Alquileres con sentido

El alquiler se ha convertido en un problema social acuciante debido a la explosiva elevaci¨®n de los precios, causada por la escasez de viviendas existentes y por el crecimiento de la demanda derivado de la preferencia de las nuevas generaciones de profesionales por el arrendamiento. La subida desmesurada de los precios, calculada por el Banco de Espa?a en m¨¢s del 50% entre 2013 y 2018, produce a su vez un efecto angustioso sobre las familias, porque ven como una parte creciente de sus ingresos, ralentizados, cuando no directamente reducidos por la recesi¨®n, se destinan al pago de la vivienda. Espa?a es el tercer pa¨ªs de la OCDE donde m¨¢s porcentaje de ingresos familiares se gasta en acceder a un piso; el precio del alquiler supera el 40% de los ingresos en el 25% de los hogares.

Aliviar este problema deber¨ªa ser uno de los objetivos prioritarios de la legislatura. Hay que insistir, adem¨¢s, en que lo m¨¢s inteligente ser¨ªa producir los cambios legislativos necesarios con el acuerdo de los agentes econ¨®micos y financieros. No hay mejor forma de bajar los precios que aumentar la oferta de viviendas para alquiler. Por lo tanto, uno de los pasos obligados es que, de forma coordinada, las autoridades estatales y municipales promuevan la construcci¨®n de viviendas sociales en alquiler. Los Ayuntamientos tienen mucho que decir al respecto; por ejemplo, poniendo suelo p¨²blico a disposici¨®n de promociones sociales, sean para agentes p¨²blicos o privados.

Una parte del trabajo ya se ha hecho. Los Ayuntamientos, conocedores en cada municipio de la posici¨®n espec¨ªfica de la ciudad, tienen facultades para controlar los llamados pisos tur¨ªsticos. Hay nuevas normas hipotecarias y se han aprobado partidas de inversi¨®n para construir pisos sociales. Quedaba por definir un instrumento decisivo para comprender el mercado y actuar sobre ¨¦l: un ¨ªndice oficial de precios de alquiler. Fomento est¨¢ elaborando uno tomando como base las informaciones (an¨®nimas) sobre alquileres contenidas en las declaraciones del Impuesto sobre la Renta. Se trata de tener un ¨ªndice fiable, incontestado y de publicaci¨®n regular.

La importancia de un ¨ªndice de esta naturaleza es, por supuesto, estad¨ªstica. El Estado tiene que saber cu¨¢l es la evoluci¨®n de un par¨¢metro tan relevante en t¨¦rminos sociales y evitar las confusiones. Tambi¨¦n es una llave para actuar sobre el mercado de la vivienda con conocimiento de causa. Con un indicador cre¨ªble, es posible desarrollar pol¨ªticas ajustadas de intervenci¨®n. Por ejemplo, puede actuar como se?al para ofrecer incentivos fiscales a los arrendadores o a los inquilinos; o modular la construcci¨®n municipal o estatal de vivienda.

No deber¨ªa cometerse el error pol¨ªtico de minusvalorar el problema de la vivienda. Uno de los estrangulamientos sociales m¨¢s graves hoy en Espa?a es la brutal diferencia entre unas rentas familiares congeladas o menguantes frente al precio de una necesidad b¨¢sica como el alquiler que, desde el crash inmobiliario hasta hoy, se ha disparado sin freno regulatorio o administrativo alguno. Ha llegado la hora de ordenar el mercado, desde la elaboraci¨®n de un ¨ªndice de precios hasta un ambicioso plan de vivienda social, protegidas por ley de los fondos buitre.