasil de Bolsonaro intenta utilizar las mismas t¨¢cticas en el siglo XXI. Para ello, promueve tambi¨¦n una campa?a contra periodistas, cient¨ªficos y activistas, brasile?os y extranjeros. El lunes incit¨® a sus guerrillas a odiar a quienes denuncian la devastaci¨®n de la selva: ¡°Malos brasile?os se atreven a hacer campa?a contra nuestra Amazonia con n¨²meros mentirosos¡±. Semanas antes, el antipresidente hab¨ªa demostrado toda su xenofobia al criticar a los ¡°chi¨ªes ambientales¡± y declarar: ¡°Sentimos una profunda repulsi¨®n por quienes no son brasile?os¡±.
Si vives el verano europeo m¨¢s caluroso de la historia, tienes que saber que empeorar¨¢ si no se para los pies a Bolsonaro. Paulo Artaxo, uno de los m¨¢s reputados cient¨ªficos del clima, ya ha alertado que la Amazonia puede alcanzar el punto de no retorno dentro de entre cuatro a ocho a?os. La ¨²nica lengua que Bolsonaro ¡ªquiz¨¢s¡ª entiende es la de la econom¨ªa. Brasil necesita comercialmente a Europa, y Europa tiene que abandonar el cinismo y reaccionar con urgencia al hecho de que est¨¢, s¨ª, comprando productos que provienen de la deforestaci¨®n y negociando con un Gobierno que va rumbo al totalitarismo.
Traducci¨®n de Meritxell Almarza
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