Senderismo para ligar

El senderismo y ligar son costumbres que no suelen casar. El chip de la monta?a parece reservado para emociones intensas, pero siempre vinculadas a la naturaleza y no a la seducci¨®n. Por eso, el a?o pasado, la red noruega de albergues DNT ide¨® para el d¨ªa de los inocentes (1 de abril) que los senderistas vistieran gorros rojos, amarillos y verdes para identificar si los moradores est¨¢n ya emparejados; no lo est¨¢n, pero tampoco buscan pareja de momento ¡ªen estado alerta¡ª, o, por el contrario, est¨¢n abiertos a nuevas relaciones con personas que comparten su pasi¨®n por la monta?a. La iniciativa, propuesta como una broma, se convirti¨® en un repentino ¨¦xito, y ahora estos colores identificativos se extienden como una plaga entre los usuarios de los 510 refugios noruegos.

Entre estos albergues destacan varios en Jotunheimen, el parque nacional m¨¢s popular del pa¨ªs escandinavo, que fuera de sus instalaciones, y m¨¢s all¨¢ de la an¨¦cdota carnal, alberga varias rutas de excepcional belleza, como la Bessegen, una de las estrellas del turismo rural noruego, a la que cada a?o acuden m¨¢s de 30.000 personas.

A solo cuatro horas de Oslo y alrededor del lago Gjende, cuyo verde esmeralda intenso resalta a kil¨®metros, giran varias rutas rodeadas de lagos y monta?as a diferentes alturas, el glaciar Sm?rstabbreen y paisajes lunares alternados con azules intensos en una combinaci¨®n ¨²nica. Desde Gjendesheim se puede coger el barco que cruza el lago hasta Memurubu, para iniciar la ruta Bessegen, cuya duraci¨®n ronda las seis-siete horas. Eso s¨ª, las espectaculares vistas tienen sus d¨¦cimas de riesgo.

Cualquier noruego de la zona le resta importancia al sendero y al ser interrogado recuerda que todos los a?os suben ni?os acompa?ados de sus familias. Sin embargo, los lugare?os nacen con un apego al monta?ismo excepcional y no son de fiar a la hora de calibrar la dificultad de la ruta, no apta para cardiacos.

Un ascenso muy estrecho

Si se padece v¨¦rtigo, es recomendable renunciar, ya que en el sendero hay un tramo de 200 metros de desnivel con una anchura de unos siete metros y que se sortea con ayuda de las manos. Et voil¨¤, nada a la izquierda y nada a la derecha. Solo unas vistas impresionantes hacia dos lagos, el Bessvatnet, de tonos azules a 1.373 metros de altitud, y el Gjende, con tonos verdosos y situado m¨¢s abajo, a 984 metros de altitud. El tramo del sendero se va estrechando, con agua a ambos lados. Sin embargo, al margen de ese (mal o delicioso) trago, el camino atraviesa llanuras con las mejores panor¨¢micas. A la derecha, agua y las monta?as repletas de neveros, y a la izquierda, m¨¢s lagos que aparecen cada vez que se salva un desnivel.

Antes de afrontar este camino es posible llegar en barco hasta el extremo occidental del lago, en Gesebun, donde se ubica el mejor refugio de la zona, y desde all¨ª hacer una ruta de seis horas hasta Memurubu, donde se hace noche. La ruta se inicia con un sendero que durante una hora acompa?a suavemente al lago, con una vegetaci¨®n densa alrededor y con los t¨ªpicos abedules de las monta?as. Hasta que el sendero afronta un brusco desnivel de 500 metros. Durante la subida, salvo tres tramos que disponen de cadenas para ayudar a sortear las rocas, solo es necesario paciencia y buenas piernas. Tras dejar abajo el lago, se asciende a unas lomas con vegetaci¨®n variada. El camino est¨¢ bien se?alizado, con vistas a una docena de picos entre los que destaca el Galdh?piggen (2.469 metros). La mejor sorpresa de la ruta son las manadas de renos, con llamativas cornamentas y que aparecen con cierta frecuencia en estas alturas. Los animales no muestran temor ante los monta?eros.

Merece la pena detenerse unos minutos en cada pico para observar con calma el paisaje, cuyos colores var¨ªan continuamente en funci¨®n de la nieve, la lluvia y el sol. A pesar de estar ubicados en plena monta?a, la palabra refugio no describe con exactitud los establecimientos para pasar la noche. Acogedores, construidos con madera y cristal para facilitar las vistas, ofrecen cenas para reponer fuerzas, con el pescado del lago como estrella.

Antes de comprar los billetes es aconsejable hacer c¨¢lculos sobre los d¨ªas en que se realizar¨¢ la visita. Bessegen es un camino de moda entre los monta?eros noruegos y los atascos son frecuentes si el tiempo acompa?a. En la web besseggen.net aparece informaci¨®n ¨²til sobre la ruta y sobre alojamientos en la zona.