Luis Figo: ¡°Si debo ir a Barcelona, voy. Como dicen en mi pa¨ªs: ¡®Si tienes miedo, compra un perro¡¯. Y yo tengo tres¡±
Siempre que llega un Bar?a-Madrid sale del recuerdo aquella pitada insuperable del Camp Nou al portugu¨¦s. Todav¨ªa hay heridas sin curar de aquel fichaje. Hoy, el exjugador vive en la capital, aparece en el nuevo anuncio de Cortefiel y no se esconde ante casi ninguna pregunta
Bob Dylan y Luis Figo tienen una interesante conexi¨®n religiosa. Judas. Los puristas del folk se lo llamaron a Dylan en mayo de 1966, la primera vez que irrumpi¨® en el escenario con una banda de rock: ellos solo le conceb¨ªan con la austeridad de voz y guitarra ac¨²stica y no pudieron soportar aquel ruido rockero. El tiempo dio la raz¨®n al compositor: su m¨²sica se hizo m¨¢s rica con la apertura de miras. Y de Judas tildaron los aficionados catalanes a Figo cuando pas¨®, en 2000, de ser el capit¨¢n del F.C. Barcelona a convertirse en la estrella del Real Madrid. Ese fichaje abri¨® muchas heridas que todav¨ªa hoy contin¨²an supurando. Pero el portugu¨¦s, al igual que Dylan, tambi¨¦n venci¨®: en el f¨²tbol actual, el aficionado vive con resignaci¨®n y sin dramas c¨®mo sus estrellas fichan casi sin pesta?ear por el eterno rival.
Aquella pitada del 2000 con Figo de blanco visitando el Camp Nou super¨® los decibelios de un concierto de Mot?rhead. Sentado en un sof¨¢ de un hotel madrile?o, el portugu¨¦s se lo toma hoy con calma y reta a sus detractores: ¡°Los que me llaman Judas y traidor deber¨ªan ser un poco m¨¢s creativos. Ya es repetitivo¡¡±.
¡°Veo a Catalu?a con tristeza. Es una tierra maravillosa y la gente est¨¢ viviendo seguramente malinformada. Les han prometido algo, pero nunca lo van a llevar a un fin¡±
Figo (Lisboa, Portugal, 1972) es pionero en muchas cosas: en el inicio de la Liga de los gal¨¢cticos, en la llegada del f¨²tbol moderno con comerciales giras de pretemporada rompem¨²sculos por Asia y EE UU, o en el deportista glamuroso posando en la alfombra roja con su pareja. Junto a ella, la modelo Helene Svedin (Sollefte?, Suecia, 1976), protagoniza la ¨²ltima campa?a de la firma de moda Cortefiel, que lleva por t¨ªtulo Tiene ese algo y en la que ambos rememoran todo lo especial que vieron el uno en el otro cuando se conocieron.
Para comprender la dimensi¨®n de este hombre elegante y atractivo hay que acudir a la gigantesca televisi¨®n a la carta que es YouTube. All¨ª hay recopilaciones de sus excelentes condiciones como futbolista. Regateador poco especulativo (hola, Neymar), sus incursiones llevaban siempre peligro, ya fuera con un pase da?ino para el rival o con una finalizaci¨®n letal. Figo era un jugador sofisticado alejado de las gran¨ªticas propuestas que vemos hoy todos los fines de semana.
Tambi¨¦n en YouTube se pueden revisar las algaradas que se montaban cuando llegaba vestido de blanco al Camp Nou. Como la citada pitada m¨ªtica de 2000. ¡°No he escuchado nada semejante en la vida¡±, ha dicho Guti, que tambi¨¦n estuvo por all¨ª. En una de estas incursiones en territorio hostil le lanzaron una cabeza de cochinillo. ¡°Me encanta el cochinillo¡±, dice hoy, confirmando que no es vegano y que se toma todo aquello con flema portuguesa. ¡°No veo mucho las im¨¢genes porque no soy de revivir el pasado. No lo pas¨¦ mal aquellos d¨ªas, para nada. La gente piensa que s¨ª, pero es que no. Fue una experiencia para madurar. A algunos les gusta hablar de ese partido, mitificarlo, pero para m¨ª fue un d¨ªa m¨¢s¡±, apunta.
Luis Figo dice viajar poco a Barcelona. ¡°No reniego de mi pasado, solo puedo decir cosas buenas de la ciudad. Pero no voy mucho porque actualmente no tengo demasiado que hacer all¨ª. Pero si debo ir a Barcelona, voy. Como dicen en mi pa¨ªs: ¡®Si tienes miedo, compra un perro¡¯. Y yo tengo tres, as¨ª que no tengo miedo¡±.
El exjugador cuenta alg¨²n detalle de c¨®mo el Real Madrid arranc¨® el coraz¨®n de su gran rival. Florentino P¨¦rez dijo que si ganaba las elecciones del Madrid de 2000 fichar¨ªa al capit¨¢n azulgrana. Figo se reuni¨® con el presidente del Bar?a, Josep Llu¨ªs N¨²?ez, y le inform¨® de que Florentino pagar¨ªa su cl¨¢usula: 10.000 millones de pesetas (unos 60 millones de euros de hace dos d¨¦cadas). El jugador no quer¨ªa irse, solo aprovechar el inter¨¦s blanco para conseguir una revisi¨®n al alza de su contrato como barcelonista. Pero N¨²?ez le dijo que si tra¨ªa el dinero se pod¨ªa ir. ¡°Empez¨® como una cabezoner¨ªa de N¨²?ez, que quiz¨¢ no se lo cre¨ªa. Pero la cosa fue creciendo y al final pas¨® lo que pas¨®¡±, explica el portugu¨¦s.
