¡®Road movie¡¯ en Connemara
Ruta en coche para descubrir la esencia cinematogr¨¢fica del salvaje oeste irland¨¦s
Oscar Wilde dijo que la de Connemara es una belleza salvaje. Quiz¨¢ fuese porque este trozo de tierra inh¨®spita al oeste de Irlanda es tambi¨¦n un estado de ¨¢nimo. Los atardeceres nunca son iguales. La luz que se refleja en los lagos se difumina con cada nube que pasa. Por eso, esta belleza salvaje y cambiante es tan seductora, irresistible para la c¨¢mara. ¡°Parte de la atracci¨®n radica tambi¨¦n en que hist¨®ricamente Connemara se ha asociado al m¨ªstico pasado celta de Irlanda¡±, explica Se¨¢n Crosson, de la Huston School of Film de Galway.
Aqu¨ª se han rodado pel¨ªculas de mitolog¨ªa irlandesa, taquillazos de Hollywood, cl¨¢sicos y filmes en ga¨¦lico que huyen de los t¨®picos. Secuencias que se pueden recorrer en coche por carreteras secundarias.
01 El puente de ¡®El hombre tranquilo¡¯
Desde Galway, la N59 vertebra el territorio. Pasado Oughterard, el paisaje proyecta una escena de El hombre tranquilo: John Wayne atraviesa el puente de piedra con la mirada perdida. Ha llegado a casa. En realidad, el Innisfree retratado por John Ford est¨¢ unos kil¨®metros m¨¢s all¨¢, despu¨¦s de ese cruce de caminos que es Maam Cross.
La R345 entra en Cong serpenteando. El pueblo vive del cl¨¢sico y sus localizaciones: la fachada del Pat Cohan¡¯s Bar, que entonces era un ultramarinos; la casa del viejo moribundo que nunca muere, la cruz que es como la plaza del pueblo¡ El Museo del Hombre Tranquilo, aunque un poco kitsch, recrea el cottage (caba?a) en el que Wayne y Maureen O¡¯Hara vivieron felices y comieron perdices. ¡°Lo que O¡¯Hara le susurra al o¨ªdo en la ¨²ltima escena solo ella lo sabe. Ni siquiera quiso contarlo en 2011, cuando volvi¨® para celebrar el 60? aniversario del rodaje¡±, recuerda Gerry Collins, gu¨ªa tur¨ªstico especializado en la pel¨ªcula.
02 Indomable Joyce Country
Gu¨ªa
Visitas
? Museo del Hombre Tranquilo / The Quiet Man Museum (+353 094 954 60 89). Cong.
? Joyce Country Sheepdogs (+353 94 954 88 53). Demostraciones pastoriles. Shanafaraghaun. Finny. Clonbur, Condado de Galway.
Dormir
? Kylemore Pass Hotel (+353 954 11 41). Kylemore, Connemara, Co. Galway. La habitaci¨®n doble, desde 70 euros.
? Delphi Lodge (+353 954 22 22). Leenane. Condado de Galway. Desde 190 euros.
? Errisbeg House (+353 86 821 51 53). Roundstone, Connemara. Galway.
Informaci¨®n
? Alquiler coche: www.enterprise.ie
Desde Cong, el metraje avanza por carreteras sin nombre hacia el Joyce Country. En Marley y yo (2008), David Frankel retrat¨® esta Irlanda verde y aislada. Los protagonistas (Jennifer Aniston y Owen Wilson) pasan su luna de miel en una estrecha carretera bloqueada por un reba?o de ovejas que el pastor local Joe Joyce supo mantener a raya gracias a sus perros adiestrados. La escena se grab¨® cerca del espectacular lago Nafooey, con su playa de sorprendente arena roja.
03 ¡®El prado¡¯
La R336 zigzaguea. Al doblar la siguiente curva aparece el pueblo de Leenaun. Este es el territorio de El prado (1990), una s¨®rdida historia sobre el amor desmesurado del protagonista, Richard Harris, por un pu?ado de acres. Ese campo verd¨ªsimo existe. ¡°Lo encontrar¨¢s frente a una escuela abandonada, en la N59 direcci¨®n Westport¡±, indica un lugare?o. De vuelta hacia Leenaun, las cataratas Aasleagh rugen, recordando que son la escena del crimen. Aqu¨ª muere el americano codicioso. El bar de celuloide es tambi¨¦n de carne y hueso. ¡°El interior del Gaynor¡¯s Pub es pr¨¢cticamente igual¡±, asegura Brenda Gaynor detr¨¢s de la barra, mientras sirve una pinta.
04 ¡®Trist¨¢n e Isolda¡¯
Leenaun est¨¢ al fondo del ¨²nico fiordo de Irlanda, el de Killary. Profundo, encajonado entre las laderas de las monta?as. Paisajes id¨ªlicos para la leyenda celta de Tristan e Isolda (2006), producida por Ridley Scott y protagonizada por James Franco y Sophia Myles. Para ver el arenal donde se enamoran hay que llegar donde el viento del Atl¨¢ntico sopla con furia: la playa de Glassilaun tiene aguas turquesas, fina arena blanca y una vegetaci¨®n retorcida por Eolo. Siguiendo la costa, la playa de Lettergesh proyecta ahora la carrera de caballos de El hombre tranquilo, una de las escenas m¨¢s emocionantes de la pel¨ªcula.
05 Hacia Roundstone
Para subir sin artificios al cielo solo hay que poner rumbo a Clifden. Desde aqu¨ª, la sky road asciende la colina. Abajo, la costa muere mordisqueada por el mar, como en la Dog¡¯s Bay en la R341. Esta es una playa espiritual. Mike Newell, el director de Into the West (Escapada al sur) (1992), lo sab¨ªa y la coloc¨® en la primera escena: Tir na n?g cabalga desbocado a la luz de la luna. El caballo y dos ni?os emprender¨¢n un viaje en busca de la tierra de la eterna juventud de la mitolog¨ªa irlandesa.
Lo que la mirada azul de Paul Newman busca en Roundstone es un secreto, como corresponde a la pel¨ªcula de espionaje El hombre de MacKintosh (1973), de John Huston. En su huida, se refugia en el puerto de Roundstone, el pueblo m¨¢s cinematogr¨¢fico de Connemara. Jennifer Aniston tambi¨¦n estuvo aqu¨ª. El rodaje de El casamentero (1997) fue, sin embargo, el que revolucion¨® el pueblo. ¡°Dej¨® 2,5 millones de euros en la econom¨ªa local¡±, asegura Richard, s¨¦ptimo duque de Stacpoole, cuya casa, de finales del siglo XIX, tambi¨¦n aparece en una pel¨ªcula que transform¨® Roundstone en Ballinagra. Aqu¨ª llega la asistente de un senador americano para buscar los or¨ªgenes irlandeses de su jefe. ¡°Repintaron casi todas las fachadas¡±, dice la camarera del O¡¯Dowd¡¯s Bar, donde hay que probar su deliciosa seafood chowder. Aun as¨ª, esta villa marinera que tiene como tel¨®n de fondo la Twelve Bens, hermosa cordillera de picos muy agudos, desprende todo su encanto, tambi¨¦n en la ficci¨®n.
Tras atravesar Spiddal, en la R336, un cartel avisa: ¡°Galway a 19 kil¨®metros¡±, como si fueran los t¨ªtulos de cr¨¦dito.
{ "active": true, "code": "186609", "elementType": "offerExtension", "id": 21, "name": "GALWAY", "service": "tripadvisor" }
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.