40 a?os de ¡®End of the Century¡¯, el disco que rompi¨® el coraz¨®n de los Ramones
Una mezcla explosiva: la banda punki neoyorquina y Phil Spector, un productor con fama de pirado aficionado a las armas. Aquello roz¨® la tragedia y, tras mucho sufrimiento, vio la luz un ¨¢lbum que rompi¨® las relaciones entre los miembros
Cuarenta a?os despu¨¦s, los protagonistas de esta historia no han corrido la mejor de las suertes: tres de los cuatro m¨²sicos (Johnny, Joey y Dee Dee Ramone) han muerto, el otro (el bater¨ªa Marky Ramone) act¨²a en salas de 400 personas, y el productor, Phil Spector, cumple pena de prisi¨®n por el asesinato de la camarera y actriz de serie B Lana Clarkson, encontrada muerta en febrero de 2003 con un disparo por arma de fuego. Johnny Ramone, que todav¨ªa viv¨ªa cuando ocurri¨® el incidente con Spector, declarar¨ªa sobre el funesto suceso: ¡°Lo que me sorprende es que no mate a una por a?o¡±. Entre todos ellos hicieron posible un disco clave en la historia de los Ramones, End of the Century (1980), del que se cumplen ahora cuatro d¨¦cadas.
Los Ramones necesitaban un ¨¦xito. Hab¨ªan contribuido a alentar determinantemente el fen¨®meno musical que arrasaba en el Reino Unido: el punk. En su Estados Unidos natal, sin embargo, ninguna grabaci¨®n del grupo sonaba en la radio. Nadie quer¨ªa problemas. Despu¨¦s de la gira estadounidense de Sex Pistols en 1978, la percepci¨®n p¨²blica en el pa¨ªs es que el movimiento que hab¨ªa pervertido a la juventud brit¨¢nica consist¨ªa en gente vestida con ropa de la basura que vomitaba, escup¨ªa y se lanzaba botellas entre un ruido espantoso. Los Ramones, sin embargo, no eran nada de eso.
Las diferencias pol¨ªticas eran tambi¨¦n, de hecho, una de las causas de la relaci¨®n tirante entre el guitarrista y Joey, relaci¨®n que se volver¨ªa ya inexistente cuando, el siguiente verano, la novia del cantante le abandonase por Johnny
En un documental de 2003, el guitarrista Johnny Ramone (John William Cummings; Nueva York, 1948 ¨C Los ?ngeles, 2004) reconoc¨ªa el problema que la mala publicidad de sus hom¨®logos brit¨¢nicos les acarre¨®: ¡°No pod¨ªa funcionar as¨ª. Se estaba convirtiendo en algo negativo que iba a destruir todo. Asust¨® a todo el mundo, a la industria de la m¨²sica, a la radio¡¡±. Y en esta coyuntura, en este compromiso comercial por demostrar al mundo que no eran ningunos monstruos, lleg¨® el disco End of the Century.
Lo cierto es que la banda neoyorquina, que en ese momento integraban Johnny Ramone, el vocalista Joey Ramone (Jeffrey Ross Hyman; Nueva York, 1951¨C2001), el bajista Dee Dee Ramone (Douglas Glenn Colvin; Fort Lee, Virginia, 1951 ¨C Los ?ngeles, 2002) y el bater¨ªa Marky Ramone (Marc Steven Bell; Nueva York, 1952), nunca pretendi¨® subvertir nada, al contrario que sus compa?eros de generaci¨®n. Aspiraban a conseguir un gran ¨¦xito pop y so?aban, como reconocer¨ªan ellos mismos, con liderar la siguiente ola del rock & roll: ser unos nuevos Beatles.
