Asfalto para el 5G

La melod¨ªa viene no se sabe muy desde cu¨¢ndo, desde 2030 o desde ma?ana mismo, y deja un mensaje inscrito en el aire: en un momento dado se circular¨¢ por autopistas musicales (e inteligentes). No se trata de ciencia ficci¨®n ni de exhibicionismo tecnol¨®gico, sino de seguridad vial. De usar la conectividad para poner la carretera del lado del conductor. "Debemos cambiar la infraestructura para que soporte los nuevos sistemas de comunicaci¨®n que llegan con el desarrollo del veh¨ªculo conectado. Y comprender que ya nada funciona sin conectividad", asegura Enrique Belda Esplugues, subdirector general de Sistemas de Informaci¨®n y Comunicaciones para la Seguridad del Centro Tecnol¨®gico de Seguridad del Ministerio del Interior.

As¨ª que en este terreno se habla, por ejemplo, de que los veh¨ªculos generar¨¢n energ¨ªa para encender las farolas de los arcenes; de que los coches el¨¦ctricos se cargar¨¢n sobre la marcha; de cruces inteligentes ¡ªque avisar¨¢n a los peatones de la cercan¨ªa de un veh¨ªculo¡ª, de que las se?ales de tr¨¢fico y propias carreteras avisar¨¢n a los conductores de las infracciones cometidas. De que siempre habr¨¢ un carril reservado para las redes 5G y la red viaria se llenar¨¢ de sensores.

Este variopinto paisaje lo dibujan, entre otros, los autores de un estudio conjunto de la Universidad de Zaragoza, el Centro Universitario de la Defensa, la Universitat Polit¨¨cnica de Val¨¨ncia y la Universidad Nacional Tsing Hua (THU) de Taiw¨¢n. Difundida por la universidad aragonesa en octubre pasado, la investigaci¨®n recoge varios proyectos que certifican una tendencia: "Las carreteras ya no son una simple infraestructura f¨ªsica, sino una superautopista de la informaci¨®n".

Las palabras son del profesor Chai K. Toh, coautor de un texto en el que las "carreteras de melod¨ªa", en realidad, son solo el ejemplo m¨¢s pintoresco de lo que est¨¢ por venir. Mediante tiras de resonancia en el asfalto, v¨ªas como la Dinglin Road de Taiw¨¢n o la Ruta 66 a su paso por Nuevo M¨¦xico (EE UU) emiten determinadas composiciones musicales cuando los veh¨ªculos circulan a una velocidad apropiada. Desde hace una d¨¦cada se investiga tambi¨¦n la instalaci¨®n de cristales piezoel¨¦ctricos bajo el asfalto, cuya deformaci¨®n ¨Cproducida por el paso de los veh¨ªculos¨C genera electricidad. Hasta 400 kilovatios de potencia por kil¨®metro, seg¨²n la empresa israel¨ª Innowattech. En otras carreteras (algunas de EE UU, Canad¨¢ y Taiw¨¢n) se han instalado extensi¨®metros que permiten, mediante tecnolog¨ªa HS-WIM, controlar el peso de los veh¨ªculos al momento.

Pero la clave de las v¨ªas futuras no reside en la m¨²sica y ni siquiera en los sensores, sino en su uso inteligente. En el desarrollo posible, seg¨²n el estudio citado, de se?ales de tr¨¢fico inal¨¢mbricas (sin existencia f¨ªsica) que detecten un veh¨ªculo y le informen ¡ªmediante la voz o en el cuadro de instrumentos¡ª de un l¨ªmite de velocidad o de la aproximaci¨®n a un cruce sin preferencia.

