Bilbao vuelve a la playa
Aseada y reinventada al abrigo del Guggenheim, ruta esencial por una ciudad y sus pasiones. 'Pintxos' en Casco Viejo y 'poteo' en Indautxu, la ciudad desde el monte Artxanda, la trilog¨ªa del bacalao y en metro a la playa
La r¨ªa de Bilbao vertebra una ciudad que, con el cambio de milenio, se ha reinventado a s¨ª misma con una mezcla entre lo nuevo y lo viejo imaginativa y de excelente gusto. Su margen izquierda ha resurgido entre restos de siderurgias y astilleros como s¨ªmbolo de una limpieza y renovaci¨®n arquitect¨®nica, cultural y hasta gastron¨®mica. Pero el cauce urbano, hoy con aguas m¨¢s est¨¦ticas, mantiene su condici¨®n de dep¨®sito hist¨®rico desde que en tiempos medievales aquella aldea de pescadores a orillas del r¨ªo Nervi¨®n fuera el germen de la actual capital vizca¨ªna. Bilbao en diez propuestas que mezclan (sin agitar) historia, modernidad y grandes pasiones.
01 La edad del hierro
El hierro pesa todav¨ªa en la historia reciente de Bilbao, resulta necesario para comprender su resurgir actual. El Museo Minero de Gallarta, a unos 20 kil¨®metros al oeste de la ciudad, evoca una ¨¦poca que marc¨® a fuego su margen izquierda. Las ricas vetas de Triano y Galdames potenciaron una feroz industrializaci¨®n (sider¨²rgica y naval) que entr¨® en declive a mediados de los a?os 80, cuando las llamaradas de sus altos hornos dejaron de alumbrar la ciudad.
02 Las siete calles
En las calles del Casco Viejo empez¨® todo. A finales del XIV Somera, Artecalle y Tender¨ªa tej¨ªan ya el coraz¨®n de la ciudad, y un siglo despu¨¦s, Belosticalle, Carnicer¨ªa Vieja, Barrencalle y Barrencalle Barrena completar¨ªan las denominadas Siete Calles, que hay que recorrer para empaparse de la esencia de Bilbao. Las inundaciones de agosto de 1983 anegaron todo de barro y lodo, pero tambi¨¦n propiciaron un plan de rehabilitaci¨®n del barrio y sus edificios hist¨®ricos, de gran riqueza arquitect¨®nica.
Un recorrido b¨¢sico por el Casco Viejo parte de la explanada del teatro Arriaga, que aloja en sus bajos la oficina de Informaci¨®n y Turismo. En paralelo a la r¨ªa se alcanza el mercado de la Ribera, as¨ª como el puente y la iglesia de San Ant¨®n, que forman parte del escudo de Bilbao. Dentro de las Siete Calles, la exposici¨®n de utensilios tradicionales del Museo Hist¨®rico se remonta hasta la prehistoria, y la Plaza Nueva exige un alto para txakol¨ª y pintxos. Por ejemplo, en Victor Montes (www.victormontesbilbao.com) y el Bar Bilbao (www.bilbao-cafebar.com).
03 La (antigua) playa de Bilbao
Desde la Plaza Nueva se accede al Arenal, lugar de paseo y celebraci¨®n. Aqu¨ª, donde la r¨ªa depositaba sus arenas, los antiguos arrantzales de Bilbao reposaban sus barcas en una ya extinguida playa. Actualmente es el punto neur¨¢lgico de las grandes fiestas de la ciudad, como la Aste Nagusia (Semana Grande) en agosto o el mercado de Santo Tom¨¢s, el 21 de diciembre, en el que los baserritarras ofrecen los mejores productos de sus caser¨ªos.
04 De Abando al Euskalduna
Al otro lado del puente del Arenal destaca la singular estaci¨®n de la Concordia, que abre el recorrido por el Ensanche de Bilbao. La Plaza Circular, dedicada al fundador de la Villa don Diego Lopez de Haro, da acceso a la Gran v¨ªa, arteria principal que flanquean edificios tan espectaculares como el Palacio de la Diputaci¨®n Foral de Vizcaya. La anexa Biblioteca Foral, totalmente acristalada y con cerca de 300.000 vol¨²menes en su interior, tambi¨¦n merece la pena.
