Las 3.214 personas que ofrecen su casa en Espa?a a las mujeres afganas
La campa?a #YoAcojo acumula miles de firmas que este lunes se entregaron a Jes¨²s Perea, el secretario de Estado de Migraciones
¡ª?Est¨¢s viendo lo de Kabul?
¡ªS¨ª, es de locos.
¡ªMe da una pena pensar en las mujeres que viven all¨ª y en las ni?as y en los ni?os...No dejo de pensarlo. ?Qu¨¦ les va a pasar?
?¡ªPues justo lo que est¨¢s pensando. ?Sabes que hay un documento que se puede firmar para ofrecer tu casa a mujeres afganas? ?Quieres que te lo mande y lo firmas o que te firme?
¡ª Hazlo. Lo mismo llegado el momento podemos ayudar a alguien.
El 26 de agosto, esa mujer de 58 a?os de un peque?o pueblo del interior de la pen¨ªnsula escribi¨® a su hija por WhatsApp mientras estaba delante de la tele a mediod¨ªa. Se repet¨ªan las primeras im¨¢genes del atentado de Kabul: un suicida se hab¨ªa inmolado entre la multitud que se concentraba en las inmediaciones del aeropuerto de esa ciudad para intentar salir de Afganist¨¢n. Esa tarde, ella fue una de las 3.214 personas que hasta este 30 de agosto han firmado el documento de la campa?a #YoAcojo, lanzada a trav¨¦s de redes sociales a mediados de este mes, y que este lunes, algunas de sus promotoras (entre ellas Cristina Fallar¨¢s, Sem¨ªramis Gonz¨¢lez o Marisa Kohan), fueron a entregar al Ministerio de Inclusi¨®n, Seguridad Social y Migraciones.?
Jes¨²s Perea, secretario de Estado de Migraciones, recibi¨® al mediod¨ªa a las ocho mujeres que acudieron para darle el pendrive con el manifiesto y el listado de firmas. Mujeres y hombres de todas las edades. Pero sobre todo ellas. De Madrid, de Barcelona, de Sevilla, Pontevedra o Valencia, de las islas o peque?os pueblos de interior. Entre esas 3.500 personas hay empresarias, amas de casa, limpiadoras, aut¨®nomas, periodistas, actrices, abogadas, productoras, trabajadoras sociales, fiscales, jubiladas, catedr¨¢ticas. Tambi¨¦n bomberos forestales, peritos, comerciales o t¨¦cnicos de sonido.?
Quienes ya se han adherido a ese documento, ofrecen su casa, y sus cuidados, "a las mujeres y ni?as afganas en situaci¨®n de extremo riesgo tras los ¨²ltimos acontecimientos en este pa¨ªs". La llegada, de nuevo, de los talibanes, ha dado la vuelta dos d¨¦cadas en la que millones de mujeres se han graduado en las universidades, subieron a los estrados en esas aulas para ense?ar, aparecieron como elegibles en las votaciones y pudieron ser traductoras, periodistas, m¨¦dicas.
Una vuelta de dos d¨¦cadas
El regreso de los talibanes es "catastr¨®fico para las mujeres", escrib¨ªa en este diario hace unos d¨ªas Lynsey Addario, periodista gr¨¢fica en Afganist¨¢n durante dos d¨¦cadas. Ahora teme que las mujeres se arriesguen a perder todo lo ganado en libertad y derechos. Las mujeres se esconden en sus casas, muchas ya han renunciado a sus trabajos.
Con este nuevo presente, las firmantes "exigen que Espa?a y la Uni¨®n Europea reconozca el derecho de asilo de estas mujeres, cumpliendo la normativa internacional de derechos humanos y la Convenci¨®n de Ginebra de 1951". "Europa debe corresponsabilizarse de la situaci¨®n", afirman. As¨ª, ponen sus casas "a disposici¨®n de Ayuntamientos y comunidades aut¨®nomas para generar espacios seguros de acogida y cuidados".
Perea, el secretario de Estado de Migraciones, celebra la colaboraci¨®n entre la sociedad civil y las administraciones, que calific¨® de "imprescindible". Cree que esta es una buena oportunidad para revisar de forma ¨ªntegra el sistema de acogida: "Espa?a tiene un buen modelo comparado con otros pa¨ªses de Europa occidental, pero si detectamos malas pr¨¢cticas hay que revisarlas. Hay que romper las sinergias que son malas".
