El trago m¨¢s dulce del Priorat

Hay que ser muy ma?oso al volante para transitar con cierta velocidad por las serpenteantes carreteras del Priorat, que, adentr¨¢ndose en un mar de empinados vi?edos, unen los peque?os pueblos de esta acurrucada comarca. En todo su conjunto suma apenas 10.000 habitantes y la capital, Falset, a media hora de distancia de Tarragona y Reus, cuenta con poco m¨¢s de 2.500 vecinos. En la porticada plaza de la Quartera se halla el palacio de los Duques de Medinaceli (1630), actual sede del ayuntamiento. La misma plaza tambien da cobijo al palacio de los Condes de Azara o Casa Grande, de estilo renacentista y fechado del siglo XVIII. Sin embargo, si de algo presume Falset es de su modernista cooperativa agr¨ªcola, proyectada por C¨¦sar Martinell, el que fuera disc¨ªpulo de Gaud¨ª.

Todo en estos lares gira alrededor de la uva, del mosto y de su fermentaci¨®n. Cada mes de mayo se celebra la popular Feria del Vino. Las botellas que salen de aqu¨ª lucen en sus etiquetas una marca que las identifica como DOQ Priorat o DO Montsant. Solo una fina l¨ªnea, imposible de determinar para el ojo profano, diferencia los caldos nacidos en uno u otro costado. El inclinado suelo atiborrado de pizarrosas llicorellas es fuente de sustancia y de minerales para las cepas y de ellas nace un vino que, por sus caracter¨ªsticas de vigor y fuerza, ha convertido esta remota regi¨®n de la Catalu?a interior en un punto de referencia para los amantes de la viticultura.

Olores de barril

Desde las paredes de Siurana y Margalef, aut¨¦nticos templos de la escalada en roca, se tiene una visi¨®n hermosa de la comarca. Abajo, con los pies en el suelo, Torroja de Priorat, Cornudella de Montsant, Poboleda, Porrera o las Vilella (la Alta y la Baixa) rezuman aroma de vino. Mismos olores de barril y misma estampa de peque?o pueblo de casitas api?adas presenta Gratallops. All¨ª, donde la espectacular bodega de ?lvaro Palacios da la bienvenida al viajero, se suceden casi tantas bodegas como vecinos.

Carles Pastrana viste camisa vaquera y peina melena canosa. Cuando desgrana los motivos que lo llevaron al Priorat, all¨¢ por los ochenta, exhibe su entusiasmo por los vergeles, la vid y las ra¨ªces. Pasi¨®n y devoci¨®n por la tierra o, en este caso, por las piedras. Porque si algo abunda en el Priorat son los guijarros negruzcos de pizarra. Su bodega, Clos de l¡¯Obac (el nombre de la firma es Costers del Siurana), produce el vino Clos de l¡¯Obac, que fue bautizado como Miserere. ¡°Es lo que debieron exclamar los monjes de Escaladei cuando tuvieron que arar la tierra: miserere nobis (ten piedad de nosotros)¡±, ironiza Pastrana. Suelo inc¨®modo, duro y tan ¨¢spero a¨²n hoy como lo pudiera ser para aquellos monjes que en el siglo XII fundaron la Cartuja de Santa Maria de Escaladei. Terreno fastidioso para andar pero enriquecedor para las uvas.

Sobre estos cimientos ha crecido la bodega Clos de l¡¯Obac, donde empez¨® todo. Diez intr¨¦pidos camaradas, ahora se les llamar¨ªa ¡°emprendedores¡±, se unieron en 1990 para elaborar un vino que diera que hablar. Eran j¨®venes y m¨¢s de uno les tildaba de locos porque, por ejemplo, buscando un fruto m¨¢s poderoso y gustoso rebajaron las producciones de las vides de manera dr¨¢stica. ¡°Con 30 hect¨¢reas de terreno puedes obtener, f¨¢cil, medio mill¨®n de kilos de uva. Nosotros lo reducimos a un 10%¡±.

Locos, quiz¨¢s, pero no ignorantes. En el equipo se ten¨ªa conocimiento del tema vin¨ªcola porque all¨ª estaban, entre otros, ?lvaro Palacios, Josep Lluis P¨¦rez o Ren¨¦ Barbier. Unos meses m¨¢s tarde de aquel arranque produjeron 30.000 botellas. ¡°Nos repartimos 250 cajas de doce cada uno¡±. Fue un ¨¦xito. La californiana Wilson Daniels, la distribuidora de los prestigiosos caldos Roman¨¦e-Conti, se qued¨® con las 3.000 botellas de ?lvaro Palacios. Semejante suerte corrieron las otras botellas. ¡°Gust¨® mucho, se reparti¨® por medio mundo¡±, recuerda Pastrana.

La Denominaci¨®n de Origen (DO) Priorat exporta hoy el 60% de los vinos que produce. Aquella uni¨®n inicial poco a poco fue desmig¨¢ndose y cada uno termin¨® haciendo la guerra por su cuenta. Hubo quien tuvo m¨¢s ¨¦xito que otros.

Daphne Glorian, una abogada suiza que lleva m¨¢s de 25 a?os en el Priorat, tambi¨¦n estaba en aquel grupo de alquimistas. Hoy trabaja su exclusivo Clos Erasmus con unas maneras muy artesanales y hace producciones de solo 3.000 botellas. La mayor¨ªa est¨¢n vendidas antes de cruzar la puerta de la bodega.

Carles Pastrana prefiere no entrar en detalles sobre precios o clientes. Explica que la buena reputaci¨®n cosechada por Clos de l¡¯Obac hizo imposible controlar las producciones entre los a?os 1990 y 2002. Comenta que ¡°ha habido quien bloque¨® toda la producci¨®n de un a?o¡± y a?ade que los motivos est¨¢n en que ¡°el vino es una fuente de placer pero tambi¨¦n una inversi¨®n¡±. ?Y qu¨¦ se consigue adquiriendo toda la a?ada de un vino? ¡°Es como hacer una opa hostil¡±, dice. ¡°Autom¨¢ticamente controlas la a?ada y una botella que tiene un precio de 85 euros pasa a costar de golpe tranquilamente 300 euros¡±.

En una sala de la bodega queda una peque?a reserva de botellas de las producciones ¡°desaparecidas¡±. Pastrana dice que no las vende ¡°por nada del mundo¡±. ?Por nada? ?Y si viniera Messi ofreciendo un buen precio? ¡°Bueno, si es Messi le pongo 20 botellas gratis, pero que venga aqu¨ª a tom¨¢rselas con nosotros¡±.

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