Artur Laperla: ¡°Los c¨®mics que gustan se releen una y otra vez y los ni?os son muy de repetici¨®n¡±
Es uno de los referentes espa?oles en el mundo del c¨®mic, sobre todo el infantil, que ya sabe lo que es conquistar a miles de ni?os
El c¨®mic y la novela gr¨¢fica viven un peque?o boom que, como no pod¨ªa ser de otra forma, ha llegado al mercado de la literatura infantil. Muchas editoriales est¨¢n incorporando este g¨¦nero a su cat¨¢logo por el gancho que tiene entre las ni?as y ni?os. Hoy, adem¨¢s, tras haber sido sometido a un ninguneo inexplicable, el c¨®mic es se?alado como una herramienta incomparable para acercar a los peque?os a los libros, sobre todo a aquellos que muestran menos inter¨¦s por la lectura. En ese contexto se enmarca la nueva colecci¨®n de Beascoa, Mi primer c¨®mic, que narra las historias de F¨¦lix y Calcita (Nunca enfades a un gigante), la saga que relata la relaci¨®n entre un ni?o y una peque?a trol. Su autor, Artur Laperla, es uno de los referentes espa?oles en el mundo del c¨®mic, sobre todo el infantil, que ya sabe lo que es conquistar a miles de ni?os con su serie Superpatata (Bang Ediciones). ¡°El p¨²blico infantil es muy agradecido¡±, asegura Laperla, que considera que un buen c¨®mic infantil deber¨ªa de ser ¡°¨¢gil, directo y divertido¡±.
PREGUNTA. Acabas de publicar con Beascoa la segunda entrega de lo que a todas luces es ya una serie de c¨®mic para primeros lectores, F¨¦lix y Calcita. ?Qu¨¦ van a encontrar las ni?as y ni?os y sus madres y padres en esta saga?
RESPUESTA. Van a encontrar sobre todo humor y aventuras. Encontrar¨¢n un mundo fant¨¢stico con un ni?o en pijama y una peque?a trol. Y tambi¨¦n gigantes, gnomos, brujas, ogros, un perro robot y m¨¢s troles de todos los tama?os y colores.
P. F¨¦lix y Calcita es el t¨ªtulo sobre el que se sustenta la apuesta de Beascoa por el c¨®mic, una apuesta que est¨¢n haciendo tambi¨¦n cada vez m¨¢s editoriales dedicadas a la literatura infantil. ?Dir¨ªas que estamos asistiendo a un redescubrimiento y revalorizaci¨®n del c¨®mic?
R. El medio lleva d¨¦cadas en Espa?a intentando destacar y revalorizarse. Y lo consigue a ratos. Puede que se consiguiera un poco con la irrupci¨®n de la novela gr¨¢fica. Eso abri¨® el c¨®mic a editoriales m¨¢s generalistas. Ahora parece que le toca al c¨®mic infantil. Muchas editoriales apuestan ahora por el c¨®mic dirigido a ni?os. Trabaj¨¦ en una serie de libros con un escritor que dec¨ªa, medio en broma, que el perfil del lector en Espa?a es el de una ni?a de ocho a?os y que para ganarse la vida escribiendo hab¨ªa que tenerlo en cuenta. Puede que tambi¨¦n vaya por ah¨ª la cosa.
P. Te preguntaba lo anterior porque no s¨¦ si como autor de c¨®mic, has tenido la sensaci¨®n de que muchas veces se trata el c¨®mic como una lectura menor y a sus lectores como lectores de segunda¡
R. No s¨¦, alguna vez. Es una guerra bastante antigua, y tambi¨¦n pasa con la novela de g¨¦nero o la prensa deportiva. Puede que exista cierto desconocimiento, pero hoy en d¨ªa no creo que una persona que lee habitualmente crea que Tint¨ªn es una lectura menor. Tambi¨¦n es cierto que hay c¨®mics que tienen m¨¢s enjundia que otros. Pero tambi¨¦n depende de las ganas y el momento. No deber¨ªa ser un problema si es una lectura mayor o menor. Me parece que es bueno leer variado y sin demasiados prejuicios.
P. En este apogeo se est¨¢ destacando del c¨®mic su utilidad como herramienta para despertar en los m¨¢s peque?os el amor por la lectura. ?Por qu¨¦ dir¨ªas que el c¨®mic ha tenido siempre esa facilidad para atraer a los primeros lectores?
R. Lo primero y m¨¢s obvio es porque es m¨¢s f¨¢cil leer y acabar un c¨®mic que una novela. Y eso da mucho gusto. Adem¨¢s,, est¨¢n los dibujos, la parte visual puede hacer al c¨®mic mucho m¨¢s atractivo al primer vistazo. Y luego est¨¢ la facilidad de relectura, que me parece que es parte indispensable del difrute de un c¨®mic. Los c¨®mics que gustan se releen una y otra vez, as¨ª que, si el c¨®mic es bueno, siempre se pueden encontrar nuevos matices. Adem¨¢s,, los ni?os son muy de la repetici¨®n.
