Latinoam¨¦rica construye Estados Unidos

Los arquitectos hablan de repensar las ¨¢reas de baja densidad ¡ªcomo el primer cintur¨®n que rodea el centro de Denver donde se ubica este proyecto¡ª y se?alan ejemplos que replantean cuestiones dom¨¦sticas ¡ªdesde los materiales econ¨®micos y los elementos est¨¢ndar para construir las casas, hasta la posibilidad de compartir entre varias lo que antes era un solar para una vivienda unifamiliar¡ª. Eso es lo que propone este proyecto: compartir. ¡°Muchas ciudades y ayuntamientos norteamericanos ya est¨¢n considerando cambiar la legislaci¨®n en ciertas zonas suburbanas, pero c¨¦ntricas, para permitir hasta cuatro, seis u ocho residencias en solares donde antes solamente se permit¨ªa una sola casa¡± explican los arquitectos de Productora Wonne Ickx y Abel Perles.

El proyecto del estudio mexicano Productora parti¨® de esa certeza: la necesidad de cambiar. Los arquitectos constataron que las grandes viviendas unifamiliares de los barrios c¨¦ntricos son ya m¨¢s compartidas que utilizadas por una ¨²nica familia. Por movilidad, precariedad y cambios en la forma de arraigar en los lugares hoy son los compa?eros de piso, o varios amigos, los que comparten las antiguas residencias. Partiendo de ese conocimiento, los arquitectos pensaron en dise?ar fragmentando para dar respuesta a esa necesidad. El resultado son solares compartidos y tambi¨¦n espacios compartidos ¡ªuna cocina, una amplia sala, zonas de lavander¨ªa, un ba?o y zonas exteriores pavimentadas¡ª y zonas privadas ¡ªel dormitorio que es tambi¨¦n espacio de trabajo¡ª. Para Productora, este proyecto ¡°escenifica un sutil equilibrio entre la necesidad de privacidad y la posibilidad de interacci¨®n social que se da en la convivencia¡±.

Pero no es esa la ¨²nica propuesta que lanza el estudio mexicano. La econom¨ªa es clave para la viabilidad de una idea. Y esta se ha construido con un presupuesto muy limitado (200 d¨®lares por metro cuadrado, 166 euros) gracias a la utilizaci¨®n de materiales econ¨®micos y de soluciones est¨¢ndar existentes en el mercado de la construcci¨®n. Los vol¨²menes de cubierta inclinada est¨¢n revestidos con techo met¨¢lico. Esa cubierta es de un color azul est¨¢ndar que, simplemente por ser vistoso y estar poco utilizado, se convierte en especial al quedar descontextualizado. El tono azul se extiende por la fachada de listones conviviendo con diferentes gradaciones de color e intervalos verticales. As¨ª, la mancha de color, y sus sombras, construyen elementos reconocibles que refuerzan la identidad del conjunto y subrayan tambi¨¦n la del barrio.

Este es un proyecto innovador, astuto y optimista. A pesar de partir de un presupuesto muy limitado y de un volumen edificable restringido, logra que sea el dise?o ¡ªy no las carencias y limitaciones¡ª el que construya la naturaleza del lugar. En el interior de las viviendas, la falta de particiones consigue amplitud. Los espacios son generosos. En las viviendas delanteras las entradas tienen doble altura y la cocina y las zonas comunes miran a trav¨¦s de grandes vidrios que, al comunicarlos visualmente, tambi¨¦n despejan los espacios.

A pesar de que tanto el azul como la morfolog¨ªa de las viviendas construye una identidad com¨²n, las casas son distintas. Algunas, bajo la cubierta, y aprovechando esa inclinaci¨®n, contienen estudios, o dormitorios ¡ªa los que se accede por una escalera¡ª que dejan libre la planta baja para otros usos. Otras, las traseras, cuentan con una amplia puerta ¡ªde garaje enrollable¡ª que crea sensaci¨®n de taller y convierte la planta baja en un porche durante los meses de verano.