Un atractivo ¡®collage¡¯ urbano

La verdad es que L¡¯Hospitalet de Llobregat no es Beverly Hills. No tiene fama ni de bonita, ni de lujosa, ni mucho menos de monumental. Construida a trompicones, creci¨® exponencialmente en el siglo XX seg¨²n llegaron las oleadas de inmigrantes atra¨ªdos por la riqueza industrial de la lim¨ªtrofe Barcelona. La mancha urbana se fue extendiendo sin reparar en las v¨ªas del tren, que atraviesan el municipio en forma de ¡°Y¡±, quedando dividida en barrios separados y mal comunicados entre s¨ª. Es cierto que hoy en d¨ªa muchos de esos males se han paliado o corregido, aunque parece que solo lo saben sus habitantes. Ahora bien, no hay que olvidar que es la segunda ciudad m¨¢s poblada de Catalu?a. Con casi 260.000 habitantes ¡ªes m¨¢s grande que Vitoria o Granada¡ª, guarda unos cuantos secretos. Por eso hay que descubrir este collageurbano. Con una mentalidad abierta y el mapa del metro en mano, el visitante no resultar¨¢ decepcionado.

09.00 Desayuno con ¡®bikini¡¯

Nada m¨¢s empezar el d¨ªa es agradable sumergirse en el ajetreo comercial del mercado de Santa Eul¨¤lia (1) y la peatonal calle de Pareto. Pero primero hay que desayunar. La cafeter¨ªa La Nostra Granja (2) (Muns, 8) sirve un delicioso bikini (el s¨¢ndwich mixto de toda la vida) en pan de barra. Luego ya se puede ver el aerodin¨¢mico edificio modernista Olis Reg¨¤s (3) (Buenos Aires, 13).

10.00 Rudi y House

Caminando hacia el centro por la calle de Santa Eul¨¤lia se llega al templo neorrom¨¢nico de Santa Eul¨¤lia de Proven?ana (4), de arquitectura confusa. En realidad la sorpresa est¨¢ en el interior. Los murales que decoran el ¨¢bside fueron realizados con aerosoles por dos grafiteros en 2012. ?Algo no cuadra? El p¨¢rroco de la iglesia decidi¨® decorarlo y eligi¨® a los artistas urbanos Rudi y House. Todo un ejercicio de contemporaneidad que contrasta con la capilla rom¨¢nica original del siglo XI, situada en la parte trasera de la iglesia.

11.00 Doble dosis de arte contempor¨¢neo

Buena hora para visitar el Tecla Sala (5) (avenida de Josep Tarradellas, 44), la instituci¨®n cultural por excelencia de la ciudad, dedicada al arte contempor¨¢neo. Edward Burtynsky, Ouka Leele y El Roto han sido algunas de sus ¨²ltimas apuestas. En la actualidad exponen la obra escult¨®rica de Antoni Marqu¨¦s. Justo detr¨¢s del Tecla est¨¢ la Fundaci¨®n Arranz Bravo, donde se exponen las obras del artista y otros j¨®venes talentos. Por si fuera poco, los dos museos son gratuitos.

12.00 Viaje al pasado

Ya en el centro de L¡¯Hospi nos topamos con la preciosa calle del Xipreret (6). Hay que destacar los edificios de Can Riera (siglos XVI-XVII), Ca N¡¯Espanya (1563) y L¡¯Harmonia (1595), que alojan diversas dependencias del tambi¨¦n gratuito Museu d¡¯Hist¨°ria de l¡¯Hospitalet. En este ¨²ltimo hay que ver el pintoresco retablo de Sant Roc, atribuido a dos Jaume Huguet, padre e hijo. Otros edificios significativos son la casa dels Finestrals G¨°tics, La Talaia y Ca N¡¯Oliver. Muy cerquita de aqu¨ª est¨¢n la mas¨ªa Can Sumarro (1580) y la calle de Santa B¨¤rbara (7), con sus casas unifamiliares multicolores del siglo XIX.