Comunicaci¨®n eficaz

"Es necesario empujar a la carretera para que sea el soporte del veh¨ªculo y el usuario conectados", explic¨® Belda en la inauguraci¨®n del primer Congreso Espa?ol de Smart Roads (carreteras inteligentes), impulsado en diciembre de 2020 por la Asociaci¨®n Espa?ola de la Carretera (AEC). Una comunicaci¨®n eficaz entre el veh¨ªculo y la infraestructura como la que ofrece la tecnolog¨ªa 5G. Su baja latencia (tiempo de respuesta) permite, por ejemplo, lanzar un aviso "para que un coche no se meta en un t¨²nel si se detecta una incidencia", ilustr¨® en el mismo congreso Juan Beltr¨¢n, director de Desarrollo de Negocio de la compa?¨ªa tecnol¨®gica SICE, que desarrolla de sistemas inteligentes de control de tr¨¢fico.

La conectividad 5G exige la instalaci¨®n de elementos en la v¨ªa y en los propios veh¨ªculos, que ya avanzan por ese camino. La Asociaci¨®n Nacional de Vendedores de Veh¨ªculos (Ganvam) calcula que en 2025 en Espa?a habr¨¢ m¨¢s de nueve millones de turismos conectados (un 35% del parque automovil¨ªstico). En la jornada informativa Ganvam Conecta, de diciembre de 2020, la directora de la Oficina de Estrategia de Movilidad del Ministerio de Transportes, ?ngeles Mar¨ªn, apunt¨® que antes de una d¨¦cada todos los veh¨ªculos con menos de cinco a?os de antig¨¹edad tendr¨¢ conexi¨®n a Internet.

"La verdadera cuesti¨®n aqu¨ª es qu¨¦ significa digitalizar una carretera", se pregunt¨® en el foro Smart Roads Xavier Flores, director general de Infraestructuras de Movilidad de la Generalitat de Catalu?a. Se trata de "crear una superestructura digital, una plataforma donde toda la informaci¨®n real tenga su referente, y donde se creen las sinergias y los v¨ªnculos que permitan realmente sacar partido" a los datos.

Para reducir al m¨ªnimo la cifra de accidentes, heridos y fallecidos, la Asociaci¨®n Espa?ola de la Carretera considera fundamental llevar a la red viaria "una se?alizaci¨®n horizontal y vertical adecuada, informaci¨®n meteorol¨®gica de calidad, sistemas efectivos de aviso de incidencias, monitorizaci¨®n de la circulaci¨®n y cobertura 5G". Lograr la inversi¨®n es el siguiente paso: el coste de adaptar una carretera de alta capacidad a la movilidad aut¨®noma es de 230.000 euros por kil¨®metro.

Entre tanto, en opini¨®n del director de Estrategia y Desarrollo de Red de Telef¨®nica Espa?a, Javier Gutierrez, "el habilitador a corto plazo para impulsar la movilidad conectada con las redes existentes es el smartphone, que lo llevan conductores, peatones y ciclistas". Las redes actuales ya permiten exprimir la informaci¨®n "sin esperar al pleno desarrollo del 5G", explic¨® en la jornada Ganvam Conecta. Ya existen de hecho algunos proyectos en marcha, como la app de alertas auditivas que desarrolla el Servei Catal¨¢ de Tr¨¤nsit (con advertencias de carriles cortados por obras, avisos de accidentes o aver¨ªas, necesidad de uso de cadenas...) o los peajes inteligentes de Indra. Mediante visi¨®n artificial, los p¨®rticos son capaces de identificar el tipo de veh¨ªculo, su peso, el n¨²mero de ocupantes y los kil¨®metros recorridos, y despu¨¦s enviar los datos a la nube para calcular la tarifa con exactitud y cobrarla en la tarjeta del usuario.

Tecnolog¨ªas como esta permitir¨ªan, por ejemplo, desarrollar con precisi¨®n un sistema de pago por uso. Detr¨¢s de la cuesti¨®n econ¨®mica, sin embargo, aparece otra duda: la protecci¨®n de datos. "El anonimato es la base para generar la confianza y animar a que todos los usuarios formen parte de la movilidad conectada", sostiene el director general de DGT, Pere Navarro, presente tambi¨¦n en la jornada Ganvam Conecta.