El ¡®Santo Grial¡¯ de Le¨®n

En pleno Barrio Rom¨¢ntico de Le¨®n aparece la Real Colegiata de San Isidoro, que invita a deambular por su interior de puro rom¨¢nico y a visitar despu¨¦s el Pante¨®n de los Reyes. En este espacio, un tratado de historia con did¨¢cticas pinturas murales ideadas cuando solo los privilegiados sab¨ªan leer -se conoce como capilla sixtina del arte rom¨¢nico-, est¨¢n las tumbas de los reyes leoneses. Durante el recorrido por el museo se puede entrar en la biblioteca, que guarda 300 incunables, 800 pergaminos y 150 c¨®dices, entre ellos la Biblia Visig¨®tica-Moz¨¢rabe, del siglo X; conocer el claustro rom¨¢nico m¨¢s antiguo de Espa?a, que acogi¨® las Cortes de Le¨®n de 1188, cuyo Decreta ha sido reconocido por la Unesco como el testimonio documental m¨¢s antiguo del sistema parlamentario europeo, y ahora, adem¨¢s, en una sala especialmente habilitada y protegida, se puede contemplar ?el Santo Grial?

Despu¨¦s de tres a?os de investigaci¨®n, los historiadores Margarita Torres y Jos¨¦ Miguel Ortega del R¨ªo han concluido, en su estudio Los Reyes del Grial, que el c¨¢liz de Do?a Urraca de San Isidoro es, ¡°sin lugar a dudas¡±, "la copa que la comunidad cristiana de Jerusal¨¦n en el siglo XI consideraba que era el c¨¢liz de Cristo¡±. Seg¨²n la tradici¨®n, el santo grial es el c¨¢liz usado en la ¨²ltima cena antes de la crucifixi¨®n de Cristo, uno de los grandes misterios de la humanidad. Las conclusiones de estos historiadores se basan en dos pergaminos egipcios, datados en el a?o 1054, que explican que el c¨¢liz fue enviado al rey de Le¨®n, Fernando el Grande, tras el saqueo de la Iglesia del Santo Sepulcro de Jerusal¨¦n, donde hab¨ªa permanecido desde el siglo IV. Al parecer, el c¨¢liz fue entregado al rey leon¨¦s como se?al de agradecimiento por el env¨ªo de v¨ªveres tras un a?o de gran hambruna en tierra santa.

Coincidiendo con esta aproximaci¨®n (hay m¨¢s de 200 copas en todo el mundo que se dice que son el Santo Grial), los responsables de la colegiata han habilitado una nueva sala, situada en el cuerpo bajo de la Torre del Gallo, para contemplar en solitario el fabuloso c¨¢liz de do?a Urraca, calificado por el historiador del arte Manuel G¨®mez Moreno como "pieza excepcional". Ahora se expone en una urna antibalas y la publicaci¨®n del citado estudio en el que se dice que podr¨ªa tratarse del Santo Grial ha animado las visitas. Perteneci¨® a la infanta leonesa Urraca de Zamora (1033-1101),? hija del rey Fernando I de Le¨®n, y data de la segunda mitad del siglo XI. La estancia donde ahora se exhibe, sin ventanas, es un espacio poco conocido e impactante desde el punto de vista arquitect¨®nico. La oscuridad de la sala realza la belleza de la extraordinaria copa de ¨®nice, retocada por expreso deseo de la infanta Urraca por los orfebres leoneses.

En el museo de San Isidoro se hace la siguiente descripci¨®n del c¨¢liz: "Su decoraci¨®n est¨¢ compuesta de oro, plata sobredorada, piedras preciosas como amatistas y esmeraldas, alj¨®fares y un rostro humano realizado con pasta v¨ªtrea que se ha considerado un camafeo romano. En el nudo vemos esmaltes de color verde, cabujones de perlas, zafiros y esmeraldas. Todo ello va engastando con una filigrana de oro en forma de caracolillos y rematada por hojas y tallos. En la parte inferior de la macolla o nudo se dispone una inscripci¨®n realizada con fino cord¨®n de oro que dice: "IN NOMINE D(OMI)NI VRRACCA FREDINA(N)DI" En nombre del Se?or, Urraca la de Fernando".

Y al salir de la oscuridad, San Isidoro recupera en su fachada el espect¨¢culo de luz y sonido ideado por Xavier de Richemont, un destacado experto en luminotecnia. Cada s¨¢bado a partir de las once de la noche, hasta el pr¨®ximo 4 de octubre, la sobria piedra de San Isidoro se convierte en un improvisado lienzo cinematogr¨¢fico por el que desfila la historia del reino de Le¨®n.

?Vas a visitar Le¨®n? Pincha aqu¨ª

{ "active": true, "code": "187492", "elementType": "offerExtension", "id": 11, "name": "LEON", "service": "tripadvisor" }