Buenos Aires de dise?o
Cinco creadores porte?os demuestran el idilio entre la capital argentina y la creaci¨®n est¨¦tica
Buenos Aires es una de las capitales del dise?o de Sudam¨¦rica. Los porte?os tienen un apetito inagotable por objetos que excedan su inmediata funci¨®n pr¨¢ctica con un plus de est¨¦tica. Entre la gran oferta de la ciudad, elegimos a cinco dise?adores que dan la espalda al producto de confecci¨®n industrial en serie. Con un conjunto de influencias cercanas (se repiten Mondrian o el arte japon¨¦s), todos ellos trabajan de modo artesanal, manufacturando sus obras para crear piezas ¨²nicas.
01 Vitrofusi¨®n
ANA MANGHI
Desde hace m¨¢s de 15 a?os, Ana Manghi se dedica a la creaci¨®n de baldosas de vitrofusi¨®n en las que el arte y la decoraci¨®n se dan la mano. La dise?adora tiene una s¨®lida formaci¨®n acad¨¦mica en pintura y escultura, por eso, no sorprende que en su obra se distingan claras influencias pict¨®ricas, como Piet Mondrian y el suprematismo ruso.
Estas baldosas vitrofusionadas en las que formas geom¨¦tricas y m¨²ltiples colores conviven sobre una base transparente no son por completo diferentes a c¨®mo se ver¨ªa un cuadro de Kazimir Mal¨¦vich si cupiera en la palma de la mano. Las baldosas se organizan en series para funcionar como guardas o focos de color y movimiento en cocinas, ba?os, cuartos, piscinas...
¡°Quise ofrecer un producto que pueda incorporar dise?o a cualquier ambiente de modo sencillo¡±, explica la artista. En efecto, sus baldosas no requieren de una aplicaci¨®n compleja: se adhieren a la superficie que sea con silicona transparente. ¡°Cada serie tiene un elemento en com¨²n, ya sea el color predominante o el motivo, pero aunque existen series recomendadas, cada uno puede construir la suya propia combinando elementos de las que m¨¢s le gusten¡±, agrega Manghi. El aspecto l¨²dico es esencial en esta propuesta en la que el cliente es, en el grado en el que lo desee, corresponsable del dise?o que adquiere.
Existen m¨¢s quinientas baldosas diferentes en el cat¨¢logo de la dise?adora, aunque a medida que se incorporan nuevas, otras dejan de fabricarse. Cada pieza est¨¢ hecha a mano y en cantidades limitadas.
02 M¨®viles
JORGE BASCOY
En 1930, tras una visita a Piet Mondrian en su estudio de Par¨ªs, el artista norteamericano Alexander Calder tuvo una relevaci¨®n que transform¨® por completo su trabajo. Insipirado en sus formas y colores, empez¨® a realizar esculturas cin¨¦ticas (luego Marcel Duchamp las llamar¨ªa m¨®viles) que llevaban a las tres dimensiones, con movimiento incluido, los principios de la obra del holand¨¦s.
Una iluminaci¨®n similar tuvo el porte?o Jorge Bascoy cuando se cruz¨® con la obra del propio Calder. Formado como escenogr¨¢fo, Bascoy siempre se dedic¨® a las artes pl¨¢sticas, pero en el encuentro con los m¨®viles pudo condensar todos sus intereses y saberes en un trabajo espec¨ªfico.
Primero imitando al norteamericano y luego en una exploraci¨®n propia, este artista de Buenos Aires se dedica a hacer m¨®viles que son a la vez una continuaci¨®n y un homenaje al trabajo de Calder. ¡°Un m¨®vil es una escultura que manifiesta el capricho de los vientos¡±, dice desde su estudio en el barrio de Palermo. ¡°Pueden ser de aluminio, acero, zinc, cobre, bronce... depende del ambiente en el que se ubicar¨¢n¡±, a?ade. Muchos de los trabajos son fruto de su propia inspiraci¨®n pero tambi¨¦n recibe encargos, desde peque?as piezas para viviendas particulares a enormes estructuras para hoteles internacionales. Actualmente trabaja en una serie de m¨®viles basados en la estructura del ADN y en otra de animales fant¨¢sticos, creaciones que, como es evidente, ya est¨¢n lejos de quien lo inspir¨® originalmente.
