Andy Murray: un tenista atormentado por la masacre que tuvo lugar en su colegio
El tenista escoc¨¦s habla en nuevo documental, 'Andy Murray: Resurfacing", de la mantanza de Dunblane que conmovi¨® al mundo en 1996 y marc¨® para siempre su vida
¡°Lo de Dunblane ocurri¨® cuando ten¨ªa nueve a?os. Conoc¨ªamos al tipo. Doce meses despu¨¦s, nuestros padres se divorciaron. Fue una ¨¦poca dif¨ªcil. Y poco despu¨¦s mi hermano se fue de casa. Lo hac¨ªamos todo juntos, as¨ª que fue muy duro para m¨ª. Durante un a?o, m¨¢s o menos, tuve much¨ªsima ansiedad. Pero la ansiedad desaparec¨ªa cuando jugaba al tenis¡±.
Estas son las palabras de Andy Murray (Glasgow, Escocia, 1987) a Olivia Capuccini, directora del documental Andy Murray: Resurfacing (Andy Murray: resurgiendo), que llega a Amazon Prime Video este viernes. El documental narra la recuperaci¨®n del tenista tras unos problemas en la cadera que estuvieron a punto de poner fin a su exitosa carrera deportiva en 2017 y lo han sometido a dos delicadas cirug¨ªas desde entonces.
"Yo podr¨ªa haber sido uno de esos ni?os", escribi¨® Andy Murray en sus memorias. "Hermanos y hermanas de algunos de mis amigos fueron asesinados"
Si las palabras son importantes es porque contienen todo el arco narrativo que ha marcado la vida de este tenista: explican lo doloroso que ha sido para ¨¦l pensar que su carrera pod¨ªa terminarse, porque fue su carrera precisamente lo que le ayud¨® a superar el enorme trauma que sufri¨® de peque?o. Un trauma del que casi siempre se ha negado a hablar.
Lo hizo por primera vez en 2008, cuando public¨® su autobiograf¨ªa Hitting Back (Devolviendo el golpe) con solo 21 a?os. Murray ten¨ªa ocho a?os el 13 de mayo de 1996 cuando el exl¨ªder de los boy scouts de la escuela de primaria de Dunblane irrumpi¨® en el gimnasio y abri¨® fuego con varias pistolas. Mat¨® a diecis¨¦is ni?os de entre cinco y seis a?os y a su maestra. Despu¨¦s, el boy scouts se suicid¨®.
EL PA?S cont¨® en una noticia publicada al d¨ªa siguiente como Thomas Hamilton, de 43 a?os, hab¨ªa sido el jefe de los boy scouts hasta que fue expulsado por ¡°conducta impropia¡±. La asociaci¨®n de scouts de la que hab¨ªa sido monitor lo haba suspendido debido a numerosas quejas de los padres por su conducta, las ¨²ltimas solo dos a?os antes de la matanza. Siempre se manej¨® como m¨®vil de su crimen la venganza contra este hecho.
Lo que no sab¨ªamos entonces es que entre los supervivientes de la matanza estaba un ni?o que iba a acabar siendo el primer brit¨¢nico en ganar Wimbledon, un Grand Slam y en ocupar el primer puesto del ranquin de la ATP en 2016. En Hitting Back, Murray cont¨® que su hermano mayor Jamie y ¨¦l se encontraban de camino hacia el gimnasio de la escuela con el resto de sus compa?eros de clase y al escuchar los tiros alguien se acerc¨® a comprobar qu¨¦ ocurr¨ªa, tras lo cual volvi¨® y oblig¨® a todo el grupo a correr hacia el despacho del director de la escuela. All¨ª, Andy recuerda que su hermano Jamie y ¨¦l se escondieron bajo un escritorio.
¡°La parte m¨¢s extra?a es que conoc¨ªamos a ese tipo [el asesino, Thomas Hamilton]¡±, escribi¨® en sus memorias. ¡°Una vez se mont¨® en el coche de mi madre. Es obviamente extra?o pensar que tuviste a un asesino en tu coche, sentado con tu mam¨¢¡±, a?adi¨®.
¡°No lo ten¨ªan claro, e iba a salir en todas partes. Es algo imposible de explicar a unos ni?os. Me alegra que fuesen tan peque?os y no tuviesen la suficiente madurez para entender la dimensi¨®n de lo que hab¨ªa ocurrido¡±, cont¨® la madre de Andy Murray en una entrevista
¡°Esa es probablemente otra de las razones por las que no quiero volver a pensar en ello. Es tan inc¨®modo pensar que hizo eso alguien a quien conoc¨ªamos del club de scouts. Sol¨ªamos ir all¨ª y pasarlo bien. Descubrir que era un asesino es algo que mi cerebro nunca pudo procesar. Yo podr¨ªa haber sido uno de esos ni?os. [¡] Hermanos y hermanas de algunos de mis amigos fueron asesinados. Solo puedo recordar partes sueltas de ese d¨ªa, como estar en una clase cantando canciones¡±, relata el tenista.
La madre del jugador, Judith Murray, dio m¨¢s detalles sobre ese d¨ªa en una entrevista en la emisora Radio Times en 2014: ¡°En el despacho del director, a los ni?os se les pidi¨® que se sentasen bajo mesas y ventanas y cantasen una canci¨®n. Los profesores y los encargados del comedor hicieron un trabajo incre¨ªble, reuniendo a todos los ni?os, d¨¢ndoles de comer y sac¨¢ndolos de all¨ª intentando que no se dieran cuenta de lo que estaba ocurriendo. No s¨¦ c¨®mo lo lograron¡±. La madre confirm¨® que el asesino se hab¨ªa montado en su coche varias veces: ¡°Lo conoc¨ªa: lo hab¨ªa llevado desde el club de los boy scouts a la estaci¨®n alguna vez. Era un poco extra?o, pero nunca hubiese dicho que era peligroso¡±.
Judith a?ade que ella misma explic¨® a sus hijos lo que hab¨ªa pasado en el coche de vuelta a casa, una vez se reuni¨® con ellos. ¡°No lo ten¨ªan claro, e iba a salir en todas partes. Es algo imposible de explicar a unos ni?os. Me alegra que fuesen tan peque?os y no tuviesen la suficiente madurez para entender la dimensi¨®n de lo que hab¨ªa ocurrido¡±.
El documental no est¨¢ centrado en este hecho, pero s¨ª ayuda a comprender el v¨ªa crucis de un hombre que encuentra refugio en el deporte para superar un episodio tan traum¨¢tico.
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