La ruta continua hacia la Plaza Eliptica o Moyua y el Hotel Carlton, ilustre sede del primer Gobierno Vasco y alojamiento de las m¨¢s ilustres personalidades. Al otro lado de la plaza, el Palacio Txabarri alberga actualmente al Gobierno civil. Paralelo a la Gran V¨ªa, se despliega el Parque de Do?a Casila Iturrizar (popularmente, parque de los Patos), donde el Museo de Bellas Artes ofrece una interesante pinacoteca. Al otro lado del parque, y de nuevo con la r¨ªa de fondo, se levanta el elegante Palacio Euskalduna.
05 Una r¨ªa con tranv¨ªa
Se?a de identidad del nuevo Bilbao, el Eusko Tran recorre paralelo a la r¨ªa buena parte del entorno rehabilitado en torno al Museo Guggenheim, piedra angular del resurgir arquitect¨®nico, cultural y tur¨ªstico de la ciudad. Espacio imprescindible para las expresiones art¨ªsticas m¨¢s vanguardistas, empezando por el llamativo envoltorio de titanio que traz¨® Frank Gehry, supera ya una d¨¦cada de exitosa trayectoria.
Quiz¨¢ lo expliquen las curiosas historias que se asocian a su periodo de gestaci¨®n. Como la milagrosa triple conjunci¨®n -la necesidad financiera que ten¨ªa su hermano neoyorkino, el punto de inflexi¨®n que buscaba la ciudad y la ¨²ltima gran oportunidad para un arquitecto sin una obra definitiva-, o que la primera menci¨®n sobre la posibilidad de un museo Guggenheim en Bilbao se realizara en el mejor lugar posible: una conversaci¨®n de sobremesa.
06 Pasi¨®n colectiva
El estadio de San Mam¨¦s, la Catedral del futbol nacional y sede del ya centenario Athletic de Bilbao, desencadena las mayores y m¨¢s intensas escenas de pasi¨®n colectiva en la ciudad. Un templo en toda regla, cuyo Museo Athletic Club conforma una interesante visita para amantes (y ajenos) al balompi¨¦, pues hablamos de un emblema de la ciudad que tambi¨¦n tiene prevista su remodelaci¨®n: un nuevo estadio m¨¢s amplio y pr¨¢cticamente en la misma ubicaci¨®n, cuya inauguraci¨®n est¨¢ prevista para 2013, justo un siglo despu¨¦s de que abriera sus puertas el actual en 1913.
07 Subida al Pagasarri
La tradicional subida al Pagasarri, uno de los m¨²ltiples montes que rodean Bilbao, demuestra a?o tras a?o lo arraigada que est¨¢ la cultura de monta?a entre los bilba¨ªnos. Una afici¨®n que, cada fin de semana, llueva o nieve, puebla de monta?eros y no tan monta?eros las laderas del monte predilecto para los bilba¨ªnos.
M¨¢s cercano, menudo y familiar, el monte Artxanda es uno de los mejores miradores de la ciudad. F¨¢cilmente accesible por carretera o mediante el funicular de la calle Casta?os, una panor¨¢mica desde su cumbre permite comprender por qu¨¦ a esta ciudad se la conoce popularmente como el Botxo (agujero).
www.bilbao.net/funicularArtxanda/jsp/home.jsp
08 La trilog¨ªa del bacalao
Se dice que no hay celebraci¨®n para un bilba¨ªno que no empiece o acabe sentado a la mesa. La gastronom¨ªa es, sin duda, otra de las grandes pasiones que mueve a esta ciudad, con argumentos culinarios tan rotundos como la trilog¨ªa bacaladera t¨ªpicamente bilba¨ªna -al pil-pil, a la vizca¨ªna y al club ranero-, los txipirones en su tinta, el txangurro, los pimientos verdes de Guernica o una sabroso chulet¨®n de Berriz.