Estaban convencidos de que eran los mejores. Sus colaboradores tambi¨¦n. Y ten¨ªan toda la atenci¨®n de la vanguardia art¨ªstica: desde Andy Warhol hasta el l¨ªder de The Velvet Underground, Lou Reed. ¡°Es lo m¨¢s fant¨¢stico que me has ense?ado nunca¡±, dijo Lou Reed a su m¨¢nager al final de una actuaci¨®n de los Ramones. Despu¨¦s de cuatro discos, sin embargo, todo ese talento no hab¨ªa tenido la contrapartida econ¨®mica deseada.
A priori, la alianza con Phil Spector (Nueva York, 1939), legendario productor de The Ronettes o del ¨¢lbum Let it be de The Beatles, pod¨ªa parecer contra natura. A un lado, el padre del Muro de Sonido, una compleja y elaborada t¨¦cnica de proporciones orquestales, con varias capas de instrumentos: la alquimia del ¨¦xito radiof¨®nico. Al otro, un grupo que trabajaba activamente en desnudar la m¨²sica hasta el esqueleto, militante de las estructuras simples y enemigo de ese virtuosismo rock que consideraban indulgente y relamido. Sin embargo, no eran antag¨®nicos.
El periodista Jim Bessman, bi¨®grafo oficial de la banda, entrevistador y amigo de los miembros a lo largo de a?os y autor del libro Ramones, an American band (1993), reflexiona en declaraciones a ICON: ¡°Hab¨ªa algo de inevitable en End of the Century, porque los Ramones estaban claramente infuenciados por Phil Spector y el Brill Building pop [el subg¨¦nero referido a las canciones que se llevaban a cabo en el edificio Brill de Nueva York, donde compositores profesionales escrib¨ªan los ¨¦xitos de los ¨ªdolos adolescentes de finales de los 50 y principios de los 60], de estructura concisa y con garbo. Entre ellos, artistas como The Ronettes, cuyo Baby, I love you versionaron los Ramones en el propio disco¡±.
Hab¨ªa, adem¨¢s, una devoci¨®n compartida entre Joey Ramone, profundo admirador de la obra del productor, y Spector. Para el ingeniero de sonido Ed Stasium, estrecho colaborador del grupo tanto en la grabaci¨®n de End of the Century como en algunas de las anteriores y posteriores, ¡°Phil Spector vio en Joey la influencia de todos sus primeros trabajos¡±. ¡°Realmente quer¨ªa producir ese disco de los Ramones. Estaba convencido de que iba a ser el mejor de ambas carreras, el n¨²mero uno. Me llevaba a su oficina y me dec¨ªa: ¡®Va a ser el disco m¨¢s grande de la historia¡¯. Le recuerdo dici¨¦ndomelo con algo de locura enfermiza en su mirada¡±, declar¨®.
No obstante, Johnny Ramone, en su autobiograf¨ªa p¨®stuma Commando (2012), calific¨® la colaboraci¨®n de ¡°irracional¡±. ¡°Llev¨¢bamos por ah¨ª cinco a?os y no hab¨ªamos colocado ning¨²n ¨¦xito, as¨ª que hab¨ªa que hacer algo. Spector hab¨ªa estado detr¨¢s de nosotros intermitentemente casi desde la primera vez que fuimos a Los ?ngeles, dici¨¦ndonos: ¡®?No quer¨¦is hacer un buen disco?¡¯. Y aunque trat¨¢bamos de evitarlo, sab¨ªamos que necesit¨¢bamos una oportunidad¡±, recapitula. Para el guitarrista, la figura estaba lejos de ser un mito: ¡°El tipo es un productor. Los productores no son nadie. ?Hizo unos buenos discos en los 60? Muy bien. ?Pero qu¨¦ hab¨ªa hecho ¨²ltimamente? Llevaba a?os sin un ¨¦xito¡±.
