Una mirada cr¨ªtica al ¡®Pla Superilla¡¯ de Barcelona

El ya conocido t¨¦rmino de supermanzana fue introducido en el a?o 2016, inicialmente implementado en el barrio de Poblenou. Nueve manzanas de la ciudad de Barcelona se convirtieron en un peque?o laboratorio donde se dot¨® cierto espacio libre entre bloques para los peatones mediante la canalizaci¨®n del tr¨¢fico rodado alrededor de las zonas del ensanche. Los carriles para el autom¨®vil se estrecharon, y los veh¨ªculos que a¨²n entraban en el interior de la supermanzana deb¨ªan ceder el paso a los transe¨²ntes, adem¨¢s de reducir la velocidad m¨¢xima a diez kil¨®metros por hora.

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Desde entonces, seis supermanzanas se han implementado en la ciudad y, es ahora cuando la capital catalana ha presentado un nuevo plan, Pla Superilla Barcelona, que planea clonar esta idea a escala de ciudad; es decir, en la pr¨®xima d¨¦cada, este plan prev¨¦ un salto de escala para convertir toda la red central de la ciudad en zonas m¨¢s verdes, m¨¢s accesibles para los peatones y (casi) totalmente libre de coches.

Tal y como se anunci¨® en la presentaci¨®n del plan, ser¨¢n veintiuna calles del distrito del ensanche las que se convertir¨¢n en una especie de bloqueo para el autom¨®vil; es decir, el tr¨¢fico de veh¨ªculos solo se permitir¨¢ fuera de su per¨ªmetro dejando las calles del distrito solo accesibles para residentes, servicios y entregas. De este modo, los espacios entre bloques (islas) quedar¨¢n liberados de coches y podr¨¢n convertirse en plazas, calles y espacios verdes para el peat¨®n, donde ser¨¢n plantados ¨¢rboles que dar¨¢n 6,6 hect¨¢reas de sombra, quedando as¨ª un ¨¢rea que contendr¨¢ 33,4 hect¨¢reas adicionales de espacio verde peatonal. El presupuesto inicial de este plan es de 38 millones de euros, lo que representa un ambicioso proyecto que significa una de las reformas m¨¢s profundas en lo que va de siglo.

Es un salto de escala para convertir toda la red central de la ciudad en zonas m¨¢s verdes, m¨¢s accesibles para los peatones y (casi) libre de coches

Hoy por hoy, Barcelona es una ciudad con pocos parques y con una densidad de poblaci¨®n muy alta. Si bien las supermanzanas han demostrado ser una forma necesaria y eficaz de liberar espacio, cabe mencionar que no todo este espacio est¨¢ dotado al peat¨®n, ya que muchas t¨¢cticas realizadas recientemente est¨¢n dirigidas a favorecer el espacio de consumo (como se ha visto durante esta ¨¦poca de confinamiento). La reciente pacificaci¨®n de las calles reduciendo el tr¨¢fico y pintando la calzada con pintura amarilla implica mucho m¨¢s de lo que se ha llamado urbanismo t¨¢ctico.

El urbanismo t¨¢ctico no solo debe consistir en embellecer las calles para hacerlas m¨¢s atractivas, sino que estas medidas tienen que estar acompa?adas de otras acciones m¨¢s s¨®lidas y permanentes: dotar de espacio p¨²blico ¡°real¡± destinado a los peatones ¨Cno habilitar estos espacios al consumo¨C, as¨ª como acompa?ar estos espacios con mejoras hacia la ciudadan¨ªa que favorezcan el juego, el transporte p¨²blico, los servicios, entre otros.

Como muchas otras ciudades, Barcelona ha sufrido graves procesos de gentrificaci¨®n (particularmente en el centro) as¨ª como en los barrios m¨¢s popularmente conocidos (Born, Gr¨¤cia, Poblenou, etc.). De esta manera, muchos barceloneses se han visto obligados a mudarse a zonas perif¨¦ricas e incluso fuera de los l¨ªmites metropolitanos con lo que esta poblaci¨®n depende m¨¢s del veh¨ªculo privado para desplazarse. Este punto es importante porque observando el plan, uno de los ejes principales de la ciudad que conecta tanto la zona de El Maresme (norte) con el Garraf (sur), se prev¨¦ como un eje verde sin dar prioridad al peat¨®n. Es decir, la Gran V¨ªa, as¨ª como todas sus intersecciones estar¨¢n llenas de coches, al menos, hasta 2030.

A todo esto, el problema de la especulaci¨®n es otro de los factores a tener en cuenta en Barcelona, y m¨¢s, con la presentaci¨®n de este plan anunciando una ciudad mucho m¨¢s verde. ?Se est¨¢ monitoreando y regulando la compraventa de bloques de viviendas en las calles que se pacificar¨¢n?

Es importante tambi¨¦n que el plan muestre cu¨¢les son los objetivos para la reducci¨®n de veh¨ªculos contaminantes y emisiones efecto invernadero¡­ y a la vez, reivindicar las peque?as acciones que son de competencia municipal y hoy en d¨ªa, carecen de fortaleza. V¨¦ase como ejemplo, multar a los conductores de veh¨ªculos que invaden carriles bicicleta, permitir que las motocicletas aparquen en la acera, etc.

La presentaci¨®n de este plan siempre es una buena noticia, aunque es importante que todo tenga un cierto sentido y coherencia para que Barcelona, realmente, sea un modelo de ciudad que verdaderamente apueste por el medioambiente y sea dise?ada para las personas. Pero, lamentablemente, a¨²n se siguen construyendo estacionamientos debajo de mercados municipales, autopistas debajo de nuevos parques (como el caso de Les Gl¨°ries), se siguen promocionando anuncios de veh¨ªculos en el metro, y la ciudad sigue celebrando el Sal¨®n del autom¨®vil en instalaciones municipales¡­ un c¨²mulo de incoherencias que deben alinearse con este nuevo plan para que todo tenga mucho m¨¢s sentido y consistencia.