Mercado de citas
La falta de medios humanos a la que se enfrentan las oficinas de Extranjer¨ªa est¨¢ provocando graves retrasos en la tramitaci¨®n de la documentaci¨®n requerida por la Administraci¨®n a los inmigrantes
La falta de medios humanos a la que se enfrentan las oficinas de Extranjer¨ªa est¨¢ provocando graves retrasos en la tramitaci¨®n de la documentaci¨®n requerida por la Administraci¨®n a los inmigrantes. Estas demoras se est¨¢n viendo a su vez prolongadas por la expansi¨®n de un mercado ilegal de turnos de atenci¨®n al p¨²blico, gestionados a trav¨¦s del sistema de cita previa. La imposibilidad material de realizar cualquier tr¨¢mite a la que se enfrentan los inmigrantes por la acci¨®n combinada de empresas, locutorios y abogados especializados, que copan los turnos de atenci¨®n tan pronto la Administraci¨®n los pone a disposici¨®n de los usuarios, est¨¢ dificultando regularizar su situaci¨®n a personas de origen extranjero que cumplen las condiciones exigidas por la ley, as¨ª como provocando situaciones de ilegalidad sobrevenida. Todo ello coincidiendo con un descenso significativo de los flujos de inmigraci¨®n irregular hacia Espa?a.
Editoriales anteriores
A diferencia de precampa?as y campa?as anteriores, en esta ocasi¨®n la pol¨ªtica migratoria no ocupa una posici¨®n destacada en el debate electoral, salvo en los m¨ªtines de la ultraderecha que pretende hacer bandera de la xenofobia. La colaboraci¨®n de Marruecos ha sido determinante a la hora de reducir el n¨²mero de personas que han intentado entrar ilegalmente en Espa?a durante el ¨²ltimo a?o, al reforzar el control sobre la frontera mar¨ªtima y no solo sobre la terrestre. Espa?a, por su parte, ha correspondido al esfuerzo de Marruecos present¨¢ndolo como un pa¨ªs estrat¨¦gico ante los socios europeos. Esta cooperaci¨®n ha demostrado ser el camino m¨¢s eficaz, no solo para dificultar la actividad de las mafias que trafican con personas, sino tambi¨¦n, y sobre todo, para evitar muertes en el Estrecho y limitar el crecimiento de bolsas de trabajo ilegal donde los inmigrantes carecen de los m¨¢s elementales derechos.
Pero los avances en esta direcci¨®n y el hecho de que parezca existir un consenso t¨¢cito entre los partidos, m¨¢s all¨¢ de episodios como el del Open Arms, podr¨ªan verse comprometidos si no se ponen los medios para seguir ampliando el espacio de la legalidad en la gesti¨®n del fen¨®meno migratorio. Desde esta perspectiva, la Administraci¨®n est¨¢ obligada a reaccionar ante la noticia cierta de que las personas que necesitan acceder a las oficinas de Extranjer¨ªa est¨¢n siendo objeto de extorsi¨®n. Sobre todo porque se trata de un problema que otras instancias administrativas han padecido con anterioridad y para el que han encontrado soluciones satisfactorias. El c¨ªrculo vicioso por el que la escasez de funcionarios provoca la reventa de citas en las oficinas de Extranjer¨ªa no puede ser asumido como una fatalidad, sino como un cap¨ªtulo sustantivo de la pol¨ªtica de inmigraci¨®n que requiere urgente respuesta.
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