Ku Kux Klan, actores blancos con bet¨²n y estrellas negras ¡®blanqueadas¡¯: el lado m¨¢s racista de Hollywood en sus carteles de cine
La industria cinematogr¨¢fica de Los ?ngeles se ha encargado de construir una identidad de naci¨®n, de supremac¨ªa blanca, que las 'race movies', las pel¨ªculas hechas por y para afroamericanos, deb¨ªan reforzar. Algo sali¨® 'mal'
La epifan¨ªa y tambi¨¦n la ¨¦pica del cine norteamericano est¨¢ se?alada por la pel¨ªcula El nacimiento de una naci¨®n (D.W. Griffith, 1915), f¨¢bula hist¨®rica que glorificaba un movimiento supremacista como el Ku Klux Klan y la representaci¨®n de la poblaci¨®n negra como un pueblo ignorante, salvaje y violador (la pel¨ªcula no fue respondida hasta 100 a?os despu¨¦s con la versi¨®n de Nat Parker en 2017). Los personajes afroamericanos interpretados por actores blancos maquillados de negro revelan el racismo de una incipiente industria cinematogr¨¢fica. El debate cine-racismo se insertaba ¨Cdesde un primer momento¨C en la propia historia del nacimiento del cine.
Buena parte de esta cr¨®nica de segregaci¨®n racial se puede visualizar en la iconograf¨ªa de las llamadas race movies, los carteles o p¨®sters de las pel¨ªculas que entre 1915 y 1950 se realizan para un p¨²blico exclusivamente afroamericano; un cine producido, dirigido e interpretado por negros: "All colored cast", como se?ala el texto publicitario que acompa?a los carteles.
Paralelo a la puesta en marcha de la gran maquinaria de Hollywood, dos compa?¨ªas afroamericanas, la Lincoln Motion Picture Company y Micheaux Film Corporation comienzan a realizar pel¨ªculas fuera de los circuitos hollywoodienses, producciones distribuidas de una forma independiente. Mientras en los estados del sur las pel¨ªculas se proyectan en salas segregadas, auditorios solo para los negros, en el norte se realizan sesiones especiales, matinales o de medianoche, en los coliseos tradicionales para el p¨²blico afroamericano.
La iconograf¨ªa de estas primeras race movies, que transcurre entre el cine mudo y la llegada del cine sonoro, reproduce g¨¦neros populares como el w¨¦stern, el melodrama, pel¨ªculas de suspense o musicales con la llegada del cine sonoro. Un cine destinado a promover la integraci¨®n del afroamericano en la sociedad americana y que evita temas "espinosos" como la pobreza de los guetos, la injusticia social o la segregaci¨®n racial. El mensaje: conseguir que la poblaci¨®n afroamericana se sienta insertada en la mitolog¨ªa popular norteamericana.
Las estrellas del activismo
El desarrollo de este cine produce las primeras estrellas negras como el cantante y activista Paul Robeson; su poderosa figura en los carteles de Body and Soul o The Emperor Jones parece desafiar todas las leyes segregacionistas imperantes. La voz potente de Robeson quedar¨¢ unida para siempre a la canci¨®n Ol' Man River del musical Show Boat. Combatiente en todos los frentes por los derechos civiles, Robeson ver¨¢ su carrera truncada por culpa del macartismo.
La otra gran estrella negra de estos primeros momentos del cine sonoro es la cantante y bailarina Josephine Baker que triunfa en Par¨ªs con el espect¨¢culo La Revue N¨¨gre (en espa?ol, "la revista negra"). El cuerpo semidesnudo de Baker se proyecta en libertad en los carteles europeos en una mezcla explosiva de fantas¨ªa y exotismo. La llamada era del jazz coincide con el renacimiento de Harlem como foco de atracci¨®n para m¨²sicos, cantantes y bailarines afroamericanos.
Algunos de ellos, Ethel Waters, Louis Armstrong o Lena Horne, una int¨¦rprete que la industria cinematogr¨¢fica intenta blanquear, son reclamados por Hollywood. Musicales como Cabin In The Sky, con un estilizado cartel del dibujante Al Hirschfeld, o Stormy Weather, dos grandes producciones protagonizadas por actores negros, suponen un punto de inflexi¨®n en la historia del cine norteamericano y la visibilidad de los actores afroamericanos. Lejos parec¨ªan quedar aquellos rid¨ªculos personajes maquillados de bet¨²n¡
La cr¨®nica visual de esta historia del cine afroamericano, desde aquellas race movies, de ilustraci¨®n melodram¨¢tica o caricaturesca, a los desafiantes g¨¢nsters y proxenetas del g¨¦nero Blaxploitation se puede documentar en el libro Separate Cinema: The First 100 Years of Black Poster Art de la editorial Reel Art Press ("cine segregado: los primeros 100 a?os de arte en los p¨®sters negros"). El volumen re¨²ne parte del archivo del investigador John Kisch, creador de la colecci¨®n privada m¨¢s extensa sobre el cine afroamericano.
El archivo, cerca de 40.000 documentos, cuenta con una gran colecci¨®n de fotograf¨ªas y sobre todo carteles, muchos de ellos realizados por dise?adores europeos donde destaca el acento surrealista de la llamada escuela polaca del cartel representada por nombres como Roman Cieslewicz, o cl¨¢sicos americanos, Paul Rand o Saul Bass, este ¨²ltimo dise?ador gr¨¢fico de la imagen publicitaria de dos musicales negros, Porgy and Bess y Carmen Jones, dirigidos por Otto Preminger, hitos en la visibilidad de la cultura afroamericana en la norteam¨¦rica de los a?os cincuenta.
El cartel cinematogr¨¢fico proyecta el nacimiento ¨Ca contracorriente¨C de un star system afroamericano que ir¨¢ sumando nombres, Dorothy Dandridge, Harry Belafonte, Sammy Davis Jr. o Sidney Poitier en medio de las turbulencias de un pa¨ªs envuelto en los conflictos raciales y la lucha por los derechos civiles. El archivo, The Separate Archive Cinema, se encuentra depositado en el futuro Lucas Museum of Narrative Art, cuya inauguraci¨®n est¨¢ prevista para el a?o 2022 en Los ?ngeles.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.