Batalla en todos los frentes

En el PSOE hay, como hab¨ªa, dos corrientes: quienes creen que, en este escenario, conviene ir al pacto llamado constitucionalista para fortalecer al pa¨ªs; y quienes creen que hay que seguir adelante por la izquierda rompiendo el bloque independista. Los unos creen que la doctrina de Ram¨®n Rubial de ¡°primero Espa?a, despu¨¦s el partido, y despu¨¦s cada uno¡­¡± pasa por el mensaje de Manuel Valls contra los indepesy contra Vox; los otros, que no es lo responsable porque unirse a la derecha llevar¨ªa a una polarizaci¨®n m¨¢s insoportable. El pulso, con todo, no trata tanto de lo mejor para Espa?a como de lo mejor para el partido socialista. Por lo dem¨¢s, hablar de pulso es ilusorio; hay una l¨ªnea dominante a pesar de algunos cr¨ªticos. Y ¨¦sta no se destila en los ¨®rganos cada vez m¨¢s debilitados de los socialistas sino en La Moncloa¡­ de modo que el partido, con el encargo de la investidura de Pedro S¨¢nchez, mantiene su plan; y env¨ªa se?ales claras a Esquerra Republicana de Catalunya de que demorarse es peligroso. No ser¨¢ tan sencillo.

El escenario l¨ªquido ha adquirido un punto cenagoso tras el pronunciamiento del pasado jueves del Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea (TJUE). Con tantos polvos, solo puede haber lodo. Los independentistas han tirado de su engrasad¨ªsimo aparato de propaganda para reverdecer el victimismo y recuperar su leyenda negra sobre la justicia espa?ola a la que el president Quim Torra desaf¨ªa de nuevo¡­ Entretanto, los ultramontanos centralistas venden que Europa quiere una Espa?a d¨¦bil. Cuando Alfonso Uss¨ªa escribe ¡°Puta Europa¡±, expresa un sentimiento real de mucha gente. La extrema derecha, como Carles Puigdemont, defiende y ataca a la Uni¨®n Europea seg¨²n le vaya. Al cabo, unos y otros son nacionalistas, o nacionalpopulistas, y Europa les importa una higa.

Para los otros s¨ª que deber¨ªa ser un asunto prioritario. Pero hay tantas variables que eso parece a¨²n lejos. Esquerra sabe que una repetici¨®n electoral llevar¨ªa a gobernar a las derechas, pero Puigdemont torpedea a ERC en Catalu?a; Ciudadanos espera la carambola pero el Partido Popular ve con temor este caldero emocional propicio para la extrema derecha...

En el teatro de operaciones, seg¨²n el lenguaje militar, hay batallas en todos los frentes: en el eje izquierda-derecha, en el eje centro-periferia, entre la derecha, en el independentismo¡­ Pero en el teatro de operaciones hay tambi¨¦n mucho teatro, en lenguaje esc¨¦nico, con gestos sobreactuados y faroles.

Cuando Junqueras proclama ahora ¡°Nada de lo que hicimos fue un delito. No solo era leg¨ªtimo, sino legal. Nos hemos ganado el derecho a volver a intentarlo¡­¡±, se dirige al exvicepresident Oriol Puigdemont, no al presidente en funciones Pedro S¨¢nchez, al que anima a seguir negociando. Voxear el Spexit ¡ªla salida de Espa?a de la Uni¨®n Europea; la versi¨®n espa?ola del brexit¡ª ensancha el campo a partidos como Vox. Cuando Pablo Iglesias y Alberto Garz¨®n rajan ¨¢speramente del Supremo, ?se entiende que sus europarlamentarios votar¨ªan contra el suplicatorio espa?ol? Eso es lo que deber¨ªa quitar el sue?o al presidente S¨¢nchez. ?Se lo quita? Todo es muy l¨ªquido, pero, m¨¢s all¨¢ del teatro, tocar¨ªa pensar en Espa?a y en Europa. ?Hay alguien todav¨ªa dispuesto a hacer pol¨ªtica con esa prioridad? ?O siquiera a hacer pol¨ªtica?