Lluvia de estrellas y coches en El Torcal de Antequera

El paraje natural de El Torcal de Antequera, en la provincia de M¨¢laga, tiene las condiciones perfectas para disfrutar de la lluvia de estrellas que llena el cielo de chispazos en las noches alrededor del 12 de agosto. A 1.300 metros de altura, la contaminaci¨®n lum¨ªnica es m¨ªnima, las formaciones rocosas que lo conforman crean un ambiente especial y desde su observatorio astron¨®mico se organizan actividades para toda la familia con grupos de 200 personas. El ¨¦xito ha sido tan rotundo que junto a las perseidas llega otra lluvia, esta vez en forma de coches. Sus conductores los aparcan en cualquier sitio, la fila de veh¨ªculos se extiende varios kil¨®metros ¡°y todo se colapsa¡±, como explica el gerente del centro de visitantes, Jorge Alegre. ¡°Y con tanta gente es un jaleo, la experiencia pierde fuelle y, adem¨¢s, es perjudicial para el espacio natural, que tiene sus l¨ªmites¡±, subraya.

La noche del pasado s¨¢bado fue un buen ejemplo. A pesar de no haber ninguna actividad programada, el medio centenar de plazas de aparcamiento junto al edificio que da acceso al espacio se llenaron pronto, hubo coches aparcados en los bordes de la estrecha carretera de acceso y el tr¨¢fico se complic¨®. Y, como en a?os anteriores ha habido problemas mayores con la masiva afluencia de turistas, el espacio ha prohibido este a?o la llegada en coche. Ayer mismo se baj¨® la barrera que impide acceder en veh¨ªculos a motor. A cambio, los responsables del paraje han puesto a disposici¨®n del p¨²blico un autob¨²s lanzadera que, desde el parking existente a casi cuatro kil¨®metros del paraje (con un centenar de plazas), sube y baja constantemente desde las ocho de la tarde a las dos de la madrugada. ¡°La regulaci¨®n era necesaria, porque de otra manera se atascaba todo. Y hay que recordar que esto es un espacio natural¡±, cuenta Francisco G¨¢lvez, director del Observatorio Astron¨®mico de El Torcal de Antequera y del Aula del Cielo.

¡°La regulaci¨®n era necesaria. Hay que recordar que esto es un espacio natural", afirma el director del observatorio astron¨®mico

El lugar se ha convertido en la gran referencia de M¨¢laga para disfrutar de las estrellas fugaces veraniegas y miles de personas se acercan all¨ª, especialmente cada noche del 12 de agosto. Durante las ¨²ltimas semanas, los tel¨¦fonos del recinto no han parado de sonar debido a las llamadas de cientos de personas interesadas en reservar las actividades de observaci¨®n astron¨®mica que tienen a las perseidas como protagonistas. El propio G¨¢lvez indica que hay reservas con hasta un a?o de antelaci¨®n y que si los grupos que participan en las actividades del observatorio astron¨®mico fueran de 500 personas ¡°a¨²n habr¨ªa lista de espera¡±. A sus asistentes hay que sumar las empresas que ofrecen paquetes de paseo nocturno por los laberintos k¨¢rsticos de El Torcal y observaci¨®n de estrellas, las asociaciones de senderistas que tambi¨¦n acuden a la zona o las familias que llegan para realizar un p¨ªcnic nocturno a la luz intermitente de los meteoros. En total, miles de personas para un recinto con medio centenar de aparcamientos y una carretera estrecha sin arcenes.

Por todo ello, mientras en los ¨²ltimos a?os el discurso ha sido fomentar la llegada de visitantes contando las ventajas de observar las perseidas desde diversos rincones de El Torcal, ahora la estrategia ha cambiado. ¡°Cuando me preguntan recomiendo ir a verlas a otros lugares, como las cimas del Parque Natural de los Montes de M¨¢laga, los miradores de la Laguna de Fuente de Piedra, las afueras de los pueblos peque?os¡­ lo importante es alejarse de la contaminaci¨®n lum¨ªnica de la capital¡±, explica Jorge Alegre. En la provincia malague?a sobran lugares con esas condiciones, como el Parque Natural de la Sierra de las Nieves, al oeste de la provincia, o el de los Acantilados de Marco?¨C Cerro Gordo, al este, en Nerja.

Esta madrugada es la gran noche de las perseidas. Entre las cuatro y las cinco de la ma?ana se esperan entre 80 y 200 meteoros por hora. Sin embargo, el n¨²mero de visitantes es incierto porque hay dos fen¨®menos que dificultar¨¢n verlas. Por un lado, las previsiones meteorol¨®gicas apuntan a que habr¨¢ nubes. Por otro, la luna se encuentra en fase creciente ¡ªle quedan tres d¨ªas para estar llena¡ª y su brillo har¨¢ la observaci¨®n m¨¢s complicada. Ello ha hecho que esta noche la valla de acceso quede levantada, ¡°porque no se espera una gran afluencia de p¨²blico¡±. Adem¨¢s, las actividades de observaci¨®n programadas han sido trasladadas a las noches del viernes y el s¨¢bado. Y para quienes se queden con ganas de m¨¢s, Francisco G¨¢lvez recuerda que hay lluvias de estrellas m¨¢s activas, como las le¨®nidas o las gem¨ªnidas. El problema es que las primeras ocurren a mediados de noviembre y la segundas, en diciembre. ¡°Y en El Torcal hace un fr¨ªo importante esos d¨ªas¡±, afirma. Y no solo en invierno: hoy mismo se vend¨ªan forros polares en la tienda del centro de visitantes.