El recetario vasco tradicional en Gorrotxa; lomo de mero sobre l¨¢minas de patata al pil-pil en Zortziko; una merluza cocida a fuego envolvente en Etxanobe, el restaurante del Palacio Euskalduna; los noisettes de solomillo al ajo fresco de Matxinbenta o la cocina de temporada con platos de bacalao como bandera de Gur¨ªa, son cinco suculentas propuestas.
09 De 'poteo'
Salir de vinos por el Casco Viejo o Indautxu es la mejor forma de tomarle el pulso a la ciudad. El conocido poteo, tradicionalmente matinal y actualmente m¨¢s vespertino, es el comienzo ideal para una ruta nocturna por el Botxo. Especialmente recomendables para ir de bar en bar de txakolis o zuritos son las calles Licenciado Poza y Garc¨ªa Rivero en Indautxu, y Somera en el Casco Viejo.
Avanzada la noche, la diversidad de escenarios para tomar una copa es casi inabarcable, en una ciudad de curtida cultura nocturna. El Kafe Antzokia (www.kafeantzokia.com) y el club Azkena (www.azkena.com) ofrecen conciertos cada fin de semana. Si se prefiere m¨²sica house de buen gusto o electr¨®nica fina y bien vestida en vaso ancho y con lim¨®n exprimido, hay que pasarse por el Caos Club (Sim¨®n Bolivar, 10) y el Fever (Santana 27). El soul y el funky reinan en el Bullit Groove Club (Dos de Mayo, 3).
10 A la playa en metro
La renovaci¨®n que ha experimentado la ciudad se ha prolongado tambi¨¦n bajo tierra, gracias al flamante Metro de Bilbao, cuyo proyecto firm¨® el prestigioso arquitecto Norman Foster. Con 15 a?os de vida, dos l¨ªneas y un trazado en Y (un ramal para cada lado de la r¨ªa desde San Inazio), su futurista y envolvente universo de acero y cristal resulta tan fotog¨¦nico, que ya cuenta con un amplio historial como plat¨® cinematogr¨¢fico.
Adem¨¢s de facilitar los traslados por la ciudad, el metro ha remediado el hecho de que Bilbao no tenga playa. El litoral ahora est¨¢ m¨¢s cerca: la L¨ªnea 1 conecta directamente el Casco Viejo con la Playa de Plentzia, sobre cuya arena termina este recorrido.
M¨¢s propuestas e informaci¨®n en la Gu¨ªa del Pa¨ªs Vasco
Manhattan en Bilbao
El ¨²ltimo gran proyecto de regeneraci¨®n urban¨ªstica en Bilbao tiene la firma de la arquitecta angloiraqu¨ª Zaha Hadid y convertir¨¢ la pen¨ªnsula de Zorrozaurre en una isla con futuristas sedes empresariales, m¨¢s de 5.000 viviendas y zonas verdes. Previsto para 2012, se comunicar¨¢ con el resto de la ciudad mediante varios puentes y dos pasarelas peatonales. Un Manhattan chico en plena r¨ªa de Bilbao
GU?A
Visitas
- Museo Arqueol¨®gico, Etnogr¨¢fico e Hist¨®rico (Plaza Miguel de Unamuno, 4). www.euskal-museoa.org
- Museo Mar¨ªtimo R¨ªa de Bilbao (Muelle Ram¨®n de la Sota, 1). www.museomaritimobilbao.org
Dormir
- Hotel Carlton (Plaza de Don Federico Moy¨²a, 2).
- Gran Hotel Ercilla (Calle de Ercilla, 37-39).
- Mir¨® Hotel (Alameda de Mazarredo, 77).
Comer
- Etxanobe (Avda. Abandoibarra, 4 - Palacio Euskalduna).
- Gorrotxa (Alameda Urquijo, 30).
- Gur¨ªa (Gran V¨ªa, 66).
- Zortziko (Alameda Mazarredo, 17).
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