Las mujeres de este manifiesto piden que esas v¨ªas legales y seguras para que las mujeres afganas y el resto de las personas en peligro puedan salir de Afganist¨¢n, viajar a Europa y pedir protecci¨®n, los corredores humanitarios, se creen "de manera urgente". Sin estas medidas, dicen, "estas personas no podr¨¢n salir de su pa¨ªs o se ver¨¢n obligadas a hacerlo a trav¨¦s de rutas migratorias inseguras en las que pueden sufrir todo tipo de abusos".
El riesgo de no abrir las fronteras
Seg¨²n la Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado (CEAR), "la decisi¨®n de los pa¨ªses de la UE de blindar las fronteras y no ofrecer v¨ªas legales para solicitar asilo provoca que la mayor¨ªa tenga que arriesgar su vida en el mar, sortear vallas y alargar su recorrido". El c¨¢lculo de esta organizaci¨®n es que "al menos 2.276 personas perdieron la vida en 2020 tratando de alcanzar costas europeas" y estiman que "al menos 40.000 personas habr¨ªan muerto en esta ruta" en lo que va de siglo XXI.
Espa?a, seg¨²n esta misma entidad, tuvo el a?o pasado una media de resoluciones favorables a las solicitudes de asilo muy por debajo de la europea: un 5% frente al 33% del conjunto de pa¨ªses de Europa. Eso, a pesar de que en 2020, debido "en parte al impacto de la pandemia", se registraron 88.762, un 25% menos que en 2019; y hubo un r¨¦cord de resoluciones de expedientes, con 114.919, incluyendo los acumulados de otros a?os.
En cualquier conflicto, es la poblaci¨®n m¨¢s vulnerable la que acusa m¨¢s las consecuencias. Las mujeres siempre est¨¢n en esa poblaci¨®n y en Afganist¨¢n, como de forma mayoritaria en todos los pa¨ªses del mundo, son la mitad de los alrededor de 40 millones de habitantes que tiene el pa¨ªs. Por eso, las promotoras de la campa?a #YoAcojo insisten en el "reconocimiento de la protecci¨®n internacional a todas las personas afganas en peligro y, en especial, a las mujeres y ni?as que, en estos momentos, se ven forzadas a huir". Adem¨¢s de "una acogida integral y adecuada que tenga en cuenta las necesidades especiales de las mujeres y ni?as afganas v¨ªctimas de violencias machistas en todas sus formas".
Perea asegur¨® este lunes que se aplica desde hace poco un Protocolo de Atenci¨®n para la Detenci¨®n de Violencias Machistas en los lugares de acogida, acordado y redactado junto al Ministerio de Igualdad. "El equipo ha sido consciente de lo que significaba la llegada de mujeres y ni?as, pero ha sido brutal, en una proporci¨®n a la que no est¨¢bamos acostumbrados en otras crisis, la cantidad de menores era superior al 40%", cifr¨®.
En todo el mundo, concentraciones, manifestaciones e iniciativas, sobre todo lideradas por mujeres, se han movido en las ¨²ltimas semanas. Ahora, queda materializarlas.
La dificultad a veces de llevar a la pr¨¢ctica la voluntad ciudadana
Esta iniciativa, como ha ocurrido y ocurre en muchas otras ocasiones, es a veces dif¨ªcil de materializar por cuestiones legales y jur¨ªdicas. ?liva D¨ªez, coordinadora de acogida de la Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado, explica que es "importante" como forma de mostrar la posici¨®n de parte de la sociedad civil, pero "dif¨ªcil de llevar a la pr¨¢ctica".
Por un lado, explica, "esta propuesta ser¨ªa factible si pudieran llegar mujeres y ni?as, pero hay serias dudas de que se vaya a conseguir ese corredor humanitario. Podr¨ªa hacerse con mediaci¨®n diplom¨¢tica o trascender las fronteras de tu propio pa¨ªs para ir a otros cercanos al lugar de donde quieren salir y asentarlos ah¨ª". Pero esto, "aunque est¨¢ en el plan pol¨ªtico", no est¨¢ del todo concretado "y podr¨ªa no darse ese escenario".
Por otro, sigue, "quienes ya han llegado a Espa?a lo han hecho a trav¨¦s de los canales normalizados de atenci¨®n". Aunque, donde s¨ª podr¨ªan "rescatarse estas propuestas", ser¨ªa una vez que terminasen esos "canales oficiales", es decir, dentro de 18 o 24 meses, cuando acabase el periodo de protecci¨®n como solicitantes de asilo que en principio el Gobierno dar¨¢ a los refugiados que ya est¨¢n en Espa?a.
[Si quieres firmar el documento de #YoAcojo, puedes hacerlo en este enlace]
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