Al agua con la diosa Minerva

Hace m¨¢s de 2.000 a?os, esta ciudad del sureste de Inglaterra ya era un afamado destino tur¨ªstico por sus beneficiosas aguas termales. Hoy, Bath, patrimonio mundial, atrae no solo por sus vestigios romanos, la mejor arquitectura georgiana y por la estela de Jane Austen, su habitante m¨¢s ilustre, sino tambi¨¦n por sus calles con tiendas sofisticadas y buenos restaurantes.

9.00 T¨¦ y gachas de avena

Aunque Bath apuesta por ser una ciudad actual y cosmopolita, no puede evitar que sus calles recuerden a Jane Austen y a la rimbombante alta sociedad inglesa de finales del siglo XVIII. Para impregnarnos nosotros tambi¨¦n de ese recuerdo, elegimos para empezar el d¨ªa un desayuno en uno de los salones de t¨¦ m¨¢s agradables de la ciudad, el Bea¡¯s Vintage Tea Rooms (1). Decorado al estilo de los a?os treinta, se puede comer un excelente porrigde (gachas de avena) y sirven el t¨¦ en delicadas tazas de porcelana china. Est¨¢ situado en un lujoso callej¨®n, a pocos pasos de The Circus (2), esa gran plaza circular, quintaesencia de la arquitectura georgiana del XVIII y obra maestra del neopalladiano John Wood completada por su hijo; ambos, una fascinante saga de arquitectos.

10.00 Fachada el¨ªptica

Se impone un paseo por el barrio se?orial de Bath, que alberga sublimes edificios como los que rodean The Circus (1754-1768) y el cercano Royal Crescent (3) (1767), un conjunto de 32 lujosas viviendas con una fachada ¨²nica de forma el¨ªptica que es realmente espectacular (obra de John Wood hijo). Bath cuenta con un patrimonio arquitect¨®nico excepcional, con cerca de 5.000 edificios declarados de especial inter¨¦s por su valor arquitect¨®nico. En el n¨²mero 1 de Royal Crescent visitamos el ¡°piso muestra¡±, que se conserva tal y como fue decorado en el siglo XVIII. Enfrente y colina abajo se extiende, enorme, el Royal Victoria Park (4) con sus glorietas y parterres decimon¨®nicos, escenario veraniego de conciertos al aire libre.

11.00 Fans de una gran escritora

La Royal Avenue (5), con sus edificios de piedra color vainilla tan caracter¨ªstica de la ciudad, conduce directamente al Centro Jane Austen (6) de Bath. La celeb¨¦rrima escritora vivi¨® aqu¨ª cinco a?os y aqu¨ª escribi¨® su ¨²ltima novela, Persuasi¨®n. Le hastiaban un poco las reuniones y los habituales de la alta sociedad de Bath y as¨ª lo reflej¨® en algunas de sus obras. En el centro, que guarda objetos personales y distintas ediciones de sus libros, tambi¨¦n hay un peque?o sal¨®n del t¨¦ de ¨¦poca donde los fans pueden emular a los personajes y el mundo de Jane Austen. Estamos en Gay Street (7), una elegante calle flanqueada de tiendas sofisticadas, no en vano Bath es una de las ciudades m¨¢s caras de Inglaterra.

12.00 Pasaje con plazoleta central

La ciudad refinada y adinerada va desapareciendo a medida que nos acercamos al centro hist¨®rico. Para el lunch elegimos Milsom Place (8), un coqueto pasaje lleno de restaurantes y tiendas con una plazoleta central deliciosa. Luego, un paseo hasta el r¨ªo Avon para cruzar el Pulteney Bridge (9) (1767), otro bello ejemplo de arquitectura georgiana que se inspira en el puente Vecchio de Florencia y en el Rialto de Venecia y, como estos, est¨¢ ocupado por tiendas.

14.30 En la antigua Aquae Sulis

Recorriendo la ribera norte del Avon, regresamos al centro, para visitar los Roman Bath (10) (adultos, 14 euros; ni?os, 8,9). Las termas romanas fueron descubiertas en 1775 y son uno de los vestigios m¨¢s importantes de la antigua Britania. El espectacular complejo termal se erigi¨® entre los siglos I y V despu¨¦s de Cristo junto a una fuente de agua natural que mana a 46 grados cent¨ªgrados. Un museo muestra c¨®mo era la ciudad romana de Aquae Sulis y permite recorrer las antiguas instalaciones termales, entre las que destaca la gran piscina descubierta. El asentamiento dedicado a la diosa Minerva, la Sulis celta, es impresionante y cuenta mucho sobre sus habitantes, desde su pericia como constructores y fontaneros hasta sus m¨¢s mezquinas costumbres, como la de echar maldiciones a trav¨¦s de unas tablillas de lat¨®n que lanzaban a las aguas del manantial de Minerva. Justo al lado de los Roman Bath est¨¢ la Pump Room (11), un sal¨®n de t¨¦ y restaurante donde adem¨¢s se puede tomar un vaso de agua termal de desagradable sabor aunque, aseguran, muy saludable.

17.00 Bollos con receta secreta

La abad¨ªa de Bath (12), del siglo XV, se halla al otro lado de la calle, muy cerca de Sally Lunn¡¯s (13), adonde nos acercamos para probar sus tradicionales bollos (bunns) horneados seg¨²n una receta secreta. Los sirven rellenos de cualquier cosa, dulces o salados. El tentempi¨¦ tiene el aliciente a?adido de que puede ser degustado en uno de los edificios m¨¢s antiguos de la ciudad (1680) cuyos cimientos esconden vestigios romanos. M¨¢s all¨¢, el Theatre Royal (14) (siglo XVIII) ¡ªque lleg¨® a ser uno de los teatros m¨¢s importantes de Inglaterra fuera de Londres¡ª ofrece una interesante programaci¨®n.

18.00 Toca relajarse

Bath posee una de las instalaciones termales m¨¢s modernas que existen en Inglaterra, las Thermae Bath Spa (14), a las que se llega andando a trav¨¦s de las callejuelas del centro. Abierto desde las nueve de la ma?ana hasta las nueve de la noche, el centro ofrece, adem¨¢s de distintos tratamientos relajantes y de belleza, un ba?o calentito al atardecer, a la intemperie, en una piscina con vistas a la ciudad. Un ba?o en las mismas aguas termales que ya disfrutaron celtas y romanos.

20.00 Visita guiada con humor

Y de una experiencia sensorial a otra que despierta el sentido del humor. De North Parade, frente a la oficina de turismo (15), sale cada d¨ªa a esta hora una visita guiada que muestra toda la ciudad de Bath bajo un prisma c¨®mico, con representaciones y juegos de palabras a cargo de un humorista.

22.00 Suculenta hamburguesa

Aunque para los ingleses es tard¨ªsimo, todav¨ªa no hemos cenado. La elecci¨®n es dif¨ªcil, pero no imposible. El jocoso recorrido nos ha dejado de nuevo en North Parade, cerca del centro, donde hay uno de los pubs m¨¢s tradicionales de Bath, el Garrick¡¯s Head (16). Una pinta de cerveza acompa?ada de un suculento fish & chips o una hamburguesa con queso cheddar local son el colof¨®n de esta jornada en la se?orial y elegante Bath.

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