El orangut¨¢n m¨¢s vulnerable del mundo, amenazado por una presa en Indonesia
La construcci¨®n de la central hidroel¨¦ctrica est¨¢ modificando parte del h¨¢bitat de los animales, lo que les expondr¨¢ a¨²n m¨¢s a la caza furtiva y conflictos con agricultores
Con menos de 800 ejemplares, el orangut¨¢n de Tapanuli es uno de los m¨¢s vulnerables del mundo. La construcci¨®n de una central hidroel¨¦ctrica en la provincia indonesia de Sumatra del Norte pone en grave a peligro a esta especie, mientras crecen las denuncias de irregularidades, las presiones a los activistas y las acusaciones de que tambi¨¦n perjudicar¨¢ a los habitantes de la zona.
Las obras de construcci¨®n de la presa est¨¢n modificando parte del h¨¢bitat del orangut¨¢n de esta especie reconocida en 2017, lo que, seg¨²n algunos cient¨ªficos, incrementar¨¢ la fragmentaci¨®n de la poblaci¨®n de simios y les expondr¨¢ a¨²n m¨¢s a la caza furtiva y conflictos con agricultores.
La central hidroel¨¦ctrica se construye en el sur del ecosistema de Batang Toru, una exuberante zona de bosque tropical con una gran biodiversidad y frecuente actividad s¨ªsmica, y ser¨¢ terminado en 2022, aunque hasta el momento solo es un claro en la selva donde se levantan barracones con tejados azules y rojos.
Refugio de la biodiversidad
En el pueblo de Arse, a unos 15 kil¨®metros de la presa y en el extremo oriental del ecosistema de Batang Toru, el agricultor Sapto Bin Sormin muestra el lugar en su plantaci¨®n donde, por primera vez desde que tiene uso de memoria, han anidado orangutanes.
Sormin lamenta la p¨¦rdida de 1,2 millones de rupias (unos 87 d¨®lares u 81 euros), o un mes de ingresos, por los frijoles amargos y durianes que se comieron los simios antes de que guardabosques y residentes los expulsasen al tupido bosque tropical protegido.
"Si los orangutanes vienen al pueblo molestar¨¢n a la gente y provocar¨¢n da?os", lamenta entre palmeras y ¨¢rboles frutales el padre de dos hijos sobre la presencia de orangutanes en Arse.
En julio del a?o pasado, una veintena de cient¨ªficos escribi¨® una carta al presidente de Indonesia, Joko Widodo, en la que describieron el proyecto como "el ¨²ltimo clavo en el ata¨²d" de la especie, que requiere una poblaci¨®n m¨ªnima de 500 orangutanes para alcanzar viabilidad gen¨¦tica.
El proyecto de 510 megavatios y 1.600 millones de d¨®lares de inversi¨®n emprendido por la empresa indonesia PT North Sumatra Hydro Energy (NSHE), que construye desde 2015 el gigante chino Sinohydro en el municipio de Tapanuli Meridional, ha sido incluido en el plan estrat¨¦gico energ¨¦tico del Gobierno.
La presa no solo afectar¨¢ a los orangutanes, ya que Batang Toru, con cerca de 150.000 hect¨¢reas, es hogar de cientos de especies de flora y fauna, entre ellos el tigre de Sumatra o el pangol¨ªn, que est¨¢n "gravemente amenazadas", seg¨²n la Uni¨®n Internacional para la Conservaci¨®n de la Naturaleza.
Electricidad para algunos
R¨ªo abajo, las plantaciones de aceite de palma dominan el paisaje en el camino hacia el pueblo de Aek Rambe, donde su jefe, el anciano Sarul Nasution, se queja de que los cultivos "est¨¢n secando las reservas de agua y han disminuido la cantidad de pesca".
La presa agravar¨¢ este problema en m¨¢s de una decena de pueblos, donde viven unas 3.000 personas, seg¨²n estima la compa?¨ªa indonesia.
En Aek Rambe, las casas de madera se elevan sobre postes a la orilla del r¨ªo, la red el¨¦ctrica todav¨ªa no ha llegado y solo unos pocos generadores iluminan a los pescadores mientras pescan la captura del d¨ªa.
El anciano cuenta que no hay planes para proporcionar electricidad al peque?o pueblo. La central ser¨¢ clave para satisfacer la creciente demanda de electricidad en la isla, asegura NSHE, pero en su estudio social reconoce que existen "expectativas que no ser¨¢n satisfechas" sobre la falta de acceso a electricidad en Tapanulis Meridional.
NSHE defendi¨® en un correo electr¨®nico que la central no es perjudicial para el medioambiente o las comunidades de la zona ni se encuentra en una zona primaria de h¨¢bitat del orangut¨¢n de Tapanuli, y ha promovido en los ¨²ltimos meses proyectos de conservaci¨®n en Batang Toru.
Cr¨ªticos silenciados
La organizaci¨®n ecologista local Walhi, la mayor del archipi¨¦lago, es la ¨²nica sobre el terreno que todav¨ªa critica abiertamente la construcci¨®n de la presa, despu¨¦s de emprender en 2018 un proceso judicial contra el estudio medioambiental del proyecto que en este momento se halla en el Tribunal Supremo.
Semanas despu¨¦s de que Walhi hubiera denunciado presiones y amenazas contra su personal, su abogado, Golfrid Siregar fue encontrando en octubre herido de gravedad junto a su motocicleta en una calle de Medan, capital provincial de Sumatra del Norte, y muri¨® en el hospital tres d¨ªas m¨¢s tarde. La Polic¨ªa determin¨® que la muerte se debi¨® a un accidente de tr¨¢fico, pero una coalici¨®n de organizaciones de defensa de los derechos humanos locales e internacionales, incluidas Human Rights Watch y Amnist¨ªa Internacional, cuestionan la investigaci¨®n oficial.
"Hemos recibido presiones a trav¨¦s de terceras personas que dicen que van a matarme, que piden que los extranjeros no vengan a esta oficina", dijo en su despacho de Med¨¢n Dana Prima Tarigan, el director ejecutivo de Walhi en Sumatra del Norte.
Con la campa?a en contra de la presa debilitada y el apoyo de l¨ªderes locales y nacionales asegurado, el ¨²nico obst¨¢culo importante al que se enfrenta la central en estos momentos es la demanda en el Tribunal Supremo.
Walhi ve con esperanza la reciente cancelaci¨®n por motivos medioambientales de otro proyecto hidroel¨¦ctrico en la provincia indonesia de Aceh y defiende su posici¨®n. "No nos oponemos a las construcciones, pero tienen que tener en cuenta a la gente y a la vida salvaje. Salvar el ecosistema de Batangtoru y su biodiversidad es salvar a la humanidad", afirma el activista de Walhi, Roy Lumban Gaol.
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