As¨ª es el nuevo Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid que firman los mejores paisajistas (y no parar¨¢s de ver en Instagram)

Mientras el cambio clim¨¢tico que hemos activado no termine su cuenta atr¨¢s, Madrid seguir¨¢ teniendo veranos muy c¨¢lidos e inviernos fr¨ªos. Para muchos, una dificultad insalvable para hacer crecer un jard¨ªn atractivo. El mejor desmentido de esto es la nueva entrada del Real Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid (RJB), donde el paisajista Fernando Martos plante¨® a principios de 2018 un ed¨¦n sostenible, de especies aut¨®ctonas, e igual de imponente en cualquier estaci¨®n del a?o.

La remodelaci¨®n se enmarca en la nueva etapa que vive el jard¨ªn madrile?o y que coincide con la candidatura a Patrimonio Mundial de la Unesco del eje Prado-Retiro. Adem¨¢s de la intervenci¨®n de Martos, el Jard¨ªn Bot¨¢nico ha llevado a cabo recientemente la rehabilitaci¨®n de gran parte de su verja hist¨®rica, para cuya mejora paisajista ha contado con el estudio Urquijo-Kastner, formado por Miguel Urquijo y Renate Kastner.

La propuesta combina el uso de las vivaces (herb¨¢ceas perennes) que generan movimiento estacional (es decir, que experimentan cambios en el color, la estructura o la floraci¨®n) con una presencia importante de arbustos que dan estructura al jard¨ªn. Adem¨¢s, la renovaci¨®n del Bot¨¢nico incluye una nueva zona de restauraci¨®n y librer¨ªa en el Pabell¨®n Villanueva, gestionada por La F¨¢brica, y la construcci¨®n de nuevas infraestructuras, como un aula y un invernadero de trabajo, actualmente en ejecuci¨®n.

La nueva entrada de Martos, uno de los paisajistas espa?oles con m¨¢s proyecci¨®n del momento, se ha convertido en una de las zonas m¨¢s admiradas y fotografiadas. El proyecto, promovido por la exjefa de Horticultura del RJB, Silvia Villegas, f¨¦rrea defensora de los beneficios de la flora silvestre aut¨®ctona para la jardiner¨ªa, es profundamente mediterr¨¢neo, cuyo car¨¢cter se manifiesta, fundamentalmente, en su diversidad bot¨¢nica y en la apariencia naturalista de la composici¨®n.

'New perennials' y flora salvaje mediterr¨¢nea

Martos ide¨® una plantaci¨®n con claras influencias del movimiento new perennials, basado en la combinaci¨®n de herb¨¢ceas perennes que aportan inter¨¦s en cada estaci¨®n gracias a su ciclo biol¨®gico, cuyo pionero y gur¨² es el paisajista holand¨¦s Piet Oudolf, responsable de la intervenci¨®n en el Chillida Leku de Hernani. El jard¨ªn ingl¨¦s contempor¨¢neo est¨¢ presente tambi¨¦n en esta plantaci¨®n sobre los parterres m¨¢s pr¨®ximos a la puerta de Murillo, frente al Museo del Prado. Todo ello, respetando el trazado original de este jard¨ªn hist¨®rico del siglo XVIII, obra de Sabatini, arquitecto de Carlos III.

Mediante la selecci¨®n de especies vivaces (herb¨¢ceas perennes), bulbosas y arbustivas del entorno mediterr¨¢neo, como las salvias, el verbascum, la melica o los phlomis, Martos ha creado, seg¨²n sus propias palabras, "un jard¨ªn cambiante y espont¨¢neo, lleno de contrastes de color, texturas y vol¨²menes, que genera inter¨¦s y movimiento durante las cuatros estaciones, gracias al propio ciclo biol¨®gico vegetal". Un aspecto esencial en el trabajo de este paisajista que reconoce la belleza de las plantas incluso en su estado de marchitez, como la melica, de la familia de las gram¨ªneas.

As¨ª, tras el verano, los colores vivos del follaje y las flores de las vivaces se aten¨²an y tornan a tonos pastel con matices pajizos. En oto?o, la masa de las herb¨¢ceas se reduce mientras prevalece la estructura formada por los arbustos.

Las particulares adaptaciones y capacidades de las plantas mediterr¨¢neas no solo aportan belleza a la composici¨®n, si no que facilitan su sostenibilidad. Frente al uso de flor de temporada ¡ªnormalmente ex¨®tica¡ª tan extendido en la jardiner¨ªa p¨²blica espa?ola, la propuesta de Martos defiende un cambio de mentalidad ya que "incorpora especies aut¨®ctonas que tradicionalmente son denostadas pese a su alto valor ornamental", como los eryngium (cardos) o el verbascum.

Adem¨¢s, el espacio requiere muy poco mantenimiento debido a las bajas necesidades de agua y fertilizaci¨®n, as¨ª como a la resistencia frente a plagas de estas especies. La plantas mediterr¨¢neas utilizadas en este proyecto como la aquilea, las salvias o el sedum son, por el contrario, un foco de atracci¨®n de insectos beneficiosos que, mientras llevan a cabo su labor polinizadora, potencian la belleza del jard¨ªn y le aportan a¨²n m¨¢s vida.

Gracias a esta remodelaci¨®n, llevada a cabo en colaboraci¨®n con Carlos Rodr¨ªguez, ingeniero agr¨ªcola de su equipo, el Real Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid se alinea con otros grandes jardines bot¨¢nicos del mundo como los ingleses de Kew y Wisley o el bot¨¢nico de Nueva York que ya albergan dise?os naturalistas mediante plantas vivaces. Adem¨¢s, el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), del que depende, ha visto incrementada su labor divulgadora al incluir este tipo de jardiner¨ªa en su propuesta.