Por las grutas de Osimo
El contratenor Nacho Castellanos nos descubre sus rincones favoritos de la regi¨®n italiana de las Marcas

Adem¨¢s de ser cantante, a Nacho Castellanos le interesa investigar los recursos de la voz. Estudi¨® canto l¨ªrico en el London Centre of Contemporary Music de la capital brit¨¢nica, pero su b¨²squeda de buenos maestros de canto le llev¨® a Osimo, un lugar remoto en la regi¨®n italiana de las Marcas, donde encontr¨® a dos profesoras.
?Cu¨¢ndo se instal¨® en Osimo?
En 2018 me hablaron de dos profesoras de canto, Lisa Paglin y Marianna Brilla, que viv¨ªan recluidas all¨ª y que trabajaban la voz de un modo especial. Fui a visitarlas y en 2019 me instal¨¦ en ese pueblo de la costa adri¨¢tica, a media hora de Ancona. Su casco hist¨®rico es muy peque?o y est¨¢ sobre una colina muy verde. All¨ª pas¨¦ el confinamiento y despu¨¦s volv¨ª a Espa?a.
?Osimo tiene su cl¨¢sico bar en el centro del pueblo?
Hay uno, pero cierra a las seis de la tarde. Y apenas hay gente joven. El pueblo permite encontrar estados meditativos. Yo, por primera vez, encontr¨¦ la oscuridad real entre sus arcos, callejuelas y traves¨ªas medievales. Tambi¨¦n era impactante el silencio.
?Hay algo que visitar en el pueblo?
Algo peculiar son sus 11 kil¨®metros de grutas subterr¨¢neas que datan de los primeros cristianos y que se pueden recorrer parcialmente. En ellas se celebran conciertos.

?El mar est¨¢ cerca?
S¨ª, porque Osimo est¨¢ junto al puerto de Ancona, que es muy importante para el comercio con Grecia y ?frica. Adem¨¢s de su proximidad al mar, tiene un monte muy cerca, el Conero.
Aparte de estudiar y ensayar, ?qu¨¦ hac¨ªa en su tiempo libre?
Daba largos paseos en los que recorr¨ªa la muralla. Tambi¨¦n iba a unas fuentes romanas, que eran como unos lavaderos en ruinas. Y sal¨ª de excursi¨®n, porque era f¨¢cil moverse en autob¨²s. Fui a Recanati: un pueblo tambi¨¦n medieval, ciudad natal del poeta Giacomo Leopardi y del tenor Beniamino Gigli, que es la gloria local. All¨ª est¨¢ su casa-museo y su tumba piramidal. Tambi¨¦n visit¨¦ Macerata, que tiene mucha historia. En su teatro ovalado al aire libre, llamado Sferisterio, se celebra anualmente un festival de ¨®pera.
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