As¨ª relata Johnny Ramone el ambiente en el estudio: "Me voy¡¯, dije. A lo Phil Spector me contest¨®: ¡®?T¨² no vas a ninguna parte!¡¯. Yo le repliqu¨¦: ¡®?Qu¨¦ vas a hacer, Phil, dispararme?¡¯. La verdad es que en ese momento me importaba un carajo si me pegaba un tiro o no; lo ¨²nico que quer¨ªa era irme¡±
La grabaci¨®n comenz¨® en mayo de 1979, con un presupuesto de 200.000 d¨®lares (por hacer una comparaci¨®n, el famoso ¨¢lbum debut de la banda, Ramones, hab¨ªa costado 6.000), y se extendi¨® a lo largo de cinco accidentadas semanas. La primera noche, seg¨²n cuenta Johnny Ramone en su libro, la banda trat¨® de hacer pi?a con Spector y vieron juntos en su mansi¨®n de Beverly Hills la pel¨ªcula Magic: El mu?eco diab¨®lico (no confundir con el otro Mu?eco diab¨®lico, Chucky), un film de terror de 1978 sobre un ventr¨ªlocuo ¨Cinterpretado por Anthony Hopkins¨C bajo el control de una marioneta malvada. En un reportaje sobre la realizaci¨®n del disco para la revista Uncut, Ed Stasium cont¨® que, por alg¨²n motivo, el m¨ªtico arreglista estaba obsesionado con la pel¨ªcula. ¡°No quer¨ªa que la banda se fuera de la casa, les forz¨® a verla repetidas veces¡±, recuerda. Aunque matiza: ¡°Era una persona solitaria, en general no quer¨ªa que nadie se fuese nunca¡±.
Algo similar ocurri¨®, seg¨²n Dee Dee Ramone, en otra ocasi¨®n con la canci¨®n Baby, I love you, ¨¦xito de The Ronettes coescrito por el productor. ¡°Nos hizo escuchar c¨®mo la cantaba y tocaba al piano hasta las 4:30 de la madrugada¡±, asegur¨® el bajista, que incluso afirm¨® que el productor le hab¨ªa apuntado al coraz¨®n con una pistola en una de estas retenciones. El extremo ha sido cuestionado varias veces por otros de los presentes, que sin embargo han reconocido que el productor ten¨ªa armas en la casa.
En beneficio de esa atm¨®sfera de terror, uno de los amigos de Spector que frecuentaba la mansi¨®n era Al Lewis, actor popular por haber dado vida al abuelo vampiro de la serie La familia Munster. Tambi¨¦n hubo fricciones con ¨¦l: Lewis era de sensibilidad progresista y Johnny Ramone, un ultraderechista en toda regla que cre¨ªa haber perdido su antiguo trabajo como fontanero por una conspiraci¨®n de las minor¨ªas contra el hombre blanco, se enzarzaba en discusiones con la estrella.
El baterista Marky Ramone, en su autobiograf¨ªa Punk rock blitzkrieg (2015), recuerda: ¡°Lewis era partidario de abolir las leyes antidroga y abogaba por una sanidad p¨²blica universal. Johnny le dijo que con una sanidad universal no habr¨ªa manera de librarse de los inmigrantes, y Lewis le respondi¨® que los inmigrantes hab¨ªan construido nuestro pa¨ªs. El abuelo Munster le puso en su lugar¡±. Las diferencias pol¨ªticas eran tambi¨¦n, de hecho, una de las causas de la relaci¨®n tirante entre el guitarrista y Joey, relaci¨®n que se volver¨ªa ya inexistente cuando, el siguiente verano, la novia del cantante le abandonase por Johnny.
Entre tanto, Spector parec¨ªa atravesar problemas con la bebida y posiblemente con otras sustancias. ¡°Nunca com¨ªa ni dorm¨ªa, as¨ª que nosotros sospech¨¢bamos que se met¨ªa coca. Realmente no s¨¦ si eran drogas, paranoia o qu¨¦: estaba loco¡±, cuenta Johnny Ramone en Commando. Mientras a Spector le irritaba que Dee Dee consumiese hero¨ªna, parad¨®jicamente el alcohol ayud¨® a forjar una improbable camarader¨ªa entre Marky (que acabar¨ªa sufriendo alucinaciones y teniendo que acudir a desintoxicaci¨®n) y ¨¦l. ¡°Fue mi compa?ero de copas. Creo que Phil hizo un buen trabajo, teniendo en cuenta que lo hizo borracho¡±, afirma el baterista en el documental de mismo nombre, End of the Century, dirigido por Jim Fields y Michael Gramaglia.