13.30 El ¡®cor de la ciutat¡¯

Se aproxima la hora de comer. Las terrazas de la animada rambla de Just Oliveras (8) son el lugar ideal para el aperitivo. Durante el paseo, hay que fijarse en diversos edificios modernistas: las Cases Barates (n¨²meros 71-79), la Casa Josep Oliveras (31) y la Casa Joan Batll¨¦ (29). Y, por supuesto, no debe olvidarse la escultura de l¡¯Acollidora (la acogedora), de Arranz Bravo, un s¨ªmbolo local. El nombre lo dice todo.Al final de la rambla y girando hacia la derecha por el Carrer Major se llega a la plaza del Ayuntamiento (9), donde destacan dos moles de ladrillo, el edificio de La Caixa y la iglesia parroquial de Santa Eul¨¤lia de M¨¨rida. Adem¨¢s, hay dos caprichos modernistas, La Botiga Nova y el Estanc del Carrer Major (Major, 54), de reminiscencias de la Secesi¨®n, el primero, y mud¨¦jar, el segundo.

La oferta culinaria m¨¢s interesante de la ciudad se sit¨²a en los alrededores. El Casino (10) (Enric Prat de la Riba, 337) ofrece un men¨² elegante a un precio m¨¢s que razonable. Otras buenas opciones son 25 Roselles (11) (Roselles, 25), con sabrosa cocina de mercado; Ca Les Noies (12) (Rossend Ar¨²s, 2), de aire m¨¢s innovador y desenfadado, y el Mug (Roselles, 14), con una cocina moderna y elaborada.

Los golosos disfrutaran con las elitistas pasteler¨ªa Luqu¨ªn (plaza de l¡¯Ajuntament, 3) y pasteler¨ªa Roca (Rossend Ar¨²s, 8), dos apuestas seguras. Por lo que respecta al caf¨¦, el del Porto Rico (plaza de l¡¯Ajuntament, 9), debe ser bueno. Lo frecuenta la clase pol¨ªtica local y media ciudad.

16.00 Una isla verde

Nada mejor para bajar la comida que volver sobre nuestros pasos rambla arriba, cruzar el paso de las v¨ªas de tren y pasear por el parque de Can Boixeres (13). Sus jardines mediterr¨¢neos cuentan con elegantes terrazas, el palacete de la Casa Alta, se?orial edificio reformado a principios del siglo XX en estilo clasicista, con esculturas novecentistas, un templete modernista y una torre neomud¨¦jar. Entre el parque y el camino de la Fonteta (14), todav¨ªa pueden contemplarse las casas con huertos casi centenarias construidas junto a lo que fue la antigua Riera de la Creu, hoy afectadas por la ampliaci¨®n del parque.

18.00 La torre roja

M¨¢s tarde se impone una buena raci¨®n de urbanismo moderno. Nos dirigimos a la plaza Europa y aleda?os, conocidos tambi¨¦n como la City d¡¯Hospitalet (15), la gran apuesta posindustrial de la ciudad, unos Docklands metropolitanos. Es una l¨¢stima que la crisis econ¨®mica haya ralentizado su consolidaci¨®n y que ofrezca un aspecto ¨¢rido. Hay varias propuestas de arquitectos famosos, como el tropical Hotel Catalonia Fira, de Jean Nouvel; la Porta Nord de la Fira de Barcelona y las Torres Fira, de Toyo Ito, con su fascinante atalaya roja, y el prisma invertido del Edificio Copisa, de ?scar Tusquets. Lejos, hacia el suroeste, se avista el bizarro bloque de hormig¨®n y vidrio con ovni del hotel Hesperia (16), de Richard Rogers. En direcci¨®n contraria, hacia la capital, se puede seguir por la Gran V¨ªa para contemplar la mastod¨®ntica Ciutat de la Just¨ªcia(17), de David Chipperfield: enormes cajas de cerillas con barrotes en tonos pastel de subyugante plasticidad.

21.00 C¨®cteles en otra dimensi¨®n

Acabar esta ruta merece un premio especial. La Cocteler¨ªa Tirsa (18) (Rafael de Campalans, 174) es una insospechada embajada del refinamiento por el encanto del lugar, las buenas maneras de sus camareros y la factura excelente de sus c¨®cteles. Y si quedan fuerzas para rematar la noche, se puede cenar en el centro y acabar bailando en la sala Salamandra (19) (avenida del Carrilet, 235), una instituci¨®n en la ciudad cuya fama llega hasta Barcelona. Ofrece una s¨®lida y ecl¨¦ctica agenda musical, con conciertos de pop, rock y sesiones de DJ.

{ "active": true, "code": "665810", "elementType": "offerExtension", "id": 26, "name": "HOSPITALET DE LLOBREGAT", "service": "tripadvisor" }