P. T¨² tienes experiencia ya en el ¨¢mbito del c¨®mic infantil. No en vano, tu serie Superpatata ha vendido m¨¢s de 40.000 ejemplares enganchando a tantos o m¨¢s ni?os y ni?as. ?Qu¨¦ te llev¨® al c¨®mic infantil? ?Qu¨¦ te gusta de este sector?
R. Siempre he querido hacer c¨®mic. A m¨ª el c¨®mic me gusta en casi todas sus formas y variantes. Llegu¨¦ al c¨®mic infantil despu¨¦s de trabajar como ilustrador. Como ilustrador me especialic¨¦ en ilustraci¨®n infantil y juvenil y como siempre hab¨ªa querido dedicarme a hacer c¨®mics me pareci¨® l¨®gico probar con el c¨®mic infantil. Adem¨¢s, es un tipo de c¨®mic que nunca he dejado de consumir como lector. Me encantan los c¨®mics infantiles y juveniles de Dupuis de los a?os 50, 60 y 70.
Lo que m¨¢s me gusta, de todas formas, es que gracias al c¨®mic infantil puedo dedicarme a hacer c¨®mics. Y el contacto con el p¨²blico. El p¨²blico infantil es muy agradecido. Hago un mont¨®n de talleres y me lo paso muy bien con los ni?os. Tambi¨¦n me parece incre¨ªble que un padre me diga que el primer libro que ha le¨ªdo su hijo en la vida es Superpatata. ?Qu¨¦ responsabilidad!
P. Y tras ese ¨¦xito de Superpatata, ?qu¨¦ ingredientes dir¨ªas que debe tener un buen c¨®mic infantil para atrapar a los peque?os lectores?
R. Supongo que hay muchos tipos de buenos c¨®mics infantiles. Depende del autor. Te puedo decir que para m¨ª un buen c¨®mic infantil deber¨ªa de ser ¨¢gil, directo y divertido.
P. No s¨¦ si piensas en los padres y madres de esos ni?os cuando los escribes. Por aquello de que muchas veces somos quienes se los leemos¡
R. Primero intento que el c¨®mic me guste a m¨ª. Hacerlo y leerlo. Y claro, mi intenci¨®n es que lo disfruten muchos lectores de cero a ciento tres a?os si puede ser.
P. Adem¨¢s, de ilustrar varios c¨®mics, eres autor de una serie de c¨®mics er¨®tica, Melvin, y del c¨®mic de terror interactivo Maldita casa encantada. ?Cambian mucho las din¨¢micas de trabajo y el lenguaje, tanto visual como escrito, en funci¨®n de si uno se dirige al p¨²blico infantil o al adulto?
R. Siempre digo que para m¨ª no hay diferencia m¨¢s all¨¢ de la tem¨¢tica a la hora de enfrentarme a un c¨®mic infantil o adulto. Intento hacerlo lo mejor que puedo teniendo en cuenta lo que quiero explicar, el tiempo y las condiciones de trabajo. De hecho, hace a?os que utilizo la misma cuadr¨ªcula para la composici¨®n de p¨¢gina en todos mis c¨®mics. Y siempre hago l¨ªnea negra de rotulador y color plano bastante chill¨®n. T¨¦cnicamente no hay diferencia. Cambia sobre todo el contenido del guion y el dise?o de personajes. En un c¨®mic adulto puede haber sexo y violencia y m¨¢s flashbacks. Pero intento ser siempre claro, sencillo y directo, tanto en la estructura del guion como en el dibujo, independientemente del p¨²blico.
P. Cuando te he relacionado con Melvin me ha venido a la cabeza Tomi Ungerer.
R. ?Qu¨¦ bien, muchas gracias por relacionarme con Tomi Unger! Es verdad que tiene esa doble faceta y es buen¨ªsimo en las dos. Es un autor que me gusta mucho.
P. Es que sus libros infantiles llegaron a ser censurados durante a?os en EE UU debido a sus otros trabajos er¨®ticos. Por tu experiencia, ?sigue costando aceptar que un autor que escribe y dibuja para ni?os tenga tambi¨¦n esa otra faceta art¨ªstica o esa visi¨®n moralista est¨¢ superada?
R. Con Melvin s¨ª que llegu¨¦ a plantearme en un primer momento si iba a ser un problema hacer c¨®mic er¨®tico y c¨®mic infantil. Por suerte no lo ha sido y muchos ni?os y ni?as se llevan Superpatata y los padres y madres compran Melvin. Sobre todo las madres, que es algo que me hace mucha ilusi¨®n. Tambi¨¦n es verdad que mi tratamiento del erotismo es humor¨ªstico, ligero y nada agresivo, quiz¨¢s eso ayuda a que no resulte tan chocante tener esas dos facetas.
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