Una de los momentos de m¨¢xima tensi¨®n lleg¨® con la regrabaci¨®n de Rock n¡¯ Roll High School, un tema que ya hab¨ªan hecho con Ed Stasium, se hab¨ªa lanzado comercialmente e incluso hab¨ªa dado nombre a la primera pel¨ªcula de la banda, una hilarante comedia de instituto con ratones gigantes producida por el rey de la serie B, Roger Corman.
El guitarrista Johnny Ramone relata en Commando: ¡°[Spector] me tuvo all¨ª tocando los acordes de apertura de Rock n¡¯ Roll High School una y otra vez, y as¨ª durante tres o cuatro horas. Se pon¨ªa a escucharlo 300 veces y volv¨ªa a decirme que tocara de nuevo el mismo acorde mientras lo marcaba taconeando y me gritaba: ¡®?Mierda, co?o, joder! ?Mierda, co?o, joder!¡¯. Hasta que no pude m¨¢s y le dije: ¡®Me voy¡¯, a lo que me contest¨®: ¡®?T¨² no vas a ninguna parte!¡¯ y yo le repliqu¨¦: ¡®?Qu¨¦ vas a hacer, Phil, dispararme?¡¯. La verdad es que en ese momento me importaba un carajo si me pegaba un tiro o no; lo ¨²nico que quer¨ªa era irme¡±.
El proceso parti¨® al grupo en dos. Mientras Johnny y Dee Dee se sent¨ªan parte de una encerrona y odiaban a Spector, Joey, una persona introvertida, con trastornos psicol¨®gicos y que apenas opinaba sobre nada concerniente al grupo (pese a ser el segundo principal autor de canciones, despu¨¦s de Dee Dee), adquiri¨® rango de l¨ªder de la banda despu¨¦s de cuatro ¨¢lbumes siendo ninguneado. ¡°Trabajar con Phil Spector ayud¨® a Joey a superar las inseguridades que ten¨ªa, m¨¢s que cualquier otra cosa en su carrera¡±, apunta Mickey Leigh, hermano del cantante y autor del libro I slept with Joey Ramone: A family memoir (1994).
Johnny pudo finalmente irse a los cinco d¨ªas de iniciar la grabaci¨®n, aunque por un motivo tr¨¢gico: la inesperada muerte de su padre. ¡°Estaba devastado y cuando Seymour Stein [propietario de Sire Records, la discogr¨¢fica de Ramones] me llam¨® para darme el p¨¦same, le dije que a pesar de todo era mi billete para salir de all¨ª¡±. El guitarrista, no obstante, volvi¨® m¨¢s tarde a Los ?ngeles para completar sus tomas.
End of the Century fue, seg¨²n declararon Johnny y Dee Dee en diversas entrevistas a lo largo del tiempo, el disco que deterior¨® las relaciones en la banda y el que dibuj¨® por primera vez una lucha de poderes entre el guitarrista y Joey. El dibujante y periodista John Holmstrom, cofundador del fanzine Punk Magazine, lo analiz¨® de la siguiente manera: ¡°End of the Century representa el tipo de m¨²sica pop que m¨¢s le gustaba a Joey, la que ¨¦l quer¨ªa hacer y hacia donde quer¨ªa que se dirigieran los Ramones. Y fue la renuncia al punk m¨¢s puro y hardcore que Johnny no quer¨ªa abandonar. Johnny opinaba que todos los discos ten¨ªan que ser como el primero, por siempre y para siempre¡±. La puntilla la puso su portada, la primera donde aparec¨ªan sin sus famosas chaquetas de cuero, elegida contra el criterio del guitarrista y con el voto favorable del resto de miembros del grupo.
