Las mujeres lideran por primera vez las protestas pol¨ªticas en India

En diciembre de 2019, un peque?o grupo mujeres y hombres se reunieron en el distrito de Shaheen Bagh, al sureste de Nueva Delhi, para protestar contra la represi¨®n policial de estudiantes el d¨ªa anterior en la cercana Universidad Jamia Millia Islamia. La concentraci¨®n sigui¨® los d¨ªas y noches siguientes con nutrida presencia de abuelas, madres e hijas mientras los hombres volv¨ªan al trabajo. M¨¢s de un mes despu¨¦s de que aquella protesta en la capital india se extendiese por todo el pa¨ªs, la sentada pac¨ªfica liderada por mujeres contin¨²a y se reproduce en otras ciudades para desconcierto de los l¨ªderes pol¨ªticos de la sociedad machista de India.

La imagen no solo es poderosa por el inusual liderazgo de mujeres indias en protestas estrictamente pol¨ªticas, sino porque todas las mujeres de Shaheen Bagh son musulmanas; comunidad afectada por las pol¨ªticas discriminatorias del gobierno indio. Las protestas fueron desencadenadas por la ley de ciudadan¨ªa aprobada en diciembre; que permite solicitar asilo en India a refugiados siempre que no sean seguidores del islam. La norma ha despertado a esta comunidad en el pa¨ªs asi¨¢tico ¡ªcerca de 200 millones de poblaci¨®n india¡ª y sus mujeres salen a la calle como nunca antes, seg¨²n activistas por los derechos de este colectivo.

¡°?La protesta en Agripada cre¨® una atm¨®sfera inspiradora y el¨¦ctrica!¡±, recuerda orgullosa Aarefa Johari, en referencia a la ¨²ltima manifestaci¨®n en el coraz¨®n de Bombay, la semana pasada. ¡°Hubo, al menos, 10.000 o 15.000 mujeres. Algunas fueron pese a la desaprobaci¨®n de sus maridos, atemorizados¡±. Como en la capital financiera de India, las protestas encabezadas por ellas se extienden por las principales urbes del pa¨ªs. Desde Calcuta, al este del pa¨ªs, hasta Cochin, al sur. Incluso en ciudades como Lucknow, lideran las protestas para desconcierto de pol¨ªticos machistas como el gobernador del estado, que retaba p¨²blicamente a los hombres a dar la cara y no ¡°empujar a sus mujeres¡±, mientras amenazaba con represalias para quien gritase ¡°libertad¡±.

Si las musulmanas indias desbordan las manifestaciones, secundadas por compatriotas de otras religiones y castas, las j¨®venes se han convertido en iconos del movimiento. El mismo d¨ªa que empezaron las protestas, el coraje de dos universitarias musulmanas protegiendo a un compa?ero apaleado por polic¨ªas fue emblema durante las primeras semanas de protestas. Mientras que el ataque al principal campus universitario de Nueva Delhi hace unas semanas tuvo como cara visible a la presidenta de la uni¨®n de estudiantes.

A pesar de ser v¨ªctima de la agresi¨®n por parte de unos 50 miembros de las juventudes del partido en el gobierno, la joven fue una de las pocas personas contra las que la polic¨ªa de la capital admiti¨® demandas por los altercados; alimentando aun m¨¢s el temor de la connivencia del gobierno con grupos radicales que intentan hacer pasar las manifestaciones pac¨ªficas por agitaciones sociales violentas, para desacreditarlas.

Adem¨¢s de la participaci¨®n activa de mujeres, tambi¨¦n ha sido una cara femenina de las ¨¦lites la primera en acercase a un movimiento que, hasta ahora, ha encontrado el silencio de los principales l¨ªderes de opini¨®n en India. D¨ªas despu¨¦s del incidente universitario, Deepika Padukone fue la ¨²nica gran figura de Bollywood que se acerc¨® a ver a los estudiantes heridos. El gesto de la actual hero¨ªna de la industria cinematogr¨¢fica local fue aplaudido por los que demandan m¨¢s implicaci¨®n sociopol¨ªtica por parte de sus millonarias estrellas en un pa¨ªs devoto del s¨¦ptimo arte. Mientras, representantes del partido del gobierno llamaban, de forma activa o pasiva, a boicotear la ¨²ltima producci¨®n de la actriz.

Pese a la condescendencia machista de las autoridades indias, la represi¨®n policial tambi¨¦n se ceba con las manifestantes. De los m¨¢s de 350 detenidos el d¨ªa 27 de diciembre en la ciudad de Lucknow, donde el l¨ªder pol¨ªtico del Estado promete venganza, muchas fueron mujeres. Esta regi¨®n, Uttar Pradesh, ha concentrado la mayor parte de los altercados violentos desde que comenzaron las protestas; dando lugar a 23 muertos y otros 1.200 detenidos sin cargos. La pasada semana, el Tribunal Supremo de India denegaba m¨¢s de un centenar de peticiones para revocar la ley de ciudadan¨ªa que motiva las protestas, e instaba al gobierno a responder a las demandas ciudadanas. A las puertas de la mayor instancia judicial de la democracia m¨¢s poblada del planeta, un grupo de mujeres sosten¨ªan pancartas en defensa de la constituci¨®n y contra su propio gobierno.