Elefantes y leones en Sud¨¢frica

El Parque Nacional Kruger es la gran reserva natural de Sud¨¢frica y el mejor lugar para observar los "cinco grandes", como se refieren los cazadores a los animales salvajes m¨¢s dif¨ªciles de capturar: elefante africano, leopardo, le¨®n, rinoceronte y b¨²falo. Este quinteto es el m¨¢s apreciado por los 1,6 millones de visitantes que acudieron en el ¨²ltimo a?o al parque africano. Ofrecemos algunas pistas para disfrutar de este magn¨ªfico entorno natural, ya sea con un safari, mediante una ruta senderista o en bicicleta.

Situado en el noreste de Sud¨¢frica, el parque Kruger abri¨® sus puertas en 1927 y su nombre se debe a Paul Kruger, presidente en 1898 de la Rep¨²blica de Transvaal. El presidente Kruger estableci¨® la primera reserva de caza de la zona, preocupado por la disminuci¨®n de la vida salvaje en la regi¨®n debido la caza furtiva y el aumento del comercio de pieles y marfil. El parque se extiende 360 kil¨®metros de norte a sur y 65 kil¨®metros de este a oeste y tiene una extensi¨®n de 19.485 kil¨®metros cuadrados. La reserva se uni¨® a otros parques de los vecinos Mozambique y Zimbabue, sumando una extensi¨®n de 35.000 metros cuadrados y convirti¨¦ndose en la reserva m¨¢s grande de ?frica.

Los amantes de la flora y la fauna encontrar¨¢n aqu¨ª todo tipo de animales: aproximadamente 150 especies de mam¨ªferos, m¨¢s de 500 p¨¢jaros, 115 reptiles, unos 50 peces, 34 anfibios, 225 mariposas, 335 arboles y m¨¢s de 2.000 especies de arbustos. El respeto a los animales es primordial y queda claro en este lema del parque: Take nothing but photographs, leave nothing but footprints (No tome m¨¢s que fotograf¨ªas, no deje m¨¢s que sus huellas). La reserva cuenta con m¨¢s de 250 yacimientos arqueol¨®gicos de la temprana Edad de Piedra y Edad del Hierro.

Los interesados en las labores de conservaci¨®n, investigaci¨®n, cuidado de animales y rescate de rinocerontes pueden visitar HESC (Hoedspruit Endangered Species Centre). En este centro de rescate y salvaguarda de especies vulnerables situado en Hoedspruit explican en un interesante recorrido de dos horas su labor de conservaci¨®n. Aqu¨ª se puede ver al guepardo, el mam¨ªfero m¨¢s veloz, y muchas otras especies. Uno de los ejemplos de su labor es el de una cr¨ªa de rinoceronte, llamada Geertjie, que al llegar al centro fue adoptado por Lammie, una cabra. Geertjie ya es mayor y ahora trata de comportarse como su madre adoptiva. Hoy en d¨ªa siguen yendo a todas partes juntos, como puede verse en este v¨ªdeo.

Kruger est¨¢ abierto todo el a?o pero el mejor momento para avistar animales es al principio de los meses de invierno (junio a agosto), cuando el parque est¨¢ m¨¢s seco y los animales son m¨¢s visibles y se re¨²nen alrededor de lagunas y pozos. Algunos visitantes prefieren los meses de verano (octubre a marzo) por la exuberante vegetaci¨®n. En los meses de oto?o (marzo-abril) se puede ver la espectacular migraci¨®n del impala y otros animales, mientras que noviembre y diciembre deleitan con el nacimiento de las cr¨ªas.

Senderismo y acampadas

El parque ofrece una amplia gama de actividades para los amantes de la naturaleza: se pueden hacer rutas de senderismo o en bicicleta con gu¨ªas armados, safaris privados en veh¨ªculos 4x4 y acampadas nocturnas, entre muchas otras opciones. Si se prefiere ir por libre, se puede alquilar un coche. Una propuesta consiste en visitar la parte sur del parque y conducir de Skukuza a Berg-en-Dal, Crocodile Bridge, Lower Sabie y luego de vuelta a Skukuza, lugar que posee el campamento m¨¢s grande y cuenta con m¨²ltiples actividades y lugares de inter¨¦s hist¨®rico. La segunda opci¨®n es conducir alrededor del campamento de Satara, justo en el centro del parque y cerca de la puerta de acceso Orpen, que tiene varias lagunas y abrevaderos y aseguran la concentraci¨®n de animales y la interacci¨®n con leones.

