Mol¨ª del Mig, descanso en un viejo molino de l¡¯Empord¨¤

Se refer¨ªa Josep Maria Deulofeu a un estorbar lo m¨ªnimo para que sus dise?os expresaran la sobriedad, sencillez y car¨¢cter placentero del paisaje ampurdan¨¦s, tocado por la tramontana, pero inconfundiblemente relajante y lujuriante a los ojos del viajero audaz. Lo subrayaba orgulloso de recibir el premio de arquitectura Girona 2006 por sus planos de un molino del siglo XV que deb¨ªa ser transformado en un alojamiento tur¨ªstico en medio de una finca espl¨¦ndida, ajardinada, de siete hect¨¢reas roturadas por hileras de cipreses y frutales a escasa distancia del puerto de l¡¯Estartit y las islas Medas. En el hotel Mol¨ª del Mig, el viejo edificio industrial se pudo conservar tal cual, sin aderezos superfluos. A su vera se le ados¨® un paralelep¨ªpedo somero, semiacristalado, de factura minimalista. As¨ª como otros tres bloques narigudos, igualmente minimalistas, con amplias terrazas abiertas al campo y dos dormitorios ideales para albergar a familias enteras.

En verano, el vergel resguarda las zonas nobles del emprendimiento, tanto en sus m¨®dulos s¨®lidos, delineados con lienzos rotundos, reafirmantes del paisaje, como en la arboleda que oculta la piscina. Da gusto repantingarse por horas bajo las sombrillas. La clientela m¨¢s activa juega al p¨¢del (posee tres pistas exteriores acristaladas) o practica cicloturismo, que por ello el hotel exhibe su distintivo de bike-friendly.

En el torre¨®n original se ha habilitado un sal¨®n para reuniones, complemento rom¨¢ntico de otras salas dotadas de m¨¢s luz y espacios di¨¢fanos, ambientados con elementos mobiliarios y l¨¢mparas de dise?o contempor¨¢neo. El comedor, tambi¨¦n con vistas al verde, resume el alto nivel de la cocina ampurdanesa, antes incluso de que Ferran Adri¨¤ despuntara en las inmediaciones. Un museo-biblioteca en el coraz¨®n hist¨®rico de la mas¨ªa, adosado a la recepci¨®n, informa al reci¨¦n llegado. Espaciosas, luminosas y un punto minimalistas, las habitaciones reiteran la premisa est¨¦tica de la simplicidad y las panor¨¢micas abiertas a la vegetaci¨®n estructurada de la finca. Mientras 5 de ellas se aposentan en el molino original y 10 en la nueva construcci¨®n, 3 cajas con una habitaci¨®n doble y una junior suite en cada una de ellas conforman el n¨²cleo principal del alojamiento.

Y lo ideal para toda vacaci¨®n: el equipo de profesionales est¨¢, pero no molesta.