La fobia a Greta

Que si es manipuladora, manipulada, ignorante, retr¨®grada, melodram¨¢tica.

Se present¨® Greta Thunberg en la Cumbre sobre el Cambio Clim¨¢tico de la ONU y estallaron los ¨¢nimos: aplausos, v¨ªtores, pero tambi¨¦n mucha, mucha v¨ªscera, mala leche. Y s¨ª, confieso que a¨²n no salgo de la sorpresa.

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Menudita a sus 16 a?os, con ese aspecto de eterna escolar, habl¨® con voz quebrada sobre la verg¨¹enza que deber¨ªamos sentir los adultos, no solo por el mundo en crisis que les estamos heredando, sino por ver en los j¨®venes una reserva de esperanza cuando somos nosotros quienes se las hemos robado. Emotiva y directa, fuera de los protocolos de la rancia diplomacia, as¨ª habl¨® Greta. Y era un poco lo que se esperaba, no nos hagamos: brinc¨® a la atenci¨®n global justo por esas formas entre francas y retadoras, silentes con momentos dram¨¢ticos, que la distinguen.

Pens¨¦ que a estas alturas del debate p¨²blico ya quedar¨ªa claro que Greta Thunberg es, sobre todo, un s¨ªmbolo: mujer, joven, decidida, con Asperger, en una lucha muy enfocada que toca a miles de j¨®venes en el mundo (lo que no han podido hacer pol¨ªticos ni l¨ªderes religiosos ni gur¨²es ambientales, por cierto). Entiendo, por lo mismo, la fascinaci¨®n y la entrega. El aplauso. Pero no ten¨ªa en el radar el correlato, igual de poderoso, de fobia y descalificaci¨®n. Pequ¨¦ de ingenua, lo reconozco.

?Que Greta es privilegiada? Pues s¨ª, ser una sueca as¨ª es un privilegio frente a una buena parte del mundo. ?Que sus pap¨¢s la manipulan o explotan? Bueno, pensar eso equivale a minimizar la capacidad racional y emotiva de los adolescentes, como si solo pudieran actuar cuando se les manipula o explota. Ahora bien, que en casa seguro aprendi¨® formas y fondo de lo que hace, pues es una obviedad. ?Que se est¨¢ utilizando su imagen para colocar la urgencia clim¨¢tica en la agenda global? Pues s¨ª, ella misma se ha colocado en ese escenario (yo, por lo menos, no he visto que la obliguen a hacerlo; o tal vez no veo bien). ?Que sus planteamientos sobre el medio ambiente y el cambio clim¨¢tico son ingenuos o regresivos o hasta ignorantes? Tal vez, pero la fuerza del s¨ªmbolo no est¨¢ en la literalidad de su discurso sino en la potencia de la convocatoria. Ella misma ha reiterado la necesidad de ¡°escuchar a los cient¨ªficos, a los que saben¡±. Por ende, pelearse con cada una de sus palabras me parece ocioso e in¨²til. ?Que sus obsesiones son ¡°comunistoides¡±? Sin comentario. ?Que est¨¢ patrocinada por el gran capital? Sin comentario (y p¨®nganse de acuerdo: ?comunistoide o capitalista o todo junto?). ?Que sus ¡°desplantes son melodram¨¢ticos y exagerados¡±? Quienes sostienen esto, que lean un poco, un poquito sobre la condici¨®n (que no enfermedad) de Asperger (se puede googlear, para que no se esfuercen tanto). ?Que ha servido de pretexto para que Trump y algunos de sus escuderos en Fox News se burlen de ella? Bueno, pues eso solo subraya la fuerza de lo que Greta representa (de todos modos, Trump y los suyos, en su mezquindad, se burlan hasta de ellos mismos, sin darse cuenta).

Si no por otra cosa, el impacto que ha tenido Greta Thunberg como persona, s¨ªmbolo y puesta en escena, para que la urgencia que significa el cambio clim¨¢tico escale en atenci¨®n, ya merece un reconocimiento. Miles de j¨®venes, esos a los que mi generaci¨®n ve¨ªa con desafecto por ¡°ap¨¢ticos¡±, se est¨¢n movilizando y asumen como propia y en colectivo la exigencia de actuar por el planeta. Algo se est¨¢ moviendo, aunque falte much¨ªsimo por hacer. Veo, por ejemplo, los diarios de circulaci¨®n nacional en mi pa¨ªs, y salvo honrosas excepciones, ninguno dedica espacio de calidad a destacar el cambio clim¨¢tico y sus retos. No, Greta no es la soluci¨®n; pero ojal¨¢ sea un llamado de atenci¨®n.

Dicho esto, claro que le seguir¨¢n tundiendo, sobre todo en redes sociales. Bien lo dec¨ªa el escritor Esteban Illades: ¡°Twitter, el lugar donde se le exige m¨¢s a una ni?a de 16 a?os con Asperger que a los Gobiernos del mundo¡±.

Ahora s¨ª que¡­ As¨ª las cosas.