Un b¨²nker con barra en Bilbao
El c¨¦ntrico hotel Carlton ha transformado un refugio de hormig¨®n de la guerra civil en un elegante bar de estilo ingl¨¦s
El fastuoso hotel Carlton de Bilbao, situado en la c¨¦ntrica plaza Moy¨²a, donde confluyen las arterias m¨¢s importantes del Ensanche bilba¨ªno (n¨²cleo financiero y comercial de la ciudad), es un edificio emblem¨¢tico ante cuyas puertas pasan diariamente miles de ciudadanos cargados de bolsas, tel¨¦fonos m¨®viles y paraguas. Reconocido como Monumento Arquitect¨®nico, Hist¨®rico, Art¨ªstico y Cultural vasco, fue dise?ado en 1919 por Manuel Mar¨ªa Smith, arquitecto fetiche de la pujante burgues¨ªa industrial de la ¨¦poca, y abri¨® sus puertas en 1926 para cubrir la nueva demanda de establecimientos de lujo.
Se trata de un establecimiento de estilo cl¨¢sico que ha vivido numerosas reformas en sus casi cien a?os de historia. Sus grandes salones, l¨¢mparas, alfombras y la vidriera cenital del vest¨ªbulo conservan el aroma de las fiestas y el champ¨¢n de los felices a?os veinte. El Carlton ha sabido renovarse con el tiempo y sigue siendo coraz¨®n de la vida cultural y social de Bilbao, una parte irrenunciable del paisaje cotidiano.
Lo que pocos de sus hu¨¦spedes saben es que bajo su estructura se esconde un b¨²nker: durante la Guerra Civil, entre su constituci¨®n en la Casa de Juntas de Guernica en octubre de 1936 y hasta la ca¨ªda ante las tropas franquistas en junio de 1937, el hotel Carlton fue sede del primer Gobierno vasco presidido por Jose Antonio Aguirre. El Ejecutivo escogi¨® este edificio por su car¨¢cter representativo y la solidez de sus muros. No muy lejos de all¨ª, al comienzo de la calle Ercilla, una estatua recuerda al dirigente, ataviado con sombrero y gabardina.
El refugio de hormig¨®n armado, una c¨¢mara subterr¨¢nea de doce metros de largo por cuatro de ancho, lleg¨® a albergar algunos plenos presididos por el lehendakari durante los bombardeos de la capital vizca¨ªna. Su existencia no fue descubierta hasta hace unos a?os, en el transcurso de unas obras de remodelaci¨®n. Ahora se ha convertido en un elegante bar de estilo ingl¨¦s con paredes tapizadas en granate, maderas nobles, fotos de las celebridades que han pasado por all¨ª y c¨®modos sillones. Solo abre sus puertas para actos y celebraciones privadas.
El hotel Carlton ofrece todo tipo de servicios: un restaurante especializado en cocina vasca (antes lo estuvo en la francesa, pero ya pas¨® la moda extranjera) al frente de cuyos fogones se encuentra el chef Eduardo D¨ªez Ere?o desde hace ya 17 a?os (los viernes el men¨² ofrece arroz con bogavante); un bar con salida directa a la calle donde probar alg¨²n pintxo; un gimnasio y varios salones de actos donde siempre est¨¢n pasando cosas.
Sus habitaciones, modernizadas, gozan de todas las comodidades, y pese al lujo del establecimiento, se encuentran ofertas por internet m¨¢s que asequibles; no se dejen impresionar por el portero con chistera de la entrada. Otra cosa es, desde luego, la suite Imperial, que ocupa m¨¢s de doscientos metros cuadrados en la ¨²ltima planta y est¨¢ enteramente rodeada por balcones que dan a la plaza Moy¨²a. All¨ª se han alojado recientemente actores como Jeremy Irons, John Malkovich, Pierce Brosnan (protagonista de 007) o famososo como Paris Hilton.?
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