Hay m¨²ltiples opciones de alojamiento dentro de los l¨ªmites del Parque Nacional que var¨ªan desde zonas de acampada a establecimientos lujosos. Tambi¨¦n hay muchas casas de hu¨¦spedes, albergues, hoteles y villas de uso exclusivo situadas cerca de las puertas de acceso al parque.?

El precio de acceso por un d¨ªa para visitantes Internacionales es de unos 15 euros para adultos y 7,5 euros para menores de 12 a?os. Hay cuotas m¨¢ximas de visitantes por d¨ªa y por puerta de acceso, por lo que se recomienda llegar a la puerta de su elecci¨®n lo antes posible, sobre todo en per¨ªodos de temporada alta. Estas normas no afectan a los hu¨¦spedes con reservas de alojamiento.De octubre a marzo, las puertas abren a las 5.30 y cierran a las 18.30; el resto de los meses, abren a las 6.00 y cierran a las 18.00.

Si se decide viajar en coche, el trayecto desde Johannesburgo a las puertas de acceso situadas al sur del parque es de 420 kil¨®metros; a las puertas centrales, unos 470 kil¨®metros, y a las puertas del norte, unos 550. El Aeropuerto Internacional Kruger?Mpumalanga tiene vuelos directos desde Durban, Ciudad del Cabo y Johannesburgo con South African Airways; a Phalaborwa se puede llegar desde Johannesburgo con Airlink y a Hoedspruit desde Johannesburgo con SA Express.

Consejos pr¨¢cticos

La extensi¨®n del parque, las condiciones clim¨¢ticas y la interacci¨®n con los animales merecen unos cuantos consejos pr¨¢cticos para disfrutar al m¨¢ximo de la visita:

- Como regla general, el recorrido entre campamentos sin paradas es de aproximadamente una hora. Se aconseja no intentar abarcar demasiado en una vez, sino conducir lentamente y planear unas tres horas entre campamentos para poder hacer paradas en las lagunas y r¨ªos y posibles escondites de los animales. Planificar el tiempo es importante tambi¨¦n para asegurarse la salida del parque o la llegada al campamento antes de que cierren las puertas. En temporada alta hay mucho tr¨¢fico y los l¨ªmites de velocidad son de 50 kil¨®metros hora en carreteras de alquitr¨¢n y de 40 en grava.

- Los mejores avistamientos suceden por la noche, cuando los carn¨ªvoros aprovechan para atrapar a sus presas indefensas. Se aconseja reservar un recorrido nocturno, llevar una linterna y caminar alrededor del per¨ªmetro del campamento. Cuando se va por libre los mejores momentos de observaci¨®n son temprano por la ma?ana y al atardecer. A mediod¨ªa se suelen concentrar en las lagunas.

- Consultar los tableros de avistamientos de los campamentos en los que gu¨ªas y otros visitantes indican donde han visto animales, especialmente los cinco grandes. Aunque es bastante dif¨ªcil toparse con todos ellos esta informaci¨®n ayuda mucho para planear el recorrido.

- Conducir despacio para no asustar a los animales y, al parar, dejar el coche en marcha hasta que se acostumbren a la presencia antes de apagar el motor. En todo caso, aparte de en las ¨¢reas designadas, los visitantes deben permanecer en sus veh¨ªculos y ninguna parte del cuerpo puede sobresalir de la ventana o techo solar.

- El parque Kruger tiene un clima subtropical caliente y la mayor parte del a?o la temperatura es superior a los 25 grados. En muchas ocasiones se alcanzan los 38 grados. No hay que subestimar el sol africano y las quemaduras, as¨ª que no sobran los sombreros de ala ancha, gafas de sol, protecci¨®n solar y mucha agua.

- El parque est¨¢ situado en una zona afectada por la malaria, por lo que se aconseja consultar con el m¨¦dico antes del viaje y llevar lociones para las picaduras de insectos.

- La temperatura varia mucho entre la ma?ana y la noche, por lo que se recomienda una chaqueta ligera y llevar varias capas para el atardecer. Tambi¨¦n conviene vestir con ropa ligera de algod¨®n en tonos claros y evitar el rojo, que atrae a los animales.

- Si se hace una ruta a pie son precisas un buen par de zapatillas o zapatos de senderismo.

- Nadie olvida la c¨¢mara de fotos, pero se aconseja llevar tambi¨¦n cargador y tarjetas de memoria de repuesto.

- No se debe alimentar a los animales, ni siquiera a los monos que se re¨²nen en los campamentos. Alimentarlos puede convertirlos en agresivos.