03 ¡®Jeans¡¯ tuneados
JOS? LUIS OTINIANO
Jos¨¦ Luis Otiniano fund¨® su marca Oxdans, dedicada a la confecci¨®n de jeans (pantalones vaqueros), hace 12 a?os. En todo este tiempo, su oferta sufri¨® varias mutaciones: desde modelos estables producidos de modo industrial, aunque con m¨¢s ¨¦nfasis en el dise?o y la ornamentaci¨®n que los patrones tradicionales, hasta su propuesta actual: piezas exclusivas hechas a mano y customizadas a gusto del cliente.
El dise?ador parte de una serie de cortes b¨¢sicos ¨Cpantalones de cinco bolsillos, polleras, shorts o bermudas¨C y luego interviene cada prenda de acuerdo a las referencias del comprador. ¡°Se puede hacer lo que quieras: seleccionar el tipo de tintura, los cepillados, el arenado, podemos hacer roturas sectorizadas, incorporar pintura, estampados¡ y todo se hace a mano¡±, explica Otiniano. El retoque m¨¢s solicitado es la incorporaci¨®n de bordados con piedras y metal que hacen de cada prenda algo parecido a un objeto de arte. ¡°Alguno de los jeans personalizados que hacemos son m¨¢s dram¨¢ticos y para usar en ocasiones especiales¡±, advierte. En suma, Oxdans propone la transformaci¨®n de la prenda m¨¢s usada en el mundo en una pieza ¨²nica e irrepetible.
04 L¨¢mparas
JUAN DI CIERVO
Juan di Ciervo es arquitecto pero siempre se dedic¨® al dise?o de objetos. ¡°Empec¨¦ dise?ando muebles, pero cuando me cruc¨¦ con la obra del artista y dise?ador japon¨¦s Isamu Noguchi empec¨¦ a pensar en hacer l¨¢mparas¡±. Noguchi es el creador de la c¨¦lebre l¨¢mpara Akari que, con papel y una estructura de alambre, recrea una forma org¨¢nica similar al capullo de un insecto. A partir de esta influencia, Di Ciervo empez¨® a dise?ar sus propias creaciones y a experimentar con nuevos materiales y estilos. ¡°Primero busco la forma que me gusta y luego trato de adaptarla a una l¨¢mpara. Es una b¨²squeda tanto est¨¦tica como pr¨¢ctica: la idea es que la l¨¢mpara sea original pero tambi¨¦n que ilumine bien¡±.
En su nueva colecci¨®n est¨¢ explorando un nuevo tipo de papel lavable y reciclado que no proviene de la celulosa y es mucho m¨¢s resistente que el tradicional. Adem¨¢s del papel, trabaja con otros materiales como madera, vidrio, aluminio o cer¨¢mica. Sus l¨¢mparas son tanto una fuente de luz como una suerte de escultura contempor¨¢nea, es decir, son bellas tanto encendidas como apagadas.
05 Joyer¨ªa
CELEDONIO LOHIDOY
¡°No s¨¦ si soy orfebre o joyero, no podr¨ªa definirlo. El motivo por el que empec¨¦ a hacer joyas es id¨¦ntico al de cualquier artista: transmitir una emoci¨®n¡±, dice Celedonio Lohidoy, artista pl¨¢stico formado como arquitecto que desde hace 16 a?os crea joyas elegantes, originales e inquietantes a un tiempo. ¡°Me gustan mucho los insectos, me parecen una fuente inagotable de inspiraci¨®n¡±, explica. En efecto, su trabajo tiene en sus formas org¨¢nicas e irregulares un evidente lazo con la naturaleza. Sus anillos, aros, collares y prendedores remiten a ramas, hojas, frutos, flores, huevas: el producto de un mundo primordial o de un bosque encantado. Son piezas sugestivas y fascinantes, con algo de la tradicional est¨¦tica wabi sabi japonesa, que no requieren de los metales preciosos tradicionales en la joyer¨ªa. Esto no impidi¨® que la reina M¨¢xima de Holanda fuera una de sus clientas. Como en un cuadro, su valor est¨¢ en la creaci¨®n, no en sus materiales.
El trabajo de Lohidoy no se limita a las joyas sino a todo tipo de complementos, desde tocados de novia hasta zapatos o carteras. ¡°Me gusta todo lo que tenga que ver con la ornamentaci¨®n. Es, simult¨¢neamente, una armadura y una forma de embellecimiento, como un amuleto o talism¨¢n que te protege y, a la vez, comunica algo de ti¡±, dice.
M¨¢s propuestas interesantes para un viaje a Buenos Aires aqu¨ª
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