El bi¨®grafo Jim Bessman, sin embargo, difiere de Johnny en declaraciones a ICON: ¡°?l sent¨ªa que hab¨ªan cedido a la tentaci¨®n comercial y que Spector hab¨ªa diluido el sonido aut¨¦ntico de la banda. Pero para m¨ª, como adepto del productor y de los Ramones, el disco ha demostrado ser hist¨®ricamente significativo. Fue, en esencia, una reuni¨®n de dos muros de sonido: por supuesto, el de Phil Spector, pero tambi¨¦n el de los Ramones y su aluvi¨®n ensordecedor. Esa combinaci¨®n ha hecho que End of the Century perdure y sea un cl¨¢sico en s¨ª mismo, como los cuatro discos punk-rock anteriores¡±.
El disco, lanzado el 4 de febrero de 1980, no fue un ¨¦xito, pero s¨ª fue el m¨¢s vendido de los Ramones. Esto es: alcanz¨® el puesto 44 en Estados Unidos. ¡°Despu¨¦s de que en esta ocasi¨®n tampoco logr¨¢ramos vender ning¨²n disco, supe que ya nunca tendr¨ªamos un ¨¦xito y tendr¨ªamos que dedicarnos a mantener a nuestros seguidores¡±, declar¨® el guitarrista en el documental de End of the Century.
Lejos de obtener el temido rechazo de los fans, End of the Century se gan¨® un cierto estatus de culto y ha sido reivindicado por los seguidores a lo largo del tiempo debido a sus peculiares caracter¨ªsticas dentro de una discograf¨ªa, precisamente, criticada a veces con mayor o menor fundamento por ser repetitiva. As¨ª opina Adolfo D¨ªaz, cantante y guitarrista de Airbag, una de las bandas nacionales m¨¢s claramente marcadas por el legado de Ramones, en declaraciones a ICON: ¡°Es un disco diferente y especial. Tiene la producci¨®n m¨¢s arriesgada de su carrera y varios cl¨¢sicos incontestables, adem¨¢s de que es un trabajo imprescindible para entender la carrera global del grupo, del que mucha gente dicen que todos sus discos suenan igual, y creo que no es cierto¡±.
Tambi¨¦n consultado por ICON, Pablo Franco, bajista de Sugus ¨Cbanda perteneciente a la delegaci¨®n pop-punk que tuvo Espa?a en los noventa, a¨²n en activo¨C, cree que el ¨¢lbum ¡°no deja de ser un intento fallido de lo que nunca sucedi¨®, que Ramones fuera un grupo de masas¡±. Si bien, no duda en calificarlo como ¡°un gran disco¡±.
Despu¨¦s de la experiencia Spector, los Ramones no volvieron a grabar un disco t¨¦cnicamente tan complejo, y a nivel art¨ªstico mantuvieron una gran estabilidad entre las personalidades de Joey y Johnny, si bien los accesos m¨¢s punk realmente siempre dependieron del momento de inspiraci¨®n en que se encontrase Dee Dee, que abandonar¨ªa la banda en 1989 para forjarse una carrera en el rap.
Sus miembros originales fallecer¨ªan uno a uno en un espacio de tiempo sobrecogedoramente corto: Joey Ramone, de un linfoma a los 49 a?os, en 2001; Dee Dee Ramone, de una sobredosis de hero¨ªna a los 50 a?os, en 2002; Johnny Ramone, por un c¨¢ncer de pr¨®stata a los 55 a?os, en 2004; y Tommy Ramone, bater¨ªa original del grupo, por un c¨¢ncer de las v¨ªas biliares a los 65 a?os, en 2014.
En cuanto a Phil Spector, ha sobrevivido a tres de los cuatro miembros de Ramones que participaron en la grabaci¨®n, pero no en circunstancias muy halag¨¹e?as: entre rejas.
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