Existi¨® un rumor legendario de su etapa barcelonista que retrata la capacidad de fabulaci¨®n del ser humano futbolero: que Guardiola y ¨¦l tuvieron una relaci¨®n. Figo lo zanja sin pizca de humor: ¡°Guardiola fue un gran amigo, una persona que me ayud¨® mucho. Mi compa?ero de habitaci¨®n. Pero no hubo nada. Me gustan las mujeres¡±. Estuvo cinco temporadas en el Barcelona, otras cinco en el Real Madrid y finaliz¨® su carrera en el Inter de Mil¨¢n. Lo gan¨® todo, incluido el Bal¨®n de Oro en 2000. Con el Real Madrid y el Inter mantiene relaciones fluidas, no con los azulgrana. ¡°Veo a Catalu?a con tristeza. Es una tierra maravillosa y la gente est¨¢ viviendo all¨ª seguramente malinformada. Les han prometido algo, pero nunca lo van a llevar a un fin. Cuando ves las im¨¢genes que ves y a la ciudad dividida¡ Es triste. Es mucho mejor que haya cordialidad¡±. ?Tiene alguna soluci¨®n? ¡°Soy extranjero, prefiero no opinar. Yo tendr¨ªa la soluci¨®n, pero no me compete. Mejor no hablar de pol¨ªtica¡±.
Hablemos pues de f¨²tbol y sus da?os colaterales, de por qu¨¦ este maravilloso juego se ha convertido en un universo amurallado donde no penetran ni las fatigas del pueblo (particularmente durante las duras crisis econ¨®micas) ni casi ninguno de los progresos sociales. ?Conoce a alguna estrella a la que le hayan bajado el sueldo? Responde Figo: ¡°No creo que el futbolista est¨¦ mimado y viva en una burbuja. Es un trabajo. El f¨²tbol genera millones y si los clubes tienen la capacidad de pagar esos sueldos¡ Es que nadie obliga a nadie. Es oferta y demanda. Fichar a un jugador es mucho dinero, pero es el mercado, es lo que hay¡±.
Otro asunto: la homosexualidad. ?Por qu¨¦ ning¨²n jugador de la Primera Divisi¨®n espa?ola se ha declarado gay? ¡°La gente es muy cruel. Juegas todos los domingos, te atacar¨ªan por eso y no por tu rendimiento. Ser¨¢ por protegerse, no por verg¨¹enza. Esa es mi opini¨®n¡±. ?Camina la sociedad, pues, a un ritmo y el f¨²tbol a otro? Figo no comparte: ¡°Hablar es f¨¢cil, demostrarlo es m¨¢s dif¨ªcil. Supongo que ser¨¢ eso¡¡±. Y acaba con un: ¡°Oye, igual lo que pasa es que no hay ning¨²n futbolista gay¡±. Y se echa para atr¨¢s en el sof¨¢.
¡°Guardiola fue un gran amigo, una persona que me ayud¨® mucho. Mi compa?ero de habitaci¨®n. Pero no hubo nada. Me gustan las mujeres¡±
Figo es hijo ¨²nico de una familia trabajadora portuguesa. No recuerda una infancia con falta de afecto. Siempre se sinti¨® arropado por sus padres, sus t¨ªos y sus primos. Empez¨® de ni?o en las categor¨ªas inferiores de equipos profesionales (en este caso el Sporting de Lisboa) y tuvo que dejar de estudiar. Cuando se retir¨®, en 2009, con 37 a?os, se sac¨® el graduado escolar. Luego realiz¨® un m¨¢ster en direcci¨®n de empresa. Lo suyo no es estar entrenando y dirigir a un equipo, como han hecho muchos exfutbolistas. Lo suyo es la gesti¨®n. Se present¨® para dirigir la FIFA, pero retir¨® su candidatura por ¡°una grave falta de transparencia democr¨¢tica¡±. Es joven: seguramente lo volver¨¢ a intentar. Dice tener un capricho que no se pod¨ªa permitir cuando era profesional del f¨²tbol: "Champagne y vino. Ahora tengo m¨¢s libertad para tomarlo. Me gusta comer bien y beber bien. Bebo vino a diario".
En la actualidad, trabaja como embajador de diversas organizaciones del f¨²tbol internacional y gestiona sus negocios. Uno de ellos es la propiedad de la firma de dulces Elgorriaga y otro opera en el sector del fosfato, en ?frica. Todo lo gestiona desde su casa de Madrid, donde vive con su mujer y sus tres hijas, de 20, 17 y 14 a?os. ¡°Estoy rodeado de mujeres. Adem¨¢s de mi familia tengo dos asistentes mujeres¡ y tres perras¡±, apunta.
Y habla de uno de los temas donde ¨²ltimamente el famoso de turno es experto en pisar charcos: ¡°No soy machista ni feminista. No soy de extremos. Cada uno debe tener su espacio y una igualdad de derechos. Hay que ser coherente y sensato. No me gusta el falso feminismo. Ni el machismo. Tiene que haber un equilibrio en todo. Una igualdad. No puede ser que un hombre reciba m¨¢s que una mujer por el mismo trabajo. Somos todos seres humanos¡±.
Le informamos de la definici¨®n acad¨¦mica de feminismo: "Principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre". Y conseguimos que una persona que antes de la entrevista no se ve¨ªa ¡°ni machista ni feminista¡± cambie de opini¨®n. ¡°Pues en el sentido que dice la RAE de lo que es feminismo, s¨ª soy feminista. Hay que ser sensato y ya est¨¢¡±.
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