Surf a 3.400 metros de altura en Per¨²
Las fr¨ªas aguas de la laguna de Piuray, cerca de Cuzco, acogen un programa de ¡®paddle surf¡¯ y sensibilizaci¨®n ecol¨®gica para los j¨®venes
A m¨¢s de 3.400 metros de altura sobre el mar, entre las monta?as de la sierra peruana, hay once tablas de surf sobre el agua. Decenas de ni?os de la comunidad de Pongobamba, en Chinchero, acaban de surcar la laguna de Piuray, situada a unos 30 kil¨®metros de Cuzco. Surfers andinos que participan en el programa de Las Sirenas y Tritones de Piuray, que ha puesto a disposici¨®n de la comunidad un deporte nunca visto en esta zona de Per¨²: el stand up paddle o paddle surf, una modalidad de este deporte que consiste en remar de pie encima de una tabla de grandes dimensiones con la ayuda de un remo.
El proyecto, organizado por la empresa SUP Cuzco, naci¨® en diciembre del 2013 gracias con la idea de hacer algo divertido para la comunidad. Luego adquiri¨® m¨¢s envergadura y hoy conecta a los peque?os con su lago, al que le ten¨ªan miedo porque una vez al a?o se ahogaba una persona. Ahora chapotean y se salpican una de las piscinas naturales m¨¢s hermosas del mundo.
La Laguna de Piuray es un mar de leyendas. La m¨¢s sonada es que la ciudad original de Cuzco est¨¢ bajo la superficie, inundada por un desastre natural de supuesto origen divino y castigador. Se dice incluso que las campanas de la iglesia suenan a las doce de la noche.
Las aguas de Piuray tienen en una media de temperatura de ocho grados y una profundidad m¨¢xima de 50 metros. Abunda un pez comestible llamado carachi, que entre mayo y junio se ve afectado por un fen¨®meno que nadie ha acertado a explicar bien (los locales dicen que el agua ¡°se voltea¡±): los peces amanecen muertos y flotando en la superficie.
Surf y sensibilidad ecol¨®gica
David Otalvaro, colombiano y fundador del proyecto junto al lime?o ?lvaro Bedoya, dice que el verdadero objetivo es fomentar la responsabilidad ambiental y el desarrollo econ¨®mico. Lo cierto es que esta laguna gigante que da vida a Pongobamba y abastece de agua a Cuzco no est¨¢ precisamente cuidada. Adem¨¢s, el distrito de Chichero acoger¨¢ en el futuro el nuevo aeropuerto internacional del Cuzco, convirti¨¦ndose en una zona de mayor actividad econ¨®mica, multiling¨¹e y din¨¢mica. Por eso, adem¨¢s de surf, el proyecto incide en la formaci¨®n de los j¨®venes de Pongobamba, y cuenta con voluntarios que imparten clases de ingl¨¦s a las sirenas (chicas) y a los tritones (chicos).
Las sesiones se realizan los domingos por la ma?ana. Antes de entrar al agua, David dirige el calentamiento, que combina yoga y gimnasia, para despu¨¦s, ya enfundados en sus neoprenos, practicar con el remo y la tabla sobre las fr¨ªas aguas de Piuray. ?lvaro se encarga de depurar la t¨¦cnica de los cursillistas, especialmente de los que nunca han remado antes.
Despu¨¦s, el resto de la clase mezcla un paisaje inveros¨ªmil de monta?as, nieve, un espejo de agua y ni?os riendo sobre tablas de surf. La laguna es tan grande que parece absorber el sonido del mundo y convertirlo en el m¨¢s bello silencio de todos, una especia de canto primario de la naturaleza.
Aunque el proyecto todav¨ªa anda falto de recursos ¨Cvoluntarios, tablas y trajes de neopreno, entreo otros¨C, son optimistas sobre su desarrollo y siguen remando para seguir ofreciendo a los ni?os de esta comunidad andina esta experiencia acu¨¢tica, sin miedo y con